La delegación de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) a la que se le prohibió la entrada a Venezuela esta semana se encuentra desde el jueves en Cúcuta, Colombia, con un plan que incluye recorridos por albergues y conversó con venezolanos exiliados víctimas del régimen de Nicolás Maduro.
Los encuentros continúan el viernes, según constató un equipo de la Voz de América basado en Cúcuta. Como parte de la visita estuvieron en el puente internacional Simón Bolívar, donde pudieron constatar que continúa el flujo migratorio de venezolanos que huyen de la crisis en su país.
Cuando al equipo de la CIDH se le prohibió abordar un avión de Copa Airline en Panamá hacia Caracas, se encaminó primero a Bogotá, donde se reunió el jueves por la mañana con el presidente colombiano, Iván Duque, y partió después hacia Cúcuta, en la frontera con Venezuela.
La delegación de la @CIDH observa el flujo migratorio en el puente Simón Bolívar en la frontera entre #Venezuela y Colombia: buscan comida, escuela, atención médica, protección. #CIDHenVnzla #CIDHEnLaFrontera #6Feb pic.twitter.com/3k0GiEDRsv
— CIDH – IACHR (@CIDH) February 6, 2020
En Bogotá, el equipo de CIDH se entrevistó también con la diputada a la Asamblea Nacional de Venezuela Gaby Arellano, quien entregó un informe detallado sobre las violaciones a los derechos humanos, civiles y políticos cometidos por Nicolás Maduro y funcionarios de su entorno.
Según la cadena NTV, la diputada puso a la CIDH al tanto de los últimos ataques a los parlamentarios del Poder Legislativo venezolano, así como la situación de diputados presos como Juan Requesens, Gilber Caro e Ismael León, legisladores en la clandestinidad, refugiados en embajadas y en un exilio forzado producto de las persecuciones.
En Cúcuta, La CIDH busca obtener testimonios de primera mano de las violaciones a los derechos humanos que ocurren en Venezuela. Un mensaje de Twitter de la comisión dijo que los venezolanos “buscan comida, escuela, atención médica, protección”.
Los delegados del organismo atendieron a distintas ONG que cruzaron la frontera para denunciar persecuciones, torturas y represión por parte de los cuerpos de seguridad de Venezuela controlados por el Ejecutivo.
Los activistas denunciaron también violaciones de los derechos laborales y sindicales, así como persecución a los trabajadores y arrestos a personas que no han cometido delitos.
Esmeralda Arosemena de Troitiño, presidente de la CIDH y quien encabeza la delegación, afirmó por Twitter que su equipo se encuentra en Cúcuta para poder compartir la realidad de los venezolanos que cruzan la frontera.
¿Por qué la @CIDH decidió estar en la frontera de #Venezuela tras la negativa de entrada al país? Responde la presidenta @esmeraldatroiti ?????#CIDHenVnzla pic.twitter.com/2t64AIy2op
— CIDH – IACHR (@CIDH) February 6, 2020
Protestas en Caracas
También se informó que en Caracas hubo protestas y reclamos al régimen de Maduro por no permitir la entrada de la delegación de la CIDH. Portavoces de grupos sociales y sectores vulnerables de la población organizaron manifestaciones de repudio al régimen en varios puntos de la nación.
Por otra parte, el miércoles, la CIDH emitió una medida cautelar a favor de Williams Alberto Aguado Sequera y otras personas, tanto militares como civiles, que están privadas de libertad en el Centro Nacional para Procesados Militares, también conocido como “Ramo Verde”.
La Comisión advirtió que “los beneficiarios se encontraban en una situación de riesgo, principalmente con motivo de su estado de salud y falta de acceso a un tratamiento médico adecuado o suficiente”.
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