La Corte Suprema de Estados Unidos votó este martes a favor de mantener un mes más la moratoria de desahucios implementada en todo el país por los Centros de Control y Prevención de Enfermedades (CDC).
En una votación 5 – 4, el tribunal rechazó una petición de los propietarios para poner fin a la prohibición de desalojos que se puso en marcha en medio de la pandemia del virus del PCCh (Partido Comunista Chino), ya que algunos inquilinos tenían dificultades para pagar el alquiler. El fallo significa que la moratoria seguirá en vigor hasta el 31 de julio.
El gobierno de Biden anunció la semana pasada otra prórroga de la moratoria nacional sobre los desahucios, para apoyar a los inquilinos y evitar las ejecuciones hipotecarias. La medida había sido programada previamente para expirar el 30 de junio.
El juez Brett Kavanaugh, que emitió el voto decisivo, escribió en una opinión separada (pdf) que, aunque cree que los CDC se excedieron en su autoridad, votó en contra de poner fin a la moratoria nacional de desahucios solo porque está previsto que expire el 31 de julio, «y porque esas pocas semanas permitirán una distribución adicional y más ordenada» de los fondos que el Congreso destinó a proporcionar ayuda para el alquiler a los necesitados a causa de la pandemia.
Kavanaugh añadió que cualquier extensión adicional de la moratoria nacional de desalojos más allá del 31 de julio requeriría «una autorización clara y específica del Congreso» a través de una nueva legislación.
El presidente de la Corte Suprema, John Roberts, y los tres miembros liberales del tribunal también votaron a favor de mantener la moratoria de desahucios, mientras que los jueces Samuel Alito, Amy Coney Barrett, Neil Gorsuch y Clarence Thomas votaron en contra de la prórroga.
El gobierno de Biden dijo que no tiene previsto prorrogar la moratoria más allá del 31 de julio. Para entonces, la Casa Blanca anunció varias acciones para ayudar a los gobiernos estatales y locales a evitar una «avalancha de desahucios» cuando termine la moratoria.
La votación se produce en un momento en el que unos 6 millones de hogares se retrasaron en el pago del alquiler, según la Oficina de Protección Financiera del Consumidor.
Hay casi 110 millones de estadounidenses que viven en hogares de alquiler y entre 19 y 23 millones de ellos corren el riesgo de ser desahuciados antes del 30 de septiembre, según un estudio del Programa de Seguridad Financiera de Aspen.
La Casa Blanca anunció varias medidas para ayudar a los gobiernos estatales y locales a evitar una «avalancha de desahucios» cuando termine la moratoria.
Al respecto informó que hay más de 46,000 millones de dólares disponibles para el programa de Ayuda de Emergencia al Alquiler (ERA) que podrían utilizarse para apoyar a los inquilinos y propietarios vulnerables. Por lo tanto, los gobiernos estatales y locales «deben hacerlo mejor» a la hora de hacer llegar este dinero a las personas que lo necesitan, dijo la Casa Blanca en una hoja informativa.
El gobierno de Biden está instando a los tribunales estatales y locales a «adoptar prácticas contra el desahucio» para evitar una carrera hacia el desalojo y fomentar la mediación entre inquilinos y propietarios.
Además, el Departamento del Tesoro está permitiendo que los fondos destinados a los gobiernos estatales y locales y a las ayudas de emergencia al alquiler se utilicen para financiar planes de desahucio, incluyendo servicios de asesoramiento, navegación y jurídicos.
Como parte del plan para evitar los desahucios, la Casa Blanca también organizará una cumbre online de «líderes gubernamentales, judiciales, legales y comunitarios de 50 ciudades» para desarrollar soluciones y planes de acción específicos para cada comunidad con el fin de ayudar a los inquilinos y propietarios.
Con información de Emel Akan
Únase a nuestro canal de Telegram para recibir las últimas noticias al instante haciendo click aquí
Cómo puede usted ayudarnos a seguir informando
¿Por qué necesitamos su ayuda para financiar nuestra cobertura informativa en Estados Unidos y en todo el mundo? Porque somos una organización de noticias independiente, libre de la influencia de cualquier gobierno, corporación o partido político. Desde el día que empezamos, hemos enfrentado presiones para silenciarnos, sobre todo del Partido Comunista Chino. Pero no nos doblegaremos. Dependemos de su generosa contribución para seguir ejerciendo un periodismo tradicional. Juntos, podemos seguir difundiendo la verdad.
