Las autoridades de El Salvador desarticularon este martes a una banda que se dedicaba a trasladar ilegalmente a salvadoreños, nicaragüenses y hondureños a Estados Unidos, informó la Policía Nacional Civil (PNC).
La fuente indicó que policías de la División de Investigación Criminal Transnacional (DICT), con el apoyo de equipos élites, realizaron en San Miguel (oriente) la operación denominada «Costa Este» que dejó como resultado el arrestado de la cabecilla (líder) de la banda y de cuatro integrantes de la misma.
Según las investigaciones de la Policía, «la agrupación traficaba no solo con salvadoreños, sino también con hondureños y nicaragüenses, a quienes exigía el pago de entre 9000 dólares y 10000 dólares por persona para llevarlos ilegalmente a la nación estadounidense».
Los detenidos, quienes serán acusados del delito de tráfico ilegal de personas, fueron identificados como Ana Liseth Andrade (líder), Daysi Leonor Delgado, Luis Felipe Reyes Saravia, Wilson Geovany Padilla Gómez y Juan Francisco Arbaiza Ávalos.
A estas personas les fueron decomisados «varios» coches, móviles y dos armas de fuego, señaló el cuerpo de seguridad.
Con estas detenciones la Policía «propina un nuevo golpe a las agrupaciones dedicadas, desde hace años, al tráfico ilegal de personas en el país», agregó.
De acuerdo con diversas fuentes consultadas por Efe, los traficantes o «coyotes» en El Salvador forman redes con otros en el Triángulo Norte de Centroamérica, que completan Honduras y Guatemala, y trabajan bajo la venia de los cárteles de droga en territorio mexicano.
A finales de marzo de 2018, la Asamblea Legislativa salvadoreña elevó las penas de cárcel contra los traficantes de personas para frenar la inmigración irregular «generalizada», que la situación económica y la violencia causan en el país centroamericano.
Según las autoridades de El Salvador, entre las razones que motivan la inmigración irregular, que son similares a las de hondureños, nicaragüenses y guatemaltecos, se encuentran la búsqueda de mejores condiciones de vida, la reunificación familiar y la violencia de las pandillas.
La cifra de salvadoreños deportados entre enero y septiembre pasado, principalmente de Estados Unidos y México, se disparó más de un 53 %, de acuerdo con cifras oficiales del Ministerio de Seguridad.
Los datos de la Dirección de Información y Análisis (DIA) consultados por Efe recientemente indican que en estos nueve meses fueron deportados 28,753 salvadoreños, un 53,19 % más que las 18,769 personas retornadas en el mismo lapso de 2018.
Estados Unidos, país con el que el Ejecutivo de Nayib Bukele ha firmado una serie de acuerdos para reducir la inmigración irregular, deportó entre enero y septiembre a 14,194 salvadoreños, mientras que México repatrió a 12,157 personas.
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