Las autoridades han declarado a una profesora cristiana culpable de «conducta profesional inaceptable» por negarse a enseñar «ideología LGBTQI extrema» en un centro de enseñanza secundaria de la Iglesia de Inglaterra (CofE).
Glawdys Leger, de 43 años, había sido profesora especializada en lenguas extranjeras modernas durante 12 años antes de ser despedida de la escuela Bishop Justus CofE en Bromley, Kent, en mayo de 2022.
La Sra. Leger, que cuenta con el apoyo del Christian Legal Center, dijo que fue «tratada como una criminal peligrosa» por negarse a impartir lecciones LGBTQI, que se habían incorporado a las lecciones de Educación Religiosa (RE), a los alumnos de séptimo año de la escuela.
LGBTQI+ es un término general para personas lesbianas, gays, bisexuales, transgénero y queer.
LGBTQI+
Christian Legal Center dijo que los materiales para RE titulados «¿Quién soy yo?» incluían presentar a los niños de 7° curso géneros como pansexual, asexual, intersexual y transgénero. La Sra. Leger había expresado sus creencias a los estudiantes durante una discusión sobre temas LGBT: «Dios cree que los humanos nacen hombres y mujeres y que la práctica LGBTQI es pecaminosa».
El jueves, el Christian Legal Center dijo que la Agencia de Regulación Docente (TRA) dictaminó que la maestra era culpable de «conducta profesional inaceptable». No llegó a prohibirle enseñar indefinidamente.
En una decisión y una carta enviadas a la Sra. Leger y sus abogados esta semana, la TRA dictaminó que «no se podía probar» que la Sra. Leger hubiera desprestigiado a la profesión o que su conducta fuera «contraria a los valores británicos fundamentales por su falta de tolerancia hacia quienes tienen creencias diferentes».
Acusada de no presentar una visión equilibrada
En respuesta al fallo en un comunicado, la Sra. Leger dijo que se sentía aliviada «por no tener prohibida la enseñanza en el Reino Unido».
«Sin embargo, me parece extremadamente alarmante que me hayan declarado culpable de discutir y debatir la enseñanza cristiana en una escuela cristiana durante una lección de educación física», dijo.
“Planteé lo que hice porque a los niños se les enseñaba una narrativa LGBTQI+ extrema en la escuela sin debate. Sin embargo, por plantear, expresar y enseñar las creencias cristianas sobre estos temas, se me ha acusado de no presentar una visión equilibrada», añadió.
Advirtió que cualquier escuela cristiana o religiosa «debe ser franca y honesta con los padres que creen que están enviando a sus hijos a una escuela cristiana, si ésta ya no se adhiere a las enseñanzas o creencias cristianas, o incluso a sus propias enseñanzas sobre la sexualidad humana».
«Deben ser transparentes con los padres en el sentido de que, en muchos casos, algunas escuelas cristianas están imponiendo ideologías profundamente controvertidas y dañinas a los niños sin el permiso o el conocimiento de sus padres», dijo.
Dijo que las autoridades han colocado «una marca significativa junto a mi nombre que verán los futuros empleadores potenciales».
Añadió que el «mensaje» de la TRA es que «los profesores cristianos no sólo deben guardar silencio sobre sus creencias, sino que deben promover activamente la ideología LGBT o correr el riesgo de ser severamente castigados e incluso perder sus carreras».
Andrea Williams, directora ejecutiva del Christian Legal Center, dijo: «Los organismos reguladores están creando un ambiente opresivo para los docentes que enfría el ambiente e impide la expresión de la fe cristiana en las escuelas y cualquier punto de vista alternativo o de equilibrio a la ideología LGBTQI+».
Ideologías marxistas anticristianas
Al comentar sobre el caso, el reverendo Calvin Robinson le dijo a The Epoch Times: «Realmente vivimos en un mundo al revés, donde ser cristiano en una institución cristiana es un delito punible con el despido».
Dijo que creía que «Glawdys está siendo perseguida por su fe».
«La escuela no sólo la despidió, sino que la denunció ante la Agencia de Regulación Docente, quien la consideró culpable de ‘conducta profesional inaceptable’”.
«Ya lo sabíamos, ahora oficialmente no es profesional ser cristiano en una escuela de la Iglesia de Inglaterra», añadió.
Robinson dijo que todo este escenario «está al revés».
«La Iglesia de Inglaterra debería estar rechazando la teoría de género y la teoría queer, estas ideologías marxistas anticristianas. La escuela debería haber defendido la postura de Glawdys ante la TRA, no doblegarla. En cambio, el CofE ha decidido ir incluso más allá de las directrices del gobierno al impulsar estas ideologías dañinas entre los niños a través del nuevo plan de estudios de la RSE. Parece que el departamento de educación del CofE está tan capturado por los liberales como la cámara de los obispos», añadió.
The Epoch Times se puso en contacto con CofE, el Departamento de Educación y Aquinas Trust para solicitar comentarios.
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