Ricardo Godoy, diputado del partido Arena de El Salvador, explicó en una entrevista reciente cuáles son los propósitos del acercamiento cada vez mayor por parte de Beijing con el país centroamericano y los peligros que representa para los salvadoreños en Estados Unidos.
Esto luego de que el vicepresidente de El Salvador, Félix Ulloa dijera a inicios de noviembre que régimen chino ofreció al gobierno del país comprar su deuda externa en bonos. Asimismo, el gobierno de El Salvador estudia establecer un Tratado de Libre Comercio con China.
Godoy dijo a The Epoch Times en una entrevista durante la Conferencia de Acción Política Conservadora (CPAC) en México, que actualmente la estrategia geográfica que representa El Salvador se vuelve “muy importante”, señalando que “tenemos que estar conscientes que toda esta agenda del comunismo a lo largo de muchas décadas, ha sido siempre el problema que [los comunistas] tienen con Estados Unidos”.
Explicó que la importancia radica en la posición geoestratégica de El Salvador “para los intereses expansionistas de estos países, como lo es China, como lo es Cuba y para la ideologización que han hecho en América”.
Respecto al anuncio de Ulloa, Godoy dijo que China “no colaboran solo por colaborar. Ellos tienen un interés que es muy genuino, que es el de expandirse por el mundo, siempre enfocados en su afronta directa con Estados Unidos. China no regala nunca el dinero. China siempre pide algo a cambio y ha atacado soberanías de muchos países en el mundo que han caído en ese juego”.
El 9 de noviembre, el presidente Nayib Bukele informó que El Salvador firmará un Tratado de Libre Comercio con China.
También señaló que considerar un Tratado de Libre Comercio (TLC) para el país no está mal, sin embargo, aseguró que hay que detenerse a mirar la posición en la que se encuentra actualmente El Salvador en cuanto a su viabilidad de llevar a cabo el comercio exterior hacia China.
“En este momento, El Salvador no tiene la mayor oportunidad de exportar nada o casi nada hacia China”, dijo, explicando que en los años 2000 donde se tuvo una apertura económica por parte del país centroamericano con China “se exportaba más de lo que [se exporta] en este momento”.
Godoy considera que la constante cercanía entre Beijing y el gobierno de El Salvador, más bien, se estaría tratando de “una agenda que puede estar siendo pactada entre el gobierno salvadoreño y el gobierno chino únicamente con ese fin expansionista del gobierno chino”.
“Al gobierno chino no le interesa que los países sean totalmente democráticos, que respeten las constituciones políticas de cada país, porque esos son los términos mínimos indispensables que organismos como el Banco Mundial o el Fondo Internacional le piden a los países para [que] ellos [puedan] ayudar a nuestras economías”, afirmó.
“A China no le importa que se violen derechos humanos, no le importa que no se respeten las cartas magnas de nuestros países. A China no le importa que el Estado de Derecho se respete en nuestros países”, para que así ellos puedan dar su dinero, dijo.
Godoy explicó también que el acercamiento cada vez mayor entre El Salvador y China representa un peligro para los salvadoreños que viven en Estados Unidos, ya que según dijo, hay cerca de 3 millones y medio de salvadoreños con diferente tipo de estatus migratorio frente a los cerca de 7 millones de connacionales que viven en El Salvador.
“Es poner en riesgo la estabilidad (…) de nuestros hermanos en El Salvador, [ya que] también dependemos en este momento de las remesas que ellos nos envían en Estados Unidos”, dijo.
Godoy llamó “ilógico e incomprensible” el acercamiento por parte del presidente de El Salvador a China, que “es el enemigo de Estados Unidos y que es Estados Unidos quien nos ha tendido la mano para tener a nuestros hermanos salvadoreños en su territorio”.
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