HORSESHOE BEACH, Florida — La tormenta tropical Debby se está desplazando amenazadoramente hacia algunas de las ciudades sureñas más históricas de Estados Unidos donde se espera que provoque aguaceros prolongados e inundaciones durante todo el día del martes, después de azotar Florida y obligar a rescatar a cientos de personas de sus casas inundadas.
El Centro Nacional de Huracanes informó de que las lluvias de la tormenta, que causaron la muerte de al menos cinco personas, estaban provocando inundaciones repentinas de hasta 76 centímetros (30 pulgadas) en algunas zonas.
El centro de la tormenta estaba sobre el sureste de Georgia el martes temprano, con vientos máximos sostenidos cerca de 45 mph (75 kph) y se movía hacia el noreste cerca a una velocidad de 7 mph (11 kph). Se espera que el centro de Debby se aleje de la costa de Georgia el martes, horas más tarde. Se prevé que se fortalezca un poco el miércoles y el jueves a medida que se desplace mar adentro, antes de que se mueva tierra adentro el jueves sobre Carolina del Sur.
«Protéjanse», dijo a los residentes Van Johnson, el alcalde de Savannah, en Georgia, en un livestream en las redes sociales el lunes por la noche. «Se espera que sea un día duro», dijo refiriéndose al martes.
Más de 6 pulgadas (15 centímetros) de lluvia habían caído hasta el lunes en el aeropuerto de Savannah, pero más lluvia cayó durante la noche y continuaba cayendo el martes, informó el Servicio Meteorológico Nacional.
Se emitieron advertencias de inundaciones repentinas en Savannah, Georgia, y Charleston, Carolina del Sur, entre otras zonas de la costa de Georgia y Carolina del Sur. Tanto Savannah como Charleston anunciaron toques de queda en la noche del lunes al martes.
En Carolina del Sur, el director interino de emergencias del condado de Charleston, Ben Webster, calificó a Debby de «acontecimiento histórico y potencialmente sin precedentes», mencionándolo tres veces en una sesión informativa de 90 segundos el lunes.
Además del toque de queda, el plan de emergencia de la ciudad de Charleston incluye sacos de arena para los residentes, la apertura de aparcamientos para que los residentes puedan estacionar sus coches por encima de las aguas de inundación y un sistema de mapas en línea que muestra qué carreteras están cerradas debido a las inundaciones.
En Edisto Beach, Carolina del Sur, un tornado tocó tierra el lunes por la noche, dañando árboles, casas y derribando líneas eléctricas, informó la oficina del sheriff del condado de Colleton en las redes sociales. No se informó de heridos de inmediato, dijeron las autoridades.
El servicio meteorológico siguió emitiendo avisos de tornado hasta bien entrada la noche del lunes para algunas partes del estado, incluida Hilton Head Island.
A las afueras de Hilton Head Island, el músico Nick Poulin no estaba demasiado preocupado por Debby, ya que su equipo estaba en el interior y se aseguró de que su coche no estuviera aparcado bajo los árboles para que no le alcanzara la caída de ramas.
«Nací y crecí aquí, así que hemos tenido muchas tormentas», dijo el músico. «Normalmente, no son tan malas como la gente las pinta».
Debby tocó tierra en la costa del Golfo de Florida a primera hora del lunes como huracán de categoría 1. Se ha debilitado hasta convertirse en tormenta tropical mientras se desplaza lentamente, empapando y provocando zonas de inundaciones catastróficas en partes del este de Georgia, la llanura costera de Carolina del Sur y el sureste de Carolina del Norte, lo que se prevé hasta el miércoles.
Alrededor de 500 personas fueron rescatadas el lunes de casas inundadas en Sarasota, Florida, una ciudad costera popular entre los turistas, dijo el Departamento de Policía de Sarasota en una publicación en las redes sociales. Justo al norte de Sarasota, las autoridades del condado de Manatee dijeron en un comunicado de prensa que 186 personas fueron rescatadas de las aguas de las inundaciones.
«Esencialmente, hemos tenido el doble de la cantidad de lluvia que se predijo que tendríamos», dijo el jefe de bomberos del condado de Sarasota, David Rathbun, en las redes sociales.
El gobernador de Florida, Ron DeSantis, advirtió que el estado podría seguir viendo amenazas a medida que las vías fluviales al norte de la frontera se llenen y fluyen hacia el sur.
«Es una tormenta muy saturante y húmeda», dijo el gobernador. «Cuando lleguen al tope con el agua que va a bajar de Georgia, es algo por lo que vamos a estar en alerta no solo durante el día de hoy, sino durante la próxima semana».
Cinco personas murieron a causa de la tormenta hasta el lunes por la noche, entre ellas un camionero que perdió el control de la parte tractora en la Interestatal 75 en la zona de Tampa, volcando sobre un muro de hormigón y quedando al borde antes de que la cabina cayera al agua. Los buzos de la oficina del sheriff localizaron al conductor en la cabina, un hombre de 64 años de Mississippi, a 12 metros bajo la superficie, según la Patrulla de Carreteras de Florida.
Un niño de 13 años murió el lunes por la mañana después de que un árbol cayera sobre una casa móvil al suroeste de Gainesville, Florida, según la oficina del sheriff del condado de Levy. En el condado de Dixie, justo al este de donde la tormenta tocó tierra, una mujer de 38 años y un niño de 12 años fallecieron en un accidente de tránsito en la carretera el domingo por la noche.
En el sur de Georgia, un joven de 19 años murió el lunes por la tarde cuando un gran árbol cayó sobre el porche de una casa en Moultrie, informó The Atlanta Journal-Constitution.
Más de 140,000 clientes seguían sin suministro eléctrico en Florida y Georgia el martes por la mañana, frente a un pico de más de 350,000, según PowerOutage.us y Georgia Electric Membership Corp. Casi 12,000 más estaban sin electricidad en Carolina del Sur a primera hora del martes.
Más de 1600 vuelos también fueron cancelados en todo el país el lunes y más de 550 vuelos fueron cancelados el martes temprano, muchos de ellos desde y hacia aeropuertos de Florida, según FlightAware.com.
El presidente Joe Biden aprobó una solicitud del gobernador de Carolina del Sur para una declaración de emergencia, tras su aprobación anterior de una solicitud similar de Florida. El gobernador de Georgia, Brian Kemp, dijo a su vez que ha pedido a Biden que emita una declaración de emergencia federal preventiva para acelerar el flujo de ayuda federal al estado.
La vicepresidenta Kamala Harris pospuso una parada de campaña prevista para el jueves en Savannah.
Carolina del Norte también se encuentra bajo estado de emergencia después de que el gobernador Roy Cooper lo declarara en una orden ejecutiva firmada el lunes. Varias áreas a lo largo de la costa del estado son propensas a las inundaciones, como Wilmington y los Outer Banks, según el Programa de Mapeo de Llanuras Inundables de Carolina del Norte.
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