El Departamento de Justicia (DOJ, por sus siglas en inglés) abrió una investigación de derechos civiles sobre las condiciones de las prisiones del estado de Misisipi, tras una serie de muertes de reclusos en los últimos meses.
El departamento anunció el 5 de febrero que investigará las condiciones en la penitenciaría del estado de Misisipi (Parchman), el Instituto Correccional del sur de Misisipi, el Centro Correccional de Misisipi y el Centro Correccional del condado de Wilkinson, siguiendo los casos de al menos a 15 personas que murieron dentro de las prisiones estatales desde finales de diciembre.
Los fiscales federales de la División de Derechos Civiles del departamento, trabajarán para determinar si los funcionarios penitenciarios del estado están protegiendo adecuadamente a los reclusos de daños físicos y si existen servicios adecuados de atención a la salud y de prevención del suicidio.
Las instalaciones investigadas son aquellas donde se reportaron la mayoría de las muertes. Algunas muertes fueron suicidios, mientras que otras murieron durante enfrentamientos entre reclusos.
«Es hora que el gobierno federal intervenga y haga lo que el Departamento Correccional de Misisipi no logró: poner fin a la violencia y asegurar condiciones de vida humanas», dijo el miércoles la subdirectora legal del Centro Jurídico de la Pobreza del Sur, Lisa Graybill, en un comunicado.
«Docenas murieron y cientos de otros viven en condiciones miserables con aguas residuales estancadas en temperaturas bajo cero como resultado de … la negligencia de Misisipi. Las prisiones de Misisipi están superpobladas, con poco personal y no son seguras para nadie», dijo.
El aumento de la violencia en las prisiones del estado de Misisipi y los entornos de trabajo cada vez más peligrosos de los últimos años, dejaron al Departamento Correccional del estado luchando por encontrar personas que trabajen como guardias en las instalaciones.
El mes pasado, Phil Bryant, el gobernador saliente de Misisipi, dijo que las pandillas que operan dentro del sistema penitenciario son las culpables del aumento de la violencia, diciendo que las prisiones son difíciles de manejar «bajo las mejores circunstancias».
«Alguien preguntó antes, ¿quién es el responsable de lo que está pasando en Parchman? Los reclusos», dijo Bryant a los periodistas. «Los reclusos son los que se quitan la vida unos a otros. Los reclusos son los que fabrican armas con metal».
Otros, sin embargo, dicen que es responsabilidad del estado mantener a los prisioneros a salvo.
La Penitenciaría Estatal de Misisipi en Parchman —una de las prisiones investigadas— tiene un largo historial de malas inspecciones del departamento de salud. Las inspecciones demostrado problemas de sanidad en las cocinas, celdas con fregaderos rotos, inodoros y agujeros en las paredes, y moho generalizado en las duchas.
Los influyentes raperos Jay-Z y Yo Gotti pagan abogados que demanden al estado en nombre de los reclusos por las condiciones en las prisiones. La demanda presentada a mediados de enero dice que las prisiones están «plagadas de violencia» y los reclusos se ven obligados a vivir en condiciones decrépitas y peligrosas.
Yo Gotti dijo a CBS News en un comunicado que la demanda seguirá adelante, pero que fue «alentado» por las noticias de la investigación.
«Tenemos la esperanza que sus hallazgos conduzcan a reformas estatales en estas instalaciones. Sin embargo, hasta que recibamos compromisos tangibles para cerrar estas prisiones y trasladar a los reclusos a instalaciones más seguras, procederemos con nuestra demanda».
The Associated Press contribuyó a este informe.
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