MIAMI BEACH, Florida— El gobernador Ron DeSantis eligió el restaurante griego Santorini by Georgios, el 20 de marzo, para celebrar su promulgación de la ley HB 1356, que planea sacar efectivamente a las personas sin hogar de las calles de Florida.
A la manera tradicional griega, el propietario del restaurante, Georgios Vogiatzis, y el gobernador celebraron la ocasión rompiendo platos contra el suelo.
«¡Opa!», gritaron al unísono.
El Sr. Vogiatzis contó que un vagabundo le atacó cuando él intentó darle comida, e indicó que este proyecto de ley ayudaba en primer lugar a los sin techo, además de limpiar las calles.
El gobernador lo consideró beneficioso para todos los residentes de Florida.
«Es importante que mantengamos la calidad de vida de los residentes», dijo el Sr. DeSantis. «En el estado de Florida, quiero que este continúe siendo un lugar donde las personas puedan criar familias (…) y para que las personas puedan jubilarse aquí con seguridad y protección. Yo creo que esto va a ser una parte importante de eso».
La nueva legislación frenará los campamentos de personas sin hogar en espacios públicos al exigir que todas las «acampadas y pernoctaciones públicas» solo se permitan en espacios autorizados, certificados e inspeccionados por el Departamento de Infancia y las Familias. También exige que los refugios para personas sin hogar prohíban a sus ocupantes el consumo de drogas y alcohol, mantengan las normas de salubridad, proporcionen agua corriente y baños operativos, además de que ofrezcan tratamientos y recursos para la salud mental y en contra el abuso de sustancias.
La ley entrará en vigor el 1 de octubre de 2024.
El Sr. DeSantis señaló a Nueva York y la situación en California, que según la información previa, tiene seis de las 10 ciudades con mayor número de personas sin hogar, como un contraste con las decisiones que se están tomando en su estado. También promocionó estadísticas que muestran que la población sin hogar de Florida disminuyó un 11 por ciento entre 2019 y 2022, mientras que la falta de vivienda creció un tres por ciento a nivel nacional.
«Florida no permitirá que los campamentos de personas sin hogar se entrometan en sus ciudadanos o socaven su calidad de vida, como vemos en estados como Nueva York y California», dijo el gobernador. «La legislación que firmé hoy defiende nuestro compromiso con la ley y el orden, al tiempo que garantiza que las personas sin hogar tengan los recursos que necesitan para volver a ponerse de pie.»
Ley y orden en todo el estado
El Sr. DeSantis estuvo acompañado por el alcalde de Miami Beach, Steven Meiner, quien subió al podio para dar la bienvenida a los asistentes del evento «ciudad de la ley y el orden» en el «estado de la ley y el orden, en Florida».
El alcalde dijo que su ciudad ya ha puesto en marcha medidas para eliminar de las calles a los sin techo.
«Nuestra comisión tiene una legislación que es tan necesaria (…) para dar a nuestras fuerzas del orden las herramientas para intentar conseguir [a los sin techo] la ayuda que necesitan, ofrecerles refugio», dijo el alcalde. «Y si se niegan, el agente tiene la facultad discrecional de proceder a la detención, y a menudo se trata de personas que vemos una y otra vez en la calle. Entonces ese es un aspecto de mucha más legislación en la que estamos trabajando».
El Sr. Meiner indicó que no piensa detener su campaña de ley y orden hasta que Miami Beach sea la ciudad más segura de Estados Unidos.
De hecho, la nueva ley obliga a todos los condados y municipios del estado a cumplir las normas de ley y orden en todo el estado. En el encuentro también asistieron legisladores de otras partes de Florida.
«Vamos a proteger y luchar por nuestros espacios públicos, nuestros parques, nuestras bibliotecas, [y] las aceras por las que caminamos», dijo el representante estatal Sam Garrison, del condado de Clay, Florida. «Merece la pena luchar por estas cosas».
La situación de los sin techo debería entristecer y enfadar a la gente, añadió el Sr. Garrison.
Cuidando ambos lados
El senador estatal John Martin, del condado de Lee, Florida, también se refirió al aspecto humanitario de la situación, elogiando el proyecto de ley por demostrar que los legisladores pueden proteger los espacios públicos y al mismo tiempo ocuparse de las personas sin hogar. El senador destacó que el clima cálido de Florida atrae a personas sin hogar que buscan escapar de los duros inviernos de ciudades del norte como Chicago.
