SIGA Technologies, una empresa de atención sanitaria que desarrolla medicamentos para prevenir y tratar enfermedades infecciosas como el mpox, anunció el 23 de septiembre que su consejo de administración despidió al Dr. Jay Varma con efecto inmediato.
El motivo fue «no justificado», según informó la empresa en un comunicado a la Comisión del Mercado de Valores de Estados Unidos.
Varma ocupaba el cargo de vicepresidente ejecutivo y director médico de la empresa.
SIGA Technologies no respondió a la solicitud de más detalles. No fue posible contactar a Varma.
En un video encubierto captado por el equipo de Steven Crowder, Varma afirmó que mientras dirigía la respuesta al COVID-19 de la ciudad, asistió a fiestas de drogas y sexo en habitaciones de hotel.
Varma dijo que el grupo actuaba «de manera furtiva» debido a su alto cargo en la administración del alcalde Bill de Blasio.
Varma fue el principal asesor de salud del alcalde hasta 2021 y se atribuyó en el video el mérito de la órden de vacunación contra el COVID-19 de la ciudad, que dificultó a los no vacunados salir a cenar, trabajar y visitar la ciudad.
«La forma en que lo hacemos en salud pública es hacer que sea muy incómodo no estar vacunado», dijo, añadiendo después que la gente que «no se vacunó porque porque escuchó que no era seguro, cedió porque era realmente difícil».
Varma también contó que, después de dejar su puesto y mientras seguía asesorando a la ciudad, asistió a una fiesta bailable de unas 200 personas en los sótanos de un banco de Wall Street.
La fiesta «no era apta para el COVID», afirmó.
Varma fue grabado diciendo al equipo de Crowder que si los neoyorquinos se enteraban de que había asistido a fiestas durante la pandemia, «habría sido un gran problema» y «una verdadera vergüenza».
En una declaración a los medios de comunicación antes del despido, Varma dijo que fue objeto de conversaciones privadas que grabaron y editaron en secreto antes de difundirlas.
Varma admitió que participó en reuniones privadas mientras trabajaba para el gobierno.
«Asumo la responsabilidad por no haber utilizado el mejor criterio en ese momento», declaró.
«Ante la mayor crisis de salud pública en un siglo, nuestra máxima prioridad era salvar vidas, y cada decisión se basó en la mejor ciencia disponible para mantener a salvo a los neoyorquinos», añadió. «Defiendo mis esfuerzos para que los neoyorquinos se vacunen contra el COVID-19, y rechazo los peligrosos esfuerzos extremistas para socavar la confianza del público en la necesidad y la eficacia de las vacunas».
Varma también le dijo a Crowder, cuando fue confrontado por sus comentarios a periodistas encubiertos, que respaldaba las restricciones impuestas por la ciudad.
El concejal demócrata de Nueva York, Robert Holden, escribió en Facebook que el despido era un paso en la dirección correcta.
«Varma se jactó de acosar a la gente hasta la sumisión sobre el mandato de la vacuna y admitió haber participado en fiestas sexuales ilegales, todo mientras él, el ex Comisionado de Salud Dr. David Chokshi y el entonces alcalde Bill de Blasio imponían medidas draconianas que cerraron toda la ciudad», escribió Holden.
«La hipocresía es escandalosa. Millones de personas se vieron afectadas por sus políticas de mano dura, y el público merece que se rindan cuentas. El comportamiento imprudente y poco ético de Varma no puede pasarse por alto, y este despido marca solo el comienzo de las consecuencias a las que debería enfrentarse».
Holden fue uno de los concejales que el lunes celebraron una rueda de prensa en el Ayuntamiento pidiendo que se investigue a Varma. También solicitaron que la ciudad retire los casos contra los trabajadores despedidos por negarse a recibir la vacuna contra el COVID-19 y readmitan a todos los trabajadores que fueron despedidos por no cumplir con el mandato.
Únase a nuestro canal de Telegram para recibir las últimas noticias al instante haciendo click aquí.
Cómo puede usted ayudarnos a seguir informando
¿Por qué necesitamos su ayuda para financiar nuestra cobertura informativa en Estados Unidos y en todo el mundo? Porque somos una organización de noticias independiente, libre de la influencia de cualquier gobierno, corporación o partido político. Desde el día que empezamos, hemos enfrentado presiones para silenciarnos, sobre todo del Partido Comunista Chino. Pero no nos doblegaremos. Dependemos de su generosa contribución para seguir ejerciendo un periodismo tradicional. Juntos, podemos seguir difundiendo la verdad.
