SAN FRANCISCO—Daniel Lurie, fundador sin ánimo de lucro y heredero de la fortuna de Levi Strauss, juró su cargo como 46.° alcalde de San Francisco en un acto presenciado por su esposa, Becca Prowda, sus hijos y miles de invitados el 8 de enero.
El nuevo alcalde dijo en su discurso inaugural que construiría una nueva estructura en su oficina que «permita una mayor responsabilidad y más oportunidades para que los departamentos de la ciudad trabajen juntos de forma eficaz para resolver nuestros problemas más urgentes».
Entre estos problemas, los más prioritarios para la administración de Lurie son la crisis de la droga, la falta de vivienda y la revitalización del centro de la ciudad, que se recupera lentamente.
«San Francisco es conocida desde hace mucho tiempo por sus valores de tolerancia e inclusión, pero nada de esos valores nos instruye para permitir que casi 8000 personas experimenten la falta de vivienda en nuestra ciudad, el tráfico de drogas generalizado, el consumo público de drogas y ver constantemente a personas en crisis nos ha robado nuestro sentido de la decencia y seguridad», dijo Lurie.
«Las buenas intenciones no son suficientes, los valores fuertes no son suficientes, debemos actuar con un enfoque sin disculpas en los resultados, y crear las soluciones que duren mucho más allá del mandato de esta administración».
Crisis del fentanilo
Lurie dijo que se propondría ante la Junta de Supervisores un paquete de ordenanzas sobre el estado de emergencia en relación con el fentanilo. Dicha legislación permitiría al Departamento de Policía de San Francisco (SFPD) y al Departamento del Sheriff desplazar recursos y personal para llevar a los narcotraficantes ante la justicia.
La nueva administración creará un centro de acogida a partir de esta primavera para que los primeros intervinientes lleven a personas de la calle con problemas de salud mental o drogadicción para que reciban tratamiento como tercera vía distinta del hospital o la cárcel, anunció Lurie.
«Esto creará mejores vías de acceso al tratamiento y dará a la policía autoridad para exigir responsabilidades a quienes rechacen la ayuda», afirmó.
Para reducir la población sin hogar en las calles, Lurie dijo que fomentaría las asociaciones público-privadas para 1500 camas adicionales de refugio de emergencia en seis meses.
También tiene previsto ampliar el programa Journey Home, que ofrece más transporte y apoyo a las personas dispuestas a reunirse con sus seres queridos o a recibir atención médica fuera de San Francisco.
Déficit presupuestario
San Francisco proyecta un déficit presupuestario de aproximadamente 799 millones de dólares, con un déficit de 245 millones de dólares en el año fiscal 2025 y 554 millones de dólares en el año fiscal 2026.
«Un problema de esta magnitud requiere que tomemos algunas decisiones dolorosas y repensemos la forma en que operamos», dijo Lurie. «Tenemos que priorizar los servicios esenciales y hacer las inversiones que son fundamentales para que San Francisco vuelva a funcionar».
Una de las formas de ahorrar dinero, dijo, es concentrar la inversión en proveedores de servicios de alto rendimiento.
«La distribución eficaz de nuestros recursos despejará el camino para la recuperación de San Francisco», dijo Lurie.
Una mejor coordinación entre departamentos será un «sello distintivo» de su administración para reducir costes, dijo.
San Francisco cuenta actualmente con al menos nueve equipos de calle operados por cinco departamentos diferentes, dijo Lurie, «a pesar de haber realizado una gran inversión de recursos y personal, nadie cree que la estructura actual esté funcionando».
Sugirió que el primer paso para racionalizar la respuesta de la ciudad a la crisis es «ordenar que todos los departamentos se correlacionen para construir y mantener un único cuadro de mando para las condiciones de las calles de cara al público».
«No se pueden construir soluciones sólidas sin buenos datos», dijo el alcalde.
Revitalizar el centro de la ciudad
«Hacer nuestras calles más seguras y limpias impulsará la revitalización de nuestro corredor del centro», dijo Lurie al anunciar el lanzamiento del Grupo de Trabajo de la Zona de Hospitalidad de la Policía de San Francisco.
Según Lurie, la nueva unidad de policía especializada creará un entorno más acogedor y seguro para trabajadores, compradores y visitantes en las zonas de Union Square, Market Street y Moscone Center.
Con tales esfuerzos, Lurie dijo que siente un imparable sentimiento de orgullo y optimismo, y «con ese impulso, debemos planificar proactivamente el próximo boom inmobiliario y económico».
«En nuestros primeros 100 días, tomaremos medidas audaces para permitir más viviendas en todos los niveles de renta y ayudar a las nuevas empresas y edificios a obtener sus permisos más rápidamente», dijo.
La gran petición de la fiscal
La fiscal del distrito de San Francisco, Brooke Jenkins, le dijo a la prensa que la gran petición al nuevo alcalde es «una estrategia de salud pública más sólida que no se limite a aceptar el consumo público de drogas o que la gente se tome su propio tiempo para averiguar cuándo quieren ayuda, sino que tenga puntos de referencia que cumplamos como ciudad para conseguir que la gente reciba tratamiento».
«Podemos hacer todo lo que esté en nuestras manos por parte de las fuerzas del orden para hacer frente al tráfico de drogas», dijo Jenkins, “pero tenemos que asegurarnos de que estamos sacando de nuestras calles a las personas que se están muriendo para que reciban tratamiento, y no podemos simplemente pasar por encima de ellos y seguir caminando cuando dicen que no lo quieren”.
La primera dama del estado, Jennifer Siebel Newsom, asistió a la ceremonia mientras el gobernador Gavin Newsom visitaba Los Ángeles, ciudad que enfrentaba fuertes incendios forestales. Otros asistentes fueron el Fiscal General Rob Bonta y el Presidente Pro Tem del Senado Estatal, Mike McGuire.
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