La economía estadounidense se expandió en 225.000 puestos de trabajo en enero, superando las expectativas de los economistas. Sin embargo, datos más detallados mostraron que el crecimiento del empleo en 2018 fue más débil de lo esperado, dejando espacio en la fuerza laboral para una expansión aún mayor.
El crecimiento de empleo fue más fuerte en la construcción, pero también sólido en la hostelería, la atención sanitaria, la educación, el transporte y el almacenamiento. El total superó fácilmente el pronóstico de los economistas de 160.000 de aumento encuestados por Reuters.
La Oficina de Estadísticas Laborales, que publica los datos oficiales cada primer viernes del mes, también publicó el 7 de febrero revisiones de los datos de empleo que revelaron un nivel de empleo no agrícola 0,3% más bajo que el reportado anteriormente. La revisión afectó principalmente al año 2018, cuando el crecimiento del empleo aumentó en unos 2,3 millones de puestos de trabajo, unos 350.000 menos que los reportados anteriormente. Para 2019, el crecimiento del empleo disminuyó en 12.000 puestos de trabajo.
A pesar de la revisión, la tasa de desempleo apenas se movió en enero, hasta el 3,6% desde el 3,5% de diciembre.
La tasa de participación en la fuerza laboral, que mide la proporción de adultos que trabajan o han buscado trabajo en las últimas cuatro semanas, aumentó al 63,4%, la más alta en unos siete años.
El Coronavirus y el acuerdo comercial con China
La manufactura se ha visto afectada en el último año debido a la escalada de los aranceles entre EE.UU. y China. La economía perdió 12.000 puestos de trabajo en la manufactura en enero, aunque la cifra sigue aumentando en 26.000 desde enero de 2019.
La situación estaba a punto de mejorar en el momento en que el presidente Donald Trump firmó un acuerdo comercial de primera fase con China el 15 de enero. Beijing se comprometió a comprar 200 mil millones de dólares en productos de EE.UU. en dos años.
El acuerdo entrará en vigor el 14 de febrero, pero la reciente propagación del nuevo coronavirus, que ha matado a cientos de personas en toda China, ha comprometido las perspectivas económicas.
«El auge de las exportaciones de ese acuerdo comercial tomará más tiempo debido al virus chino. Eso es cierto», dijo Larry Kudlow, asesor económico de la Casa Blanca.
Sin embargo, los fabricantes estadounidenses deberían seguir obteniendo los beneficios del Acuerdo entre Estados Unidos, México y Canadá (USMCA), dijo Kudlow, señalando que el brote tendrá un impacto «mínimo» en la economía estadounidense en general.
Por su parte, el Departamento del Tesoro de EE.UU. retiró casi 46.000 millones de dólares en aranceles de China, según datos de la Oficina de Aduanas y Protección de la Frontera de los EE.UU. (CBP).
El comercio bilateral se vio afectado en su mayor parte en la dirección de China a Estados Unidos, colapsando de casi 540.000 millones de dólares en 2018 a solo unos 450.000 millones de dólares en 2019. Las exportaciones de Estados Unidos a China, por su parte, se redujeron en solo unos 13.500 millones de dólares a unos 107.000 millones de dólares.
El 6 de febrero, China dijo que reduciría a la mitad algunos de sus impuestos gravados contra unos 75.000 millones de dólares de importaciones de EE.UU. en respuesta a los aranceles de Trump el año pasado.
La economía estadounidense se ha mantenido una expansión históricamente larga después de la recesión de 2008. Particularmente en los últimos tres años, la economía se benefició de la reducción de impuestos y las regulaciones de Trump.
Reuters contribuyó con este informe.
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