La Corte Suprema de EE.UU. dictaminó el lunes que no impedirá que un gran jurado obtenga las declaraciones de impuestos y otros registros financieros del expresidente Donald Trump como parte de una investigación criminal.
Los magistrados rechazaron la petición de Trump de dejar en espera un fallo de un tribunal inferior del 7 de octubre que ordena a la empresa de contabilidad del expresidente, Mazars USA, cumplir con una citación para entregar los impuestos y documentos a un gran jurado que fue convocado por el fiscal del distrito de Manhattan, el demócrata Cyrus Vance.
El gran jurado de Nueva York podrá obtener los registros y examinarlos en secreto, lo que significa que los registros no se harán públicos próximamente, aunque no se descarta la posibilidad de que se filtren a los medios de comunicación más importantes.
El tribunal emitió una sentencia de una sola frase el lunes (pdf): «Se deniega la solicitud de suspensión presentada al juez Breyer y remitida a la Corte». Los magistrados no proporcionaron ninguna explicación.
En julio, el más alto tribunal dictaminó que el presidente y cualquier otro ciudadano no está «categóricamente por encima del deber común de presentar pruebas cuando se le pide en un proceso penal». Sugirieron que Trump podría impugnar la citación de Vance con otros argumentos.
El año pasado, los abogados de Trump dijeron que el intento de revisar sus impuestos se hizo de mala fe y fue excesivo. La Corte Suprema también rechazó el alegato de «inmunidad absoluta» del expresidente.
Los abogados de Trump también habían dicho a la Corte Suprema que sufrirá un «daño irreparable» si los materiales son entregados al gran jurado.
«Incluso si la divulgación de sus papeles se limita a los fiscales y a los grandes jurados, el status quo nunca podrá ser restaurado una vez que se destruya la confidencialidad», afirmaron sus abogados en los documentos judiciales de octubre.
«Las medidas cautelares también están justificadas dado el daño irreparable que sufrirá el presidente sin una suspensión. Incluso si la divulgación de sus documentos se limita a los fiscales y a los grandes jurados, el status quo nunca podrá restablecerse una vez que se destruya la confidencialidad», escribieron en su apelación de 46 páginas.
Pero Vance dijo previamente que el retraso ha obstaculizado su investigación.
El expresidente «ha tenido múltiples oportunidades para revisar sus demandas constitucionales y estatales, y en esta coyuntura no proporciona ningún motivo para un mayor retraso», dijo Vance en aquel momento. «Su solicitud de alivio extraordinario debe ser denegada, y se debe permitir que el gran jurado haga su trabajo».
Las citaciones de Vance abarcan desde enero de 2011 hasta agosto de 2019, en relación con la contratación por parte de la Organización Trump de su antiguo abogado, Michael Cohen.
Mazars USA dijo que no impugnará la citación y que cumplirá con las obligaciones legales.
The Epoch Times se puso en contacto con el Save America PAC de Trump para solicitarle comentarios.
El caso de la Corte Suprema es Trump contra Vance, 20A63.
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