Trump rechaza el plan del Partido Republicano para investirlo como presunto candidato

Un republicano de Maryland retiró su propuesta después de que el expresidente se opusiera; la campaña de la candidata Nikki Haley minimizó su posible importancia

Por Janice Hisle
26 de enero de 2024 7:16 PM Actualizado: 26 de enero de 2024 11:15 PM

El expresidente Donald Trump tuvo la oportunidad de ser designado «presunto candidato» del Partido Republicano. No la aprovechó.

El Comité Nacional Republicano (RNC) estaba a punto de considerar una resolución que pedía a los republicanos de todo el país centrar «todos los esfuerzos y recursos» para derrotar al presidente demócrata Joe Biden.

Tras conocer la propuesta el 25 de enero, el presidente Trump escribió en Truth Social que agradecía el gesto. Pero, dijo, «siento, por el bien de la unidad del partido», escrito en mayúsculas, «que no deberían seguir adelante con este plan».

El expresidente aún se enfrenta a la oposición de la única aspirante republicana que le queda, la exembajadora ante la ONU Nikki Haley, que también fue gobernadora de Carolina del Sur durante dos mandatos.

El presidente Trump dijo que confiaba en que el RNC hubiera aprobado la propuesta de resolución a su favor, pero que prefiere «hacerlo a la «vieja usanza» y acabar el proceso en las urnas.»

Y añadió: «¡Gracias al RNC por el respeto y la devoción que me han mostrado!».

El portavoz del RNC, Keith Schipper, en una declaración enviada a The Epoch Times el 25 de enero, dijo que el Comité de Resoluciones del RNC «decidiría si enviar esta resolución para que fuera votada por los 168 miembros del RNC en nuestra reunión anual de la próxima semana».

Sin embargo, el autor de la resolución, David Bossie, miembro del RNC de Maryland, la retiró, según dijo a The Epoch Times el 26 de enero una fuente familiarizada con el asunto.

Bossie tomó esa decisión después de que el presidente Trump publicara su declaración en Truth Social a primera hora de la tarde del 26 de enero, dijo la fuente.

Bossie, que trabajó en la campaña de Trump en 2016, no respondió a un mensaje que se le dejó en su organización política conservadora, Citizens United.

La propuesta causa revuelo

La noticia de la propuesta de Bossie se conoció el 25 de enero a través de TheDispatch.com. El informe de ese medio de noticias incluía un enlace a un documento sin firmar y sin fecha titulado «Resolución para declarar al presidente Trump como nominado presunto del Partido Republicano».

Ese documento era una copia auténtica del que el Sr. Bossie había presentado a la consideración del RNC, dijo a The Epoch Times una fuente familiarizada con el asunto.

La resolución propuesta reconocía los serios esfuerzos de todos los candidatos. Pero también hacía hincapié en que el presidente Trump ganó el Caucus de Iowa y las primarias de New Hampshire por márgenes decisivos. Por lo tanto, según la resolución, puede ser considerado el » nominado presunto» o «aparente».

Hope Hicks, el subdirector de campaña David Bossie y la jefa de campaña Kellyanne Conway asisten al último mitin de la campaña de Trump el día de las elecciones en Devos Place en Grand Rapids, Michigan, el 8 de noviembre de 2016. (Chip Somodevilla/Getty Images)

También afirmaba que el expresidente mantenía «una ventaja insuperable en todos los estados que votan desde ahora hasta el Supermartes», el 5 de marzo. En esa fecha, 16 estados y territorios decidirán qué candidato les gustaría ver como candidato presidencial del RNC para las elecciones generales de noviembre.

En años anteriores, el Supermartes había sido fundamental para decidir qué candidato tenía más posibilidades de ser nominado.

Pero este año parece ser una anomalía, ya que todos los candidatos excepto el expresidente Trump y Haley ya han suspendido sus campañas.

En los comentarios en línea, los partidarios del expresidente parecían en general acoger con satisfacción la propuesta de Bossie, diciendo que se estaba malgastando tiempo y dinero en los esfuerzos de Haley.

