El alcalde de Eagle Pass, en Texas, Rolando Salinas Jr., emitió una declaración de emergencia debido a un «grave» aumento de la inmigración ilegal.
El Sr. Salinas firmó la orden el 19 de septiembre, declarando oficialmente el estado de desastre para la ciudad de Eagle Pass, que durará al menos siete días y podrá renovarse si la crisis persiste.
Los cerca de 30,000 residentes de Eagle Pass se han visto desbordados por la afluencia de miles de inmigrantes ilegales en los últimos días, lo que se produce en medio de una oleada más amplia de personas que intentan cruzar la frontera entre Estados Unidos y México sin autorización.
Durante el domingo y las primeras horas del lunes, alrededor de 2.500 personas cruzaron ilegalmente a Eagle Pass, estimó el Sr. Salinas durante una conferencia de prensa celebrada el 19 de septiembre, aunque advirtió que no se trataba de una «cifra oficial exacta».
Según el sheriff del condado de Maverick, Tom Schmerber, otros 2700 inmigrantes cruzaron por Eagle Pass el martes y 3000 más el miércoles.
The Epoch Times se comunicó con el Departamento de Seguridad Pública de Texas para obtener las últimas estimaciones de los flujos humanos hacia Eagle Pass desde el otro lado de la frontera, pero no recibió una respuesta al momento de la edición.
Es probable que las últimas cifras sean de miles y la afluencia claramente esté abrumando a la ciudad y agotando sus recursos.
«La ciudad de Eagle Pass está comprometida con la seguridad y el bienestar de nuestros ciudadanos locales», dijo el Sr. Salinas en la declaración, que permite a la ciudad pedir recursos federales y estatales para ayudar a aliviar parte de la presión.
«La declaración de emergencia nos otorga la posibilidad de solicitar recursos financieros para brindar los servicios adicionales provocados por la afluencia de inmigrantes indocumentados», agregó el alcalde.
Debido a que el único refugio en Eagle Pass no pudo acomodar a todos los solicitantes de asilo, el miércoles se vio a un gran número de inmigrantes ilegales en las calles, informó la Radio Pública de Texas.
«Invasión en nuestra frontera»
La Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos (CBP) emitió una declaración diciendo que detendría temporalmente las operaciones de tramitación de vehículos en un puente y cruce ferroviario en Eagle Pass y redirigiría esos recursos para ayudar a detener a las personas que cruzan la frontera ilegalmente.
«En respuesta a esta afluencia de encuentros, continuaremos aumentando todos los recursos disponibles para procesar a los migrantes de manera expedita y segura», dijo la agencia en una declaración.
“Maximizaremos las consecuencias contra quienes no tienen una base legal para permanecer en Estados Unidos. La CBP continuará priorizando nuestra misión de seguridad fronteriza según sea necesario en respuesta a esta situación en evolución”.
El gobernador de Texas, Greg Abbott, dijo en un posteo en X que había «declarado oficialmente una invasión en nuestra frontera», al tiempo que culpó a las políticas del presidente Joe Biden por la afluencia.
El Sr. Abbott dijo que había ordenado más tropas de la Guardia Nacional de Texas, el Departamento de Seguridad Pública de Texas y las fuerzas del orden locales para repeler los cruces ilegales e instalar alambre de púas adicional.
«Estamos construyendo un muro fronterizo, alambre de púas y barreras marinas», dijo el gobernador.
«También estamos repeliendo a los inmigrantes», añadió el Sr. Abbot.
En el posteo, Abbott compartió una carta que había enviado al presidente Biden en noviembre de 2022, acusándolo de inacción ante lo que entonces ya era una crisis fronteriza en pleno apogeo.
«Su inacción ha tenido consecuencias catastróficas», escribió Abbott en la carta.
«Bajo su supervisión, Estados Unidos está sufriendo el mayor volumen de inmigración ilegal en la historia de nuestro país», continuó Abbott.
Los republicanos han culpado a los mensajes y políticas del presidente Biden de ayudar a alimentar una crisis fronteriza de proporciones históricas.
El Departamento de Defensa (DOD) está aumentando los recursos en la frontera entre Estados Unidos y México en medio de un aumento de los cruces fronterizos ilegales, no solo en Eagle Pass.
Despliegan más recursos militares
Los funcionarios del Departamento de Seguridad Nacional (DHS) dijeron a los periodistas en una llamada telefónica el miércoles por la noche que alrededor de 800 nuevos miembros del personal en servicio activo estaban siendo enviados a la frontera.
En una llamada del lunes, el funcionario del DHS indicó que hubo más de 8000 detenciones a lo largo de la frontera sur.
El funcionario no dio ninguna explicación sobre la causa del reciente aumento.
Esta semana, oficiales de policía dijeron al New York Post que los cárteles mexicanos de la droga y el tráfico de personas han estado dirigiendo intencionalmente masas de inmigrantes ilegales para inundar las operaciones de la CBP en la frontera con Estados Unidos.
El objetivo de tales acciones sería ayudar a los cárteles a llevar a cabo sus operaciones ilegales con menos supervisión.
Si bien Texas ha sido el más afectado por la ola de inmigración ilegal, otras regiones han enfrentado una mayor presión.
El sur de California también ha visto una afluencia de inmigrantes en los últimos días.
El alcalde de El Cajón, Bill Wells, un republicano, declaró que la situación es “un desastre”.
“Todas las salas de emergencia están llenas en el condado de SD. Nuestros refugios para personas sin hogar están llenos. Los recursos son escasos”, dijo el alcalde Wellsen un posteo en X.
«La administración Biden permitió que esto sucediera. ¡La gente debe prestar atención y votar para solucionar este problema!»
Con la contribución de Kos Temenes.
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