Tres jóvenes suecos fueron detenidos en relación con dos explosiones ocurridas el miércoles cerca de la embajada israelí en Copenhague (Dinamarca).
La policía de la capital danesa dijo que nadie resultó herido en el incidente, añadiendo que las explosiones fueron “probablemente causadas por granadas de mano”.
Jens Jespersen, portavoz de la policía de Copenhague, dijo que no estaba claro si la embajada del Estado judío era el objetivo previsto de las explosiones, que sacudieron la zona alrededor de las 3:20 a.m., hora local.
Jespersen explicó que las explosiones se produjeron a unos 100 metros de la embajada, situada en una zona en la que hay embajadas de muchos otros países.
El incidente también provocó que una escuela judía cercana cerrara sus puertas durante todo el día por motivos de seguridad.
Las explosiones también afectaron a otro edificio, pero no se dieron más detalles sobre los daños.
Según la policía, los sospechosos tenían entre 15 y 20 años. Uno de ellos fue detenido cerca de la embajada y los otros dos en un tren de la estación central de Copenhague.
No se ha hecho público ningún nombre.
Los dos detenidos en el tren se enfrentarán probablemente a cargos preliminares de posesión ilegal de armas, dijo Jespersen.
Tras las explosiones, agentes fuertemente armados, perros rastreadores y equipos forenses inspeccionaron los alrededores de la embajada israelí.
Michael Rachlin, portavoz de la comunidad judía de Dinamarca, dijo que la escuela judía de Copenhague, Carolineskolen, que está justo al lado de la embajada, ya tenía previsto cerrar el jueves y el viernes por Rosh Hashaná, el Año Nuevo judío.
También se han organizado medidas de seguridad adicionales en torno a la principal sinagoga del centro de Copenhague con motivo de la festividad religiosa, según informó la comunidad judía en un comunicado.
El presidente de la comunidad, Henri Goldstein, escribió que “le gustaría animar a la gente a ser consciente cuando se mueva en espacios públicos”.
“Y sean críticos con lo que oyen en las redes sociales y los rumores”, dijo, añadiendo que “no hay razón para abstenerse de participar en la vida judía”.
La policía declinó dar detalles sobre la intensidad de las explosiones.
El ministro danés de Justicia, Peter Hummelgaard, dijo a la cadena TV2 que el incidente era “inherentemente grave”, y añadió que era demasiado pronto para decir nada sobre un motivo.
Según Jespersen, la investigación danesa incluirá el examen de la declaración de la agencia de seguridad nacional sueca SAPO del 30 de mayo, en la que acusaba a Irán de utilizar redes delictivas establecidas en Suecia como apoderados para atacar intereses israelíes en Dinamarca.
La investigación también examinará los posibles vínculos con los fuertes estruendos que se escucharon en los alrededores de la embajada israelí en Estocolmo a última hora del martes, añadió.
La policía de la capital sueca anunció más tarde que los resultados de la escena indicaban que la embajada había recibido impactos de bala, pero todavía no se ha detenido a nadie.
Con información de PA Media
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