El delegado Dan Cox (R-Frederick) con el apoyo de Donald Trump ganó las primarias del Partido Republicano de Maryland el 19 de julio al lograr una victoria sorprendentemente cómoda por sobre un fuerte rival del partido respaldado por un popular gobernador republicano que ha sido un crítico abierto del expresidente.
A continuación el delegado estatal de primer período se enfrentará a un carismático recién llegado político demócrata respaldado por Oprah Winfrey en las elecciones generales de noviembre.
Dos horas después del cierre de las urnas el 19 de julio, Cox, un abogado conservador respaldado por el expresidente Donald Trump, fue declarado ganador de las primarias republicanas para gobernador ante la exsecretaria estatal de Trabajo y Comercio Kelly Schulz.
Schulz contaba con el apoyo del gobernador republicano Larry Hogan, quien se enfrentó a Trump con frecuencia mientras estaba en la Casa Blanca. La mayoría esperaba que la carrera sería demasiado reñida y que se prolongaría durante días, sino semanas.
Pero las primarias entre Trump y Hogan no resultaron tan competitivas como se preveía, ya que Cox llevaba una ventaja de 37,000 votos o 56 por ciento de preferencias con el 77 por ciento del recuento.
También recibió un impulso de la Asociación de Gobernadores Democráticos, que gastó más de un millón de dólares en mensajes dirigidos a los republicanos en apoyo del conservador Cox, apoyado por Trump, frente al moderado Schulz.
La táctica es que Cox es demasiado conservador para tener éxito en una elección general en el entorno profundamente azul de los demócratas de Maryland.
Cox, de 47 años, promete que si es elegido presentará proyectos de ley para restringir los abortos, prohibir las mascarillas y los mandatos de vacunas, eliminar los derechos de los transexuales y autorizar una auditoría federal de las elecciones de 2020.
El delegado estatal se ha opuesto enérgicamente a las medidas de mitigación del COVID-19 de Maryland e impugnó la certificación de la victoria del presidente Joe Biden en 2020 tras observar el recuento de votos por correo en Filadelfia.
El bufete de abogados de Cox demandó a Hogan por las restricciones de COVID-19 y representó a un hombre que demandó a los funcionarios locales por detenerlo por no llevar una mascarilla en un centro de votación.
A su vez fletó autobuses para la manifestación del 6 de enero y, durante la protesta en el Capitolio, llamó «traidor» al vicepresidente Mike Pence en un mensaje de Twitter que luego borró.
En marzo, Cox acusó a Hogan de prevaricación en el cargo, robo de «la libertad y la propiedad del pueblo» y «privación de las libertades religiosas del pueblo» en un proyecto de ley para iniciar un procedimiento de destitución, pero nunca tuvo la audiencia.
«Dan Cox está haciendo un gran trabajo al postularse para gobernador de Maryland. Devolverá la dignidad a un Estado que es mucho más ‘rojo’ (republicano) de lo que cualquiera podría saber o creer. Dan luchará por nuestras escuelas, nuestros empleos y toda nuestra forma de vida y lo que es más importante, Dan acabará con el terrible reinado de Larry Hogan como RINO, derrotando a su sucesor de ‘Never Trump’, otro RINO de baja energía, Kelly Schulz», dijo Trump en una declaración del 12 de julio.
Schulz, de 53 años, fue nombrada por Hogan para su gabinete como secretaria del estado para el Departamento de Trabajo, Licencias y Regulación, y secretaria de Comercio del estado, donde lanzó la iniciativa «Innovación al descubierto» de Maryland.
Elegida para la Cámara de Representantes de Maryland en 2010, Schulz fue considerada como la «candidata del establishment» pero pregonando los «valores tradicionales» del Partido Republicano y triplicando las contribuciones a la campaña que recaudó Cox, sin la ayuda de un millón de dólares de la Asociación de Gobernadores Demócratas.
