A menos de una semana del día de Año Nuevo, un número cada vez mayor de ciudades y municipios han decidido suspender las celebraciones debido a la propagación de la variante ómicron del virus del PCCh (Partido Comunista Chino) y a pesar de que la cepa muestra síntomas más leves y menos hospitalizaciones.
La icónica celebración del Año Nuevo de la ciudad de Nueva York se llevará a cabo según lo planeado, pero tendrá un alcance reducido, dijo el alcalde demócrata saliente Bill de Blasio la semana pasada. Los fiesteros deberán usar mascarillas, mostrar prueba de vacunación y practicar medidas de distanciamiento social.
La celebración de la víspera de Año Nuevo en la ciudad de Nueva York del año pasado fue mucho más moderada, con solo unas pocas docenas de personas invitadas a Times Square. Muchos eran miembros de primeros auxilios o trabajadores de la salud.
Este año, las ciudades alemanas de Berlín, Frankfurt y Múnich cancelaron sus celebraciones de fuegos artificiales y prohibieron grandes reuniones debido a ómicron. Las celebraciones han sido canceladas en París, Francia; Roma, Italia; Edimburgo, Escocia; Londres, Inglaterra; y Nueva Delhi, India.
«Debido al aumento en los casos de COVID-19, hemos tomado la difícil decisión de cancelar nuestro evento de NYE en Trafalgar Square», escribió el alcalde de Londres, Sadiq Khan, en su cuenta de Twitter. «La seguridad de todos los londinenses debe ser lo primero».
Tampoco habrá espectáculo de fuegos artificiales sobre la Acrópolis en Grecia este año, dijo el ministro de Salud, Thanos Plevris, en una conferencia de prensa la semana pasada. Todas las celebraciones públicas de Navidad y Año Nuevo se suspendieron este año en Grecia, según Plevris.
Si bien ómicron se ha extendido rápidamente por Estados Unidos y el mundo desde que se descubrió el mes pasado, se han reportado más de una docena de muertes asociadas con la variante en todo el mundo. Dos nuevos estudios en el Reino Unido indican que la variante parece ser más leve que la cepa Delta, mientras que los funcionarios de salud en Sudáfrica y en otros lugares informaron menos hospitalizaciones y síntomas menos graves.
Semanas después de que se confirmaran los casos de ómicron en Alemania, la agencia de salud del país confirmó su primera muerte. El individuo tenía entre 60 y 79 años, dijo el Instituto Robert Koch de Alemania.
La directora de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés), Rochelle Walensky, dijo la semana pasada que en algunas partes de Estados Unidos, ómicron representa alrededor del 90 por ciento de las infecciones por COVID-19.
Aparte de la ciudad de Nueva York, algunas de las ciudades del mundo seguirán celebrando el Año Nuevo.
La capital de Tailandia, Bangkok, llevará a cabo celebraciones con restricciones, incluyendo el requisito de que las personas se vacunen, se sometan a pruebas en un plazo de 72 horas y se registren para asistir. Los noticias dicen que Ciudad del Cabo, Sudáfrica; Dubai, Emiratos Arabes Unidos; Las Vegas, Nevada; Sydney, Australia; y Taipei, Taiwán, continuarán celebrando sus fiestas, algunas de ellas con ciertas restricciones.
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