FORT PIERCE, Florida— Una abogada de Ryan Routh, el hombre sospechoso de intentar asesinar al entonces candidato presidencial Donald Trump a principios de este año, indicó en la corte el 11 de diciembre que su cliente estaba mostrando signos de enfermedad mental.
Durante una conferencia de estado con la juez Aileen Cannon, la abogada defensora, Kristy Militello, declaró que los testigos habían descrito a Routh como alucinante y delirante. La Sra. Militello afirmó que podría llevar meses entrevistar a expertos para evaluar la salud mental de Routh.
La jueza Cannon se mostró escéptica y preocupada por qué la corte necesitaría un calendario más concreto o específico para obtener la opinión de los expertos. La defensa también dijo que buscó acceso a los registros escolares de la infancia de Routh en un aparente intento de captar su historial de salud mental.
El fiscal federal adjunto, John Shipley Jr., criticó la idea de que la defensa necesitara revisar registros escolares de hace décadas.
«La demencia se produce en el momento del delito», dijo Shipley, haciendo hincapié en la capacidad de Routh para distinguir entre el bien y el mal en el momento del delito.
Las consideraciones previas al juicio sobre la aptitud mental de Routh podrían aumentar los posibles retrasos en el caso, el que Cannon tiene previsto juzgar en febrero. A principios de esta semana, la defensa expresó su preocupación por la amplitud del material pruebas en la fase antes del juicio y solicitó que Cannon retrasara el juicio hasta al menos diciembre de 2025.
La fiscalía declaró que estaba abierta a una demora, pero que un retraso tan largo no estaba justificado.
En una presentación el 10 de diciembre, Shipley dijo a Cannon que, si bien el material con las pruebas era «de hecho sustancial», gran parte de estas se referían al contenido de los dispositivos personales de Routh, y que los 18 teléfonos móviles que la defensa destacó en su petición de aplazamiento, 17 pertenecían al acusado.
«Aunque el abogado de la defensa puede no estar familiarizado personalmente con estos dispositivos, la mayor parte de su contenido probablemente tiene poca relevancia para cualquier defensa seria», dice su presentación.
Durante la conferencia de estado del 11 de diciembre, Militello, el abogado defensor, dijo que Routh puede haber olvidado algunos de los contenidos, que también podrían incluir información que los abogados de la defensa desconocían.
Durante la audiencia, la fiscalía a su vez expresó su preocupación por la posibilidad de que Routh contaminara al jurado con declaraciones públicas en las que se defendía a sí mismo. Tanto en el expediente de Shipley como en la audiencia, la fiscalía hizo referencia a una llamada telefónica grabada que Routh hizo desde la cárcel.
«En una llamada grabada del 15 de octubre de 2024 desde FDC-Miami, por ejemplo, Routh le dijo a un miembro de su familia que buscaba publicidad para ayudar a su caso en el juicio y para hacer saber a los jurados que él es, en su opinión, una persona honorable», decía el expediente de Shipley.
Cannon preguntó a Shipley el 11 de diciembre si podía facilitar la grabación a la corte y Shipley respondió que sí. Después de la audiencia, el registro de la corte mostraba un escrito en el que la fiscalía notificaba al tribunal que había entregado un DVD con la grabación para el secretario de la corte.
«Con cualquier retraso aumenta el riesgo de que Routh, a través de su deliberada campaña publicitaria previa al juicio, influya de forma inadmisible en el escrutinio del jurado, lo que, como mínimo, dificultará a esta cortel la constitución de un jurado imparcial», afirmó Shipley en su escrito del 10 de diciembre.
Durante la audiencia, él sugirió que el juicio, con la selección del jurado, podría durar más de dos semanas.
Hasta ahora, la presentación de pruebas ha incluido datos electrónicos descargados de 18 teléfonos, análisis de expertos, datos electrónicos de múltiples tablets y ordenadores portátiles, videovigilancia, registros financieros, alrededor de 3000 fotografías, registros de viajes y otros artículos.
«Leer miles de páginas de materiales, ver incontables horas de vídeo y analizar decenas de miles de páginas digitales de información requerirá muchos meses», se leía en la presentación de la defensa.
La fiscalía dijo que estaba tratando de alinear múltiples expertos, incluyendo un experto en balística que podría hablar sobre el alcance disponible para Routh.
La disputa sobre el retraso del juicio sigue a otra disputa previa sobre la imparcialidad de Cannon. Routh solicitó la recusación de Cannon después de que fuera asignada aleatoriamente a su caso en septiembre.
Cannon ha supervisado dos casos que involucran a Trump, incluyendo su caso de documentos clasificados, que ella desestimó en julio cuestionando la legalidad del nombramiento del abogado especial Jack Smith.
Cannon denegó la moción de recusación de Routh, declarando el 29 de octubre: «Nunca he hablado con el expresidente Trump ni me he reunido con él, excepto en relación con su presencia requerida en un procedimiento judicial oficial, a través de un abogado».
A Routh, de 58 años, se le presentaron cargos por intento de asesinato, junto con otros cargos como agredir a un agente del Servicio Secreto.
Se enfrenta a una posible cadena perpetua, dijo el Departamento de Justicia en una declaración.
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