El Departamento de Trabajo va a conceder 240 millones de dólares a los estados para que adopten medidas como reforzar la defensa de la ciberseguridad y la verificación de la identidad, en un intento de luchar contra el creciente fraude en el seguro de desempleo.
La medida, anunciada en un comunicado de prensa del 12 de agosto, forma parte de un impulso más amplio para modernizar el sistema del seguro de desempleo, cuyas deficiencias han quedado al descubierto en medio de un aumento de la actividad fraudulenta después de que los legisladores federales ampliaran los programas de indemnización por desempleo el año pasado en respuesta al brote.
«La pandemia puso de manifiesto la necesidad de modernizar los 53 sistemas diferentes que administran las prestaciones del seguro de desempleo en Estados Unidos, y dejó al descubierto importantes vulnerabilidades de la tecnología estatal ante los delincuentes que buscan una oportunidad», dijo el secretario de Trabajo, Marty Walsh, en un comunicado.
El departamento está concediendo 140 millones de dólares en subvenciones a los estados para una serie de medidas de prevención del fraude, incluida la aplicación de estrategias de defensa de la ciberseguridad, la ampliación de los sistemas de análisis de datos y los esfuerzos de recuperación de pagos excesivos, así como la mejora de las medidas de verificación de identificación, según un memorando del Departamento de Trabajo (pdf). El dinero procederá de la Ley del Plan de Rescate Estadounidense, de 1.9 billones de dólares, que asignó 2000 millones de dólares al Departamento de Trabajo para una serie de medidas, entre ellas la de prevenir y detectar el fraude.
Otros 100 millones de dólares se destinarán a ayudar a los estados a combatir el fraude en los programas temporales de Asistencia de Desempleo por la Pandemia y de Compensación de Emergencia por Desempleo por Pandemia, que fueron establecidos por el Congreso para proporcionar ayuda adicional a los desempleados en medio de la pandemia. La financiación de estas subvenciones procederá de las partes no utilizadas de la Ley CARES.
Michele Evermore, experta en seguros de desempleo del Departamento de Trabajo, dijo a la CNBC que la actividad fraudulenta de los delincuentes que buscan aprovechar las vulnerabilidades del sistema «se ha hecho muy grande».
«Lo que estamos viendo ahora es realmente aterrador», dijo al medio de comunicación.
La Oficina del Inspector General del Departamento de Trabajo (DOL-OIG, inglés) estimó en junio que se habrán entregado al menos 87,000 millones de dólares en pagos indebidos del seguro de desempleo para cuando expiren en septiembre los programas de ayuda a los desempleados vinculados a la pandemia, con «una parte significativa atribuible al fraude».
«Tras la aprobación de la Ley CARES, el fraude contra el programa UI se disparó», afirmó la Oficina del Inspector General en una nota en su página web. «Trabajando con nuestros socios federales y estatales, hemos sido capaces de identificar miles de millones en fraude potencial al UI en todo el país».
La Oficina del Inspector General ha abierto más de 17,000 denuncias e investigaciones relacionadas con posibles fraudes en relación con las prestaciones del seguro de desempleo pagadas por los programas federales de ayuda por la pandemia.
«Como resultado del aumento de las denuncias, las investigaciones sobre el seguro de desempleo representan ahora el 87 por ciento del inventario de casos de investigación de la OIG, en comparación con el 12 por ciento anterior a la pandemia», declaró la DOL-OIG, señalando que la oficina ha tomado una serie de medidas en respuesta, incluida la contratación de investigadores penales adicionales.
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