Una organización nacional de control de armas se está asumiendo como la responsable de los problemas legales de la NRA, tiene en la mira a una organización comercial de la industria de armas de fuego y está convocado a la gente para unirse a su lucha.
En un correo electrónico del 14 de marzo, Brady (llamada anteriormente The Brady Campaign) solicitó firmas para una petición para que el Congreso apruebe más leyes de control de armas que pongan fin a la Fundación Nacional de Deportes de Tiro (NSSF). Ni Brady ni la NRA respondieron a los correos electrónicos solicitando comentarios sobre esta historia.
Mark Oliva, director general de Asuntos Públicos de la NSSF, dijo que el correo electrónico no le sorprende. Dijo que Brady es sólo uno de varios grupos que atacan los derechos de los estadounidenses que otorga la Segunda Enmienda.
“Creo que, en todo caso, [el correo electrónico] es un testimonio de la eficacia de la NSSF y de nuestra capacidad para defender nuestra industria”, dijo Oliva a The Epoch Times.
Oliva espera que los grupos antiarmas continúen e incluso intensifiquen sus ataques. El correo electrónico de Brady indica que tiene razón.
«La Fundación Nacional de Deportes de Tiro… es el grupo comercial más grande de la industria de armas de fuego… y, a medida que la NRA se desmorona en la deshonra, están preparados para asumir la mortífera agenda [de la NRA] de ‘armas en todas partes'», dice el correo electrónico de Brady.
La NRA ha tenido muchos problemas públicos en los últimos años. Las acusaciones de corrupción, luchas internas y malversación de fondos molestaron a muchos exmiembros de la organización que se autodenominaba “la organización de derechos civiles más antigua de Estados Unidos”.
A medida que disminuyó el número de miembros, los enemigos políticos del grupo encontraron grietas en la armadura política de la NRA.
En febrero pasado, un jurado de Nueva York declaró responsable en un caso civil a Wayne LaPierre, exdirector ejecutivo y rostro de la NRA durante décadas. Debe pagar 4.3 millones de dólares en daños y perjuicios por la mala gestión y mal uso de fondos de caridad.
El veredicto fue el resultado de una demanda civil presentada por la Oficina de la Fiscal General de Nueva York, acusando al LaPierre y a la NRA de prácticas financieras y administrativas cuestionables durante su mandato de 2014 a 2022. LaPierre, que había renunciado semanas antes del veredicto, y la NRA dijeron que la demanda era una cacería de brujas política destinada a acabar con la NRA.
«Un desfile de testigos de la NRA y expertos independientes establecieron que la NRA fue víctima de acciones llevadas a cabo en secreto y no en interés de la asociación, por parte de antiguos proveedores y fiduciarios», dijo el abogado de la NRA, William A. Brewer III.
El correo electrónico de Brady elogió el veredicto como resultado de su trabajo y pidió a los partidarios de Brady que dirigieran su atención a la NSSF.
“Afortunadamente, nosotros en Brady sabemos cómo luchar contra la NSSF porque hemos estado luchando contra la NRA durante años y estamos viendo el vergonzoso final de su organización debido a nuestro dedicado trabajo. Puede que conozcamos sus trucos, pero vamos a necesitar todo el apoyo que podamos obtener si queremos vencer a otro grupo extremista de presión sobre las armas, y es por eso que me comunico hoy”, se lee en el correo electrónico firmado por Kris Brown, presidente de Brady.
El correo electrónico no especifica cómo Brady ayudó a la fiscal general de Nueva York, Letitia James. Pero sí proporciona una lista de sus quejas contra la NSSF.
Según el correo electrónico, la NSSF gasta millones de dólares haciendo lobby en nombre de la industria armamentística. El correo electrónico dice que la NSSF se opone a las verificaciones de antecedentes universales, a las leyes estatales que permiten demandas contra los fabricantes de armas cuyos productos se utilizan en la comisión de un delito, y ha calificado al presidente Joe Biden de “librar una guerra contra la Segunda Enmienda”.
Oliva dijo que el correo electrónico contiene pequeños fragmentos de verdad y omite hechos importantes.
Cuando se trata de verificaciones de antecedentes, dijo que grupos como Brady llegan tarde a la fiesta.
“Creo que es importante que todos comprendan que la industria de las armas de fuego fue en realidad la progenitora. Se nos ocurrió el sistema de verificación de antecedentes en el punto de venta”, dijo Oliva.
Según Oliva, esto resultó en el Sistema Nacional Instantáneo de Verificación de Antecedentes Penales (NICS).
Añadió que a la NSSF se le ocurrió el plan Fix-NICS después de que quedó claro que no todos los estados enviaban registros relevantes al FBI para NICS. Esto dio lugar a una legislación federal para hacer que el sistema de verificación de antecedentes realmente mantenga las armas fuera del alcance de manos equivocadas, dijo.
“Brady no tuvo nada que ver con eso”, dijo Oliva.
Hacer realidad un derecho
En cuanto a los otros puntos, Oliva dijo que esto se reduce a que la NSSF trabaja en nombre de una industria que hace de la Segunda Enmienda algo más que una ideología política. Dijo que respalda su trabajo y las afirmaciones de que la Administración Biden está trabajando para reprimir un derecho constitucional.
Como prueba de sus afirmaciones, señaló la recientemente creada Oficina de la Casa Blanca para la Prevención de la Violencia con Armas, integrada por defensores de larga data del control de armas.
Dijo que el ejercicio de la Segunda Enmienda comienza en el mostrador de la tienda de armas y prometió continuar su trabajo.
«No tendrías la capacidad de poseer y portar armas si no tuvieras la capacidad de acercarte al mostrador de armas y comprar una legalmente», dijo. «No voy a pedir disculpas y la NSSF no se disculpará por nuestra eficacia».
Con información de Caden Pearson.
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