«Tenemos organizaciones increíbles, organizaciones sin ánimo de lucro. Tenemos increíbles agencias gubernamentales -DCF [Departamento de Infancia y Familias], Departamento de Salud. Hacen mucho», afirmó el Sr. Martin. «Ellos trabajan en tándem con nuestras organizaciones sin ánimo de lucro y nuestras organizaciones políticas, así como con el Ejército de Salvación o las iglesias o sinagogas locales para hacer un trabajo increíble. Y este no es un proyecto de ley para decir que ustedes no han hecho su trabajo. Es un proyecto de ley para decir: mirad, vamos a ayudarles a establecer un marco».
También defendió las ventajas de llevar a las poblaciones sin hogar a zonas seguras y accesibles en lugar de permitir que permanezcan acampadas en los bosques o manglares lejos de la gente.
«Son situaciones en las que uno no vas a tener voluntarios, ancianos o chicos de instituto o universitarios en vacaciones de primavera ayudando debido a los peligros que conlleva querer ayudar a personas sin hogar», dijo el senador. Con la supervisión del departamento de infancia y familia, conseguimos que más personas trabajen juntas de una forma mucho menos costosa, y proporcionamos «un cambio significativo real en la vida de las personas».
Pero a pesar de los beneficios previstos, surgen preocupaciones sobre cómo se recibirá a las personas sin hogar en estas zonas certificadas, y sobre si se las trasladarán voluntariamente o no.
«Me enteré de esta nueva ley», dijo un exmarine estadounidense de 54 años, que pidió ser identificado como Danny.
«No sé cuándo van a venir a por mí. No sé qué va a pasar», dijo el exmarine a The Epoch Times.
Miró hacia atrás, inquieto, a su campamento cerca de un centro comercial de Gainesville. El hombre de seguridad del centro sabe que él está allí, haciendo la mejor vida que puede bajo una colección de lonas.
«El hombre me dijo que me mantuviera invisible, así que lo hago», dijo Danny, agachándose para acariciar a sus perros, Brody y Bella.
Bella se movía al final de su correa, golpeando juguetonamente a Danny con sus pequeñas patas. Brody movió la cola y luego se giró para gruñir a un extraño.
Su amo temblaba en una mañana de marzo inusualmente fría.
El frío parece más frío en Florida, dijo.
«Yo soy del Bronx. Pero aquí hace un frío húmedo».
Él admite que le preocupa la nueva ley.
Le gustaría recibir ayuda con la vivienda, dijo. Y no tiene ningún problema con el requisito de mantenerse sobrio y sin consumir drogas. Ha visto a demasiadas personas destruidas por las drogas y el alcohol como para recurrir a ellos, dijo Danny.
«Fumo hierba. Pero me muero por volver a trabajar. Quiero trabajar. Quiero ponerme en pie. Quiero empezar de nuevo».
Perdió su empleo en la industria manufacturera tras ser atropellado por un camión cuando iba al trabajo en bicicleta. Los médicos le ayudaron a recomponer su cuerpo. Pero después del accidente, su vida quedó hecha jirones.
Qué será de sus perros, si se ve obligado a ir a un refugio, se preocupaba en voz alta. Los refugios de animales de su zona están llenos y no aceptan animales.
Por eso él y sus perros resistieron al huracán Idalia bajo sus lonas.
La mayoría de los sin techo tienen el mismo problema. Les rompería el corazón desprenderse de sus mascotas.
«Son mi familia», se encoge de hombros. «La única familia que tengo».
Únase a nuestro canal de Telegram para recibir las últimas noticias al instante haciendo click aquí
Cómo puede usted ayudarnos a seguir informando
¿Por qué necesitamos su ayuda para financiar nuestra cobertura informativa en Estados Unidos y en todo el mundo? Porque somos una organización de noticias independiente, libre de la influencia de cualquier gobierno, corporación o partido político. Desde el día que empezamos, hemos enfrentado presiones para silenciarnos, sobre todo del Partido Comunista Chino. Pero no nos doblegaremos. Dependemos de su generosa contribución para seguir ejerciendo un periodismo tradicional. Juntos, podemos seguir difundiendo la verdad.