Tommy Altman, un veterano de la Fuerza Aérea que se postula para un escaño en la Cámara de Representantes de EE. UU. para el segundo distrito de Virginia, presentó recientemente una demanda por un libro sexualmente explícito que llegó a algunas escuelas públicas de Virginia.
Altman cree que los padres tienen derecho a decidir si su hijo ve un libro sexualmente explícito y que las escuelas deberían estar obligadas a pedir el consentimiento de los padres antes de dar esos libros a los alumnos.
“Entonces, estoy demandando al editor, a los autores, porque es obsceno. Y así, con eso viene una orden de restricción contra Barnes and Noble local para que no distribuya”, dijo Altman al programa «Capitol Report» de NTD durante una entrevista reciente. “Y la razón por la que estamos haciendo esto es porque creo que los padres tienen derecho a obtener el consentimiento parental si su hijo va a utilizar materiales sexualmente explícitos».
Altman se refiere al libro “Gender Queer” de Maia Kobabe.
Kobabe declaró a una emisora de radio local que es probable que el título del libro incomode a los padres, pero que prohibirlo dice a las personas LGBTQI que no son bienvenidas en sus comunidades.
«Realmente creo que se trata de una oleada de prohibiciones virales que buscan controlar la información sobre nuestras identidades, y las identidades trans en concreto, y limitar el acceso de los jóvenes a esta información, y mi libro se ve atrapado en esta oleada», dijo Kobabe a KBIA, un servicio de radio pública de Missouri, durante una entrevista reciente.
Sin embargo, Altman refuta la afirmación de que su demanda viola la Primera Enmienda. Dijo que su iniciativa de retirar el libro de las escuelas tiene que ver con el derecho de los padres a decidir a qué contenido sexual tienen acceso sus hijos.
Una encuesta nacional reveló que el 72 % de los votantes que tienen una opinión sobre el tema no creen que las escuelas deban enseñar sobre identidad sexual y comportamiento sexual a los niños de edad elemental. En concreto, el 42 % cree que esa enseñanza es inapropiada en un entorno escolar, y el 30 % cree que es peligrosa y que podría hacer que los niños fueran inducidos para tener encuentros sexuales a una edad temprana.
La encuesta de McLaughlin and Associates, que fue comisionada por Summit Ministries de Manitou Springs, Colorado, se realizó por Internet a 1000 probables votantes de las elecciones generales en todo el país del 22 al 26 de abril.
Altman, padre de dos hijos, también dijo que parte del contenido de «Gender Queer» es demasiado explícito para mostrarlo en las noticias.
“La mayoría de las agencias de noticias en realidad ni siquiera muestran las imágenes o leen la palabra real permitida porque viola la ley. Por lo tanto, es un gran problema que esto esté en nuestras escuelas públicas que están disponibles para los menores sin ningún tipo de consentimiento de los padres», dijo Altman.
“Y eso es todo lo que estamos pidiendo, ya saben, la gente habla de que estamos violando los derechos de la primera enmienda. No estamos violando los derechos personales. En ninguna parte de la Primera Enmienda se garantiza [el] derecho a distribuir pornografía a menores”.
En una declaración enviada por correo electrónico a The Epoch Times, las relaciones públicas de Barnes & Noble escribieron: “Como vendedores de libros, tenemos miles de libros cuya temática puede resultar ofensiva para algunos. Vivimos en una sociedad diversa, y esa diversidad de opiniones se refleja en los libros que tenemos en nuestras estanterías y que responden a la amplia gama de intereses de nuestros clientes».
“Pedimos a nuestros clientes que respeten nuestra responsabilidad de ofrecer esta variedad de materiales de lectura, y que respeten también que, si bien optaron por no comprar muchos de estos, pueden ser de interés para otros”, continúa el comunicado.
The Epoch Times se ha comunicado con el editor para solicitar comentarios.
Con información de Matthew Vadum y Terri Wu.
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