Las fuerzas militares colombianas desmantelaron un «gigantesco» campamento ubicado en la frontera con Perú utilizado por los Comandos de la Frontera, un grupo aliado de la Segunda Marquetalia (disidencia de las FARC), donde habían instalaciones para el procesamiento de narcóticos y también material bélico, informó la Armada este viernes.
El campamento estaba escondido en el Amazonas, entre la localidad de Soplín Vargas (Perú) y Puerto Nariño (Colombia) y contaba con instalaciones para la fabricación de explosivos, «los cuales representaban una amenaza para la seguridad en la frontera colombo-peruana», apuntó la Armada en un comunicado.
En el operativo, realizado junto a la Policía Nacional de Perú, se hallaron materiales para la fabricación de explosivos improvisados, entre ellos 11 morteros, más de 600 granadas, 200 cajas de TNT, 300 explosivos para minas terrestres, 1000 cartuchos de distintos calibres, entre otros artefactos.
Y fueron destruidos nueve laboratorios utilizados para procesar cocaína, donde había 7580 toneladas de sulfato de cocaína, 32,385 toneladas de insumos químicos y se confiscaron tres armas de fuego.
«Con esta operación, se evitó el ingreso de más de tres millones de dólares a las finanzas de las organizaciones criminales, debilitando contundentemente su capacidad delictiva en la región», apuntó la Armada.
Los Comandos de la Frontera es un grupo que actúa en la frontera sur de Colombia, penetrando en Ecuador y Perú, dedicándose casi en exclusiva a actividades ilícitas como el narcotráfico.
Han mostrado su alineamiento con la Segunda Marquetalia, comandada por el exnegociador de las FARC del acuerdo de paz de La Habana, ‘Iván Márquez’, un grupo que actualmente se encuentra en una nueva mesa de negociación con el Gobierno colombiano, que cuenta con un cese al fuego bilateral en vigor.
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