La plataforma de Shulz pedía ampliar la elección escolar, derogar un impuesto estatal que vincula los impuestos sobre la gasolina a la inflación, «tratar a los criminales como criminales», y añade la adopción de una «carta de derechos de los padres».
Su campaña dijo que Cox era «inestable» y «no apto para el cargo», citando la afirmación de Hogan en 2021 de que es un «chiflado de QAnon». Ella sostuvo que Cox sería derrotado en una elección general, señalando que los grupos demócratas estaban contribuyendo a su campaña.
Es probable que Cox se enfrente en noviembre a Wes Moore, un veterano de combate en Afganistán de los Rangers del Ejército de EE.UU., autor de best-sellers y banquero de inversiones que aventajaba al ex secretario de Trabajo de EE.UU. Tom Pérez por casi 35,000 votos con más del 61 por ciento del recuento contado la madrugada del 20 de julio.
Las proyecciones previamente indicaban una contienda mucho más reñida en las primarias demócratas para gobernador, con nueve candidatos que habían recaudado más de un millón de dólares en efectivo para la campaña. Las encuestas apuntaban a una carrera estrecha que probablemente no se definiría hasta dentro de unos días, sino semanas.
Entre los candidatos participaron algunos con largos currículos que reflejaban el reconocimiento de su nombre a nivel nacional y estatal: Pérez, el Contralor del Estado Peter Franchot, el exfiscal General de Maryland Douglas F. Gansler, el exsecretario de Educación de los Estados Unidos John B. King, Jr. y el funcionario de la Casa Blanca de Clinton, Jon Baron.
Pero Moore, de 43 años, al que Winfrey identificó hace una década como el que tiene el factor «it» tras escribir un libro de gran éxito, «The Other Wes Moore», emergió pronto como una fuerza en la campaña.
Winfrey también narró un anuncio de 30 segundos en favor de Moore. «Este momento en el que nos encontramos exige un tipo diferente de líder. Para gobernador en Maryland ustedes tienen uno en mi amigo Wes Moore».
Criado por una madre viuda e inmigrante jamaicana, Moore es el primer negro becado por la Universidad Johns Hopkins que, como director ejecutivo de la Fundación Robin Hood, recaudó cientos de millones de dólares para luchar contra la pobreza.
En sus discursos de campaña, Moore insiste en que todo el mundo merece las mismas oportunidades de éxito, y afirma que, como antiguo banquero de inversiones de Wall Street, sabe que Maryland puede ser más competitiva y más equitativa para que «nadie se quede atrás».
Su plataforma incluye un plan para combatir el cambio climático en sus primeros 100 días de mandato. Promete proteger el derecho al aborto, cerrar la brecha de riqueza racial y ayudar a los residentes de mayor edad y a los jubilados a permanecer en Maryland,
Moore dice a los votantes que él y su compañera de candidatura a vicegobernadora, Aruna Miller, ambos hijos de inmigrantes, son la única candidatura en las primarias de ambos partidos con experiencia legislativa, ejecutiva, militar y sin ánimo de lucro.
Moore no había sido declarado vencedor cuando aún faltaba por escrutar casi el 40% de los votos, pero tenía una ventaja de 9 puntos porcentuales sobre Pérez y 17 sobre Franchot.
Pérez, de 60 años, fue director de la División de Derechos Civiles del Departamento de Justicia de EE. UU. entre 2009 y 2013 y secretario de Trabajo entre 2014 y 16 en la administración Obama, antes de dirigir el Comité Nacional Demócrata durante varios años.
Franchot, de 74 años, un veterano de la guerra de Vietnam que sirvió en la Asamblea de Maryland durante 20 años antes de ser elegido para cuatro mandatos de cuatro años como contralor del estado es un populista que se describe a sí mismo como «una voz independiente y un fuerte vigilante fiscal» y «un verdadero demócrata» que representa «a los pequeños, no a los Rockefeller”.
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