Un senador estadounidense está expresando su «grave preocupación» acerca de periódicos de Estados Unidos que publican inserciones pagas de un medio de comunicación estatal chino, diciendo que esto permite que el régimen de Beijing promueva su propaganda en el extranjero.
El senador Rick Scott (R-Fla.) instó a las organizaciones de noticias a reconsiderar su colaboración con el China Daily, en una carta enviada el 7 de noviembre a David Chavern, presidente y director ejecutivo de News Media Alliance y de American Press Institute, un grupo de la industria de los medios.
«Al dar rienda suelta a la China comunista para que publique su propaganda en nuestros medios de comunicación, estamos dando al gobierno chino la oportunidad de promover valores opuestos a las libertades garantizadas en nuestra Constitución», escribió Scott.
China Daily, que tiene una circulación en el extranjero de 600.000 ejemplares, es supervisado por el Departamento de Publicidad del Partido Comunista Chino, la agencia gubernamental encargada de difundir la propaganda. Varios periódicos importantes de Estados Unidos, como The Wall Street Journal, The New York Times y The Washington Post, publican un suplemento del periódico del régimen chino en inglés.
«En la primera página de la edición del 6 de noviembre del China Daily, una historia comienza diciendo: ‘El deseo de una democracia liberal al estilo occidental es un virus maligno que infecta lugares con sistemas inmunes ideológicos debilitados'», escribió Scott. «Esta es la propaganda que los periódicos americanos permiten que se asocie con el trabajo de sus periodistas».
Scott enumeró algunos de los abusos del régimen, incluyendo el robo de tecnología estadounidense, la negativa a abrir su mercado a empresas extranjeras y la militarización del Mar del Sur de China. El Partido también reprime la libertad religiosa en el país y niega a Hong Kong la autonomía que había prometido cuando la antigua colonia británica volvió al dominio chino en 1997, señaló.
Criticó a los medios por eludir los valores de EE. UU. y «[vender] el acceso a sus lectores al mejor postor».
«Al permitir que China Daily impulse sus ideales opresivos en nuestro país, pregúntense a sí mismos si las publicaciones estadounidenses gozan de los mismos privilegios en China o están obligadas por el estado de derecho y la censura de China», indicó en la carta. «Basado en su historial, creo que todos sabemos la respuesta a esa pregunta».
Sin libertad de prensa en China, el régimen presiona a los medios de comunicación extranjeros que operan en el país para que autocensuren su contenido mediante amenazas implícitas, como la revocación o la negación de visas a periodistas y la clausura de sus sitios web.
En el lapso previo a las elecciones de mitad de período de 2018 en Estados Unidos, un importante periódico de Iowa publicó un suplemento de cuatro páginas del China Daily, que incluía artículos sobre el efecto negativo de la guerra comercial sobre los agricultores de soja en Estados Unidos. Iowa, uno de los principales productores de soja del país, se ha visto afectado por la drástica reducción de las importaciones del cultivo en respuesta a los aranceles estadounidenses sobre los productos chinos.
El presidente Donald Trump reprendió en ese entonces al régimen por inmiscuirse en las elecciones con «anuncios de propaganda… hechos para que parecieran noticias».
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