Algunos estrategas políticos dijeron que el reciente aumento de la cobertura mediática en torno al expresidente Donald Trump durante su arresto la semana pasada podría aprovecharse.
“Esto es un deja vu una vez más”, dijo Terry Sullivan a Politico, quien dirigió la campaña de Marco Rubio en 2016. “Trump domina la cobertura de los medios, lo que hace imposible que sus competidores obtengan cobertura o tracción hacia adelante”.
La semana pasada, Trump fue imputado de 34 cargos de falsificación de registros comerciales en relación con los pagos que hizo a Stormy Daniels y a la exmodelo Karen McDougal durante la campaña de 2016. Trump ha catalogado los cargos de la fiscalía de Manhattan en su contra como motivados políticamente y los ha convertido en el tema central de su campaña presidencial de 2024.
“Lo que es frustrante para mí es que no aprendimos una [improperio] cosa de 2015 y 2016 cuando se trata de darle una cobertura absoluta de los medios”, dijo David Kochel, un veterano de seis campañas presidenciales republicanas, a Politico el lunes por la mañana. «Lo entiendo, es una gran historia. Pero esto estaba siendo cubierto como… el comienzo de la guerra en Irak o la persecución de O.J.. No podías escapar de ello».
Dijo que, por ahora, ningún rival republicano de Trump puede hacer nada contra él después de las imputaciones. «No sé si hay una estrategia que alguien pueda emplear», dijo Kochel. «Tal vez intentar disparar a alguien en la Quinta Avenida», agregó, en referencia a una ocurrencia que Trump hizo durante la campaña de 2016.
Las emisoras corporativas como CNN, NBC, CBS, ABC y Fox brindaron cobertura en vivo del vuelo de Trump a la ciudad de Nueva York, su llegada a la Torre Trump y la entrada a la corte de Manhattan para presentarse a la imputación. Una multitud de periodistas y camarógrafos se colocaron alrededor de la corte para capturar el momento de la llegada y partida de Trump.
“La primera lectura de cargos de un expresidente por cargos penales es una noticia enorme, no hay duda al respecto”, escribió Adam Serwer en la revista de izquierda Atlantic, afirmando que los grandes medios de comunicación “no han aprendido nada” de 2016. «Pero por sí mismo eso no explica realmente la retransmisión minuto a minuto de su avión privado llegando a Nueva York el lunes o la cobertura general de su discurso [en Mar-a-Lago la semana pasada tras su llegada]. Ese tipo de enfoque de saturación sugiere que las cadenas podrían volver a un modelo que simplemente permitiera a Trump monopolizar la cobertura».
Algunos candidatos republicanos declarados han salido en defensa de Trump, acusando al fiscal de distrito de operar de manera politizada. Otros han señalado que si algún candidato se lanza contra Trump a raíz de los cargos, es probable que se enfrente a la ira del expresidente.
Encuestas recientes muestran que Trump, mientras tanto, domina al gobernador de Florida, Ron DeSantis, al exvicepresidente Mike Pence y a la exgobernadora de Carolina del Sur, Nikki Haley. En una encuesta de Reuters publicada el 7 de abril, Trump superó a DeSantis en casi 40 puntos porcentuales, mientras que una encuesta I&I-TIPP del lunes muestra que Trump tiene una ventaja de 24 puntos sobre el gobernador. DeSantis no se ha declarado candidato presidencial para 2024.
En Truth Social, Trump volvió a arremeter contra DeSantis y dijo que es “un joven al que no le está yendo bien en las encuestas contra mí, por decirlo suavemente”. El expresidente recomendó que DeSantis se mantenga al margen de la contienda electoral de 2024 y permanezca como gobernador de Florida.
El exfiscal general Bill Barr, a quien Trump ha criticado repetidamente a raíz de las elecciones de 2020, dijo a ABC News que la investigación de Bragg es un “caso injusto”, pero encumbrará a Trump en las primarias republicanas.
“Creo que esto también podría lograr su propósito, el cual es meterse en el medio del proceso de las primarias republicanas y convertirlo en un circo”, dijo Barr a ABC News el domingo. “En última instancia, los estrategas demócratas inteligentes saben que esto ayudará a Trump y quieren que sea el candidato porque es el más débil de los candidatos republicanos—el que tiene más probabilidades de volver a perder ante [el presidente Joe] Biden”.
Al menos un comentarista dijo en el artículo de Politico que el arresto de Trump denigrará la marca política del excomandante en jefe y lo hará más vulnerable de cara a las elecciones de 2024.
«No estoy preocupado en absoluto. Creo que hay un puñado de nerviosismo prematuro», dijo Jason Roe, un estratega republicano con sede en Michigan que trabajó para la campaña de Rubio, a Politico. «Ahora mismo nadie ocupa el escenario excepto Trump», añadió Roe. «El polvo tiene que asentarse».
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