El gobernador Ron DeSantis dijo que Florida no volverá a imponer ninguna mascarilla por COVID-19 o mandatos de vacunas durante una conferencia de prensa el jueves.
El gobernador y candidato presidencial republicano para 2024 hizo el anuncio después de que algunas escuelas en otros estados optaran por traer de vuelta los mandatos de mascarillas o recomendaciones para los estudiantes. Mientras tanto, algunas universidades están exigiendo vacunas de refuerzo, y una está ordenando que los estudiantes que den positivo por el virus permanezcan en cuarentena fuera de sus dormitorios en el campus.
«Incluso hoy en día, algunas partes de nuestro país obligan a los niños a llevar mascarillas en el aula», dijo DeSantis en la conferencia de prensa. «Esos mandatos estarán ‘muertos en su llegada’ a Florida, y vamos a proteger a los padres y los niños de esta histeria perpetua de COVID».
«Crees que simplemente no volverán a intentar nada nuevo, y luego siempre intentan idear algo», dijo el Sr. DeSantis, refiriéndose a los funcionarios de salud y los políticos que impulsaron los bloqueos y los mandatos de vacunación. «Si les das a estas personas una pulgada tomarán una milla».
La conferencia de prensa contó con una serie de críticos del mandato de vacunas, incluido el Cirujano General de Florida Joseph Ladapo, una mujer de Jacksonville que se opuso a los mandatos y otra mujer de Florida que dijo que sufrió problemas de salud desde que recibió la vacuna contra el COVID-19.
El Sr. DeSantis fue uno de los primeros defensores de poner fin a los mandatos en 2020 y optó por reabrir su estado para el turismo, lo que le permitió convertirse en una estrella en ascenso entre los republicanos y, en última instancia, puede haberlo impulsado a la carrera presidencial del 2024. Sin embargo, cerró las escuelas en marzo del 2020 después de que se reportaran por primera vez casos de COVID-19 en suelo estadounidense, pero emitió una orden en julio del 2020 que les exigía abrir para la enseñanza presencial.
El gobernador, que aventaja al expresidente Donald Trump en más de 30 puntos porcentuales en las últimas encuestas, alabó con frecuencia la forma en que su administración gestionó el COVID-19 durante su campaña para 2024. Como gobernador, Florida aprobó una serie de leyes que prohibían los mandatos relacionados con el COVID-19 que imponían los gobiernos locales y las empresas.
«Vemos todo esto. Y vemos que no están siguiendo la ciencia», dijo el Sr. DeSantis el jueves. «Están tratando de seguir una narrativa. Están tratando de seguir una agenda. Les puedo decir aquí en Florida, no lo hicimos, y no vamos a permitir que las visiones distópicas de hipocondríacos paranoicos controlen nuestras políticas de salud, y mucho menos nuestro estado».
Se produce cuando un puñado de hospitales, escuelas y otras empresas privadas anunciaron la reimposición de los mandatos de mascarilla, provocando la ira de los republicanos y otros grupos. Los que se oponen a los mandatos citaron un montón de estudios a lo largo de los años que sugieren que cubrirse la cara no previene la transmisión del virus.
Una escuela de Silver Spring (Maryland) comunicó que una clase de niños, así como los profesores, están obligados a volver a llevar mascarillas después de que se confirmaran varios casos de COVID-19 entre los alumnos de la clase. Después de un período de 10 días, los funcionarios dijeron que el uso de mascarillas «volverá de nuevo».
Algunas otras escuelas, incluyendo al menos una en Alabama, también ordenaron mascarillas debido a un aumento reportado en los casos de COVID-19. Un colegio de Atlanta, el Morris Brown College, también impuso el uso de mascarilla durante dos semanas antes de anularla el fin de semana, según los informes.
La semana pasada, la gobernadora de Nueva York, Kathy Hochul, afirmó en un comunicado que el estado proporcionaría más mascarillas y pruebas de COVID-19 a las escuelas. Dijo que los distritos deben revisar la orientación de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades sobre el virus y las escuelas, que actualmente no recomienda mascarillas.
«Afortunadamente, los niños en Florida no tendrán que pasar por este infierno desde que el gobernador Ron DeSantis PROHIBIÓ PERMANENTEMENTE los mandatos de mascarillas escolares hace dos años», dijo la Sala de Prensa de DeSantis en X, antes conocido como Twitter, sobre el mandato de mascarillas de Silver Spring.
Esta semana, la primera dama Jill Biden dio positivo por COVID-19, según la Casa Blanca. Funcionarios, incluida la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Karine Jean-Pierre, dijeron que el presidente Joe Biden volverá a llevar mascarilla en interiores durante un tiempo, aunque «se quitará la mascarilla cuando esté suficientemente alejado de los demás».
Aparte del Sr. DeSantis, el ex presidente Donald Trump publicó hace unos días un vídeo en el que instaba a los estadounidenses a «no cumplir» con ningún futuro mandato de COVID-19, acusando a quienes los impulsan de incurrir en tiranía.
Y el senador J.D. Vance (republicano de Ohio) presentó esta semana un proyecto de ley que prohibiría a los organismos federales exigir mascarillas. En un comunicado, el senador novato de Ohio afirmó que su Ley de Libertad para Respirar «impediría la reimposición de los mandatos federales sobre mascarillas para los viajes aéreos nacionales, los sistemas de transporte público y las escuelas primarias, secundarias y superiores», al tiempo que instaba a su aprobación.
Mientras tanto, hubo informes que afirman que agencias federales como los CDC o la Administración de Seguridad en el Transporte (TSA) se están preparando para volver a imponer mandatos, incluido el uso de mascarillas, a partir del otoño. Un portavoz de la TSA dijo a The Epoch Times el mes pasado que tales afirmaciones son falsas, mientras que un portavoz de los CDC afirmó en un correo electrónico la semana pasada que las hospitalizaciones por COVID-19 son relativamente bajas en el 96 por ciento de Estados Unidos.
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