El martes, la Corte Suprema rechazó una apelación de Johnson & Johnson que buscaba revocar un veredicto de USD 2000 millones a favor de mujeres que afirmaban que el producto de talco de la compañía causaba cáncer de ovario.
El fallo deja intacta una decisión de la corte de Missouri que otorga a las mujeres una suma considerable después de que un jurado determinara que los productos de talco de la compañía contienen asbesto y que el talco con asbesto puede causar cáncer de ovarios. El veredicto inicial fue de USD 4700 millones, pero una corte de apelaciones de Missouri redujo la sanción a USD 2000 millones y eliminó a dos mujeres de la demanda.
Johnson & Johnson niega que sus productos causen cáncer e insiste en que el talco que usa es de alta pureza y «solo se extrae de depósitos seleccionados en ubicaciones certificadas antes de ser molido en partículas relativamente grandes, de tamaño no respirable» y «se acepta como seguro para su uso en productos cosméticos y de cuidado personal en todo el mundo». La compañía dejó de vender su talco para bebés en Estados Unidos y Canadá en mayo de 2020, aunque continúa vendiendo el producto en otros mercados.
La controversia surge del hecho de que, en su estado natural, el talco se encuentra a menudo cerca del asbesto, una sustancia peligrosa que se sabe que causa cáncer de pulmón cuando se inhala. Cuando el talco se extrae muy cerca del asbesto, existe la posibilidad de contaminación cruzada y de que se presenten trazas de asbesto en el talco.
«Existe la posibilidad de contaminación del talco con asbesto y, por lo tanto, es importante seleccionar cuidadosamente los sitios de extracción de talco y tomar medidas para analizar el mineral lo suficiente», dijo la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) en una nota sobre la seguridad del talco.
Johnson & Johnson insiste en que su talco «proviene de fuentes de mineral confirmadas que cumplen con nuestras estrictas especificaciones que superan los estándares de la industria».
En marzo de 2020, la FDA publicó los resultados de un estudio de muestreo, que duró un año, y que examinó cosméticos que contienen talco al azar, en busca de asbesto. La FDA encontró 43 muestras que dieron negativo, mientras que nueve dieron positivo.
Cuando la FDA identificó una muestra positiva, la agencia notificó inmediatamente al público y trabajó con las empresas afectadas en el retiro de productos. Uno de esos retiros, que se remonta a octubre de 2019, se refería a una gran cantidad de talco para bebés de Johnson & Johnson, que según la FDA dio positivo por asbesto.
En su aviso de retiro del mercado, Johnson & Johnson reconoció que la FDA había encontrado «niveles secundarios de contaminación por asbesto crisotilo (no más de 0,00002 [por ciento]) en muestras de una sola botella comprada en un minorista online». La compañía agregó que tiene un «estándar de prueba riguroso para garantizar que su talco cosmético sea seguro» y que «miles de pruebas durante los últimos 40 años confirman repetidamente que nuestros productos de talco para el consumidor no contienen asbesto».
Pero la compañía enfrenta miles de demandas de mujeres que afirman que el asbesto en el polvo causó su cáncer.
J&J le dijo a Reuters en un comunicado que tiene problemas legales sin resolver que continuarán en litigio. Anteriormente dijo que enfrenta más de 19,000 reclamos similares.
«Los asuntos que se presentaron ante el tribunal están relacionados con el procedimiento legal, y no con la seguridad. Décadas de evaluaciones científicas independientes confirman que Johnson’s Baby Powder es seguro, no contiene asbesto y no causa cáncer», dijo la compañía.
Una investigación de Reuters en 2018 descubrió que Johnson & Johnson sabía durante décadas que algunos de sus productos de talco contenían trazas de asbesto y ocultó esa información a los reguladores y al público.
Con información de Reuters.
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