Pero otros se mostraron críticos con la idea de que el RNC considerara siquiera una resolución de este tipo; algunos la calificaron de intento de «interferencia electoral». El RNC señaló que su presidenta, Ronna McDaniel, «no ofrece resoluciones».

Oponente: «¿A quién le importa?

Mientras que la sugerencia de Bossie seguía en juego el 25 de enero, la campaña de Haley se pronunció.

«¿A quién le importa lo que diga el RNC? Dejaremos que millones de votantes republicanos de todo el país decidan quién debe ser el candidato de nuestro partido, no un puñado de iniciados en Washington», dijo la portavoz de Haley, Olivia Pérez-Cubas, en un mensaje enviado a The Epoch Times.

Además, Pérez-Cubas pidió a McDaniel que organizara un debate en Carolina del Sur entre Haley y el presidente Trump.

Eso sería «útil», dijo Pérez-Cubas, sugiriendo que tal vez McDaniel podría estar «preocupada de que Trump no pueda soportar estar en el escenario durante 90 minutos con Nikki Haley».

El expresidente ha rechazado invitaciones a participar en debates con rivales políticos. Dijo que debatir con sus oponentes no supondría ninguna ventaja para él y no tenía sentido mientras disfrutaba de una ventaja dominante en prácticamente todas las encuestas de opinión.

El gobernador de Florida Ron DeSantis estrecha la mano de la ex embajadora de Estados Unidos ante la ONU Nikki Haley en el quinto debate de las primarias presidenciales republicanas en la Universidad Drake en Des Moines, Iowa, el 10 de enero de 2024. (Jim Watson/AFP vía Getty Images)

Persiste la ventaja dominante en las encuestas

El margen de victoria del presidente Trump en Iowa fue de alrededor del 30 por ciento. Eso es unos 4 puntos porcentuales menos de lo que había indicado la media de sondeos de opinión de RealClearPolitics (RCP), que está dentro del margen de error de la mayoría de las encuestas.

En New Hampshire, las encuestas se desviaron aún más del objetivo. El expresidente Trump venció a Haley por unos 11 puntos porcentuales, ocho puntos menos de lo que RCP había calculado.

Haley se ha resistido a los llamamientos para que abandone la carrera en medio de afirmaciones de que se enfrenta a una posibilidad remota en otros estados. Las primarias de New Hampshire del 23 de enero se consideraban su mejor oportunidad para ganar.

Ahora, el RCP a nivel nacional muestra al presidente Trump casi 58 puntos por delante de Haley. Él estaba recibiendo el apoyo de alrededor del 70 por ciento de los encuestados, mientras que alrededor del 13 por ciento apoyó a Haley.

En el siguiente estado que celebrará una contienda de preferencia presidencial, Nevada, se da una situación inusual, provocada por un cambio en la ley estatal que entra en conflicto con la preferencia del GOP del estado.

Haley optó por participar en las primarias estatales del 6 de febrero en lugar de en el caucus del GOP del 8 de febrero; solo este último decidirá qué candidato recibe delegados para la convención de nominación del RNC prevista del 15 al 18 de julio en Milwaukee, Wisconsin.

En el caucus, el presidente Trump y el distante aspirante Ryan Binkley se someterán a la consideración de los votantes, dijo Bruce Parks, presidente del GOP en el condado de Washoe, en Nevada, a The Epoch Times.

El siguiente estado, Carolina del Sur, celebrará sus primeras primarias republicanas en el sur el 24 de febrero. Los votantes pueden votar en esas elecciones «primarias abiertas» si no votaron en las primarias demócratas del 3 de febrero.

Carolina del Sur es el estado natal de Haley, donde anteriormente ocupó el cargo de gobernadora. Sin embargo, va a la zaga en las encuestas de opinión. El presidente Trump, que vive en Florida pero ha pasado la mayor parte de su vida en Nueva York, tenía una ventaja de 30 puntos sobre Haley en el RCP a 26 de enero.


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