Estados Unidos condenó la detención del pastor cubano Lorenzo Rosales por parte del régimen comunista de Cuba, y apoyó las manifestaciones pacíficas por la libertad de la isla.
La oficina de Democracia, Derechos Humanos y Trabajo del Departamento de Estado de EE. UU. emitió una declaración en rechazo al arresto del pastor Lorenzo Rosales y cientos de cubanos más durante las protestas llevadas acabo desde el 11 de julio en Palma Soriano pidiendo el fin de la dictadura comunista.
«El régimen cubano ve tan amenazante que sus ciudadanos ejerzan sus derechos humanos que han detenido a cientos incluyendo al pastor Lorenzo Rosales durante una marcha pacífica el 11 de julio», escribió la oficina a través de un mensaje de Twitter el 26 de julio.
La oficina denunció también que han pasado 15 días sin tener conocimiento de su paradero, de alguna prueba de vida, o de su estado de salud.
.@StateDRL: El régimen cubano ve tan amenazante que sus ciudadanos ejerzan sus derechos humanos que han detenido a cientos incluyendo al pastor Lorenzo Rosales durante una marcha pacífica el 11 de julio. Han pasado 15 días sin comunicación ni prueba de vida o de bienestar (1/4). https://t.co/zBED5136jc
— USA en Español (@USAenEspanol) July 27, 2021
La oficina posteó en Twitter una fotografía del pastor Lorenzo Rosales junto a su esposa y dijo que su cónyuge tuvo que preguntar a las autoridades en varias ocasiones sobre el paradero de su esposo y poder proporcionarle artículos de higiene, «pero no se le permitió verlo, hablarle o dejarle una Biblia».
El pastor continúa detenido como muchos otros, mientras espera su juicio, con cargos tales como «falta de respeto, desorden público y ataques», aseguró la oficina.
Mientras tanto, su esposa también fue amenazada con represalias contra su hijo, quien también se encuentra detenido y enfrentando cargos, si continúa alzando la voz.
«Este es uno de tantos ejemplos de la represión del régimen cubano a sus ciudadanos que se han levantado valientes por sus derechos humanos y libertades. La detención masiva de manifestantes pacíficos debe parar. Apoyamos a los cubanos en su reclamos por libertad», dice la declaración.
Durante las protestas del 11 de julio, la dictadura detuvo también a los pastores Yéremi Blanco y Yarian Sierra. Ambos fueron puestos bajo arresto domiciliario el 24 de julio tras permanecer en la cárcel de mujeres de Matanzas y en un centro de la Seguridad del estado.
Según denunció la oenegé Solidaridad Cristiana Mundial, la familia del pastor Sierra fue desalojada de su hogar luego que el régimen presionara al propietario del inmueble a hacerlo.
«Siguen sin hogar a pesar de la liberación del pastor», señaló la organización.
La semana pasada, el gobierno de Joe Biden impuso sanciones contra un general cubano y una brigada especial por la represión del pueblo cubano en medio de las masivas protestas nacionales. Ambos fueron designados según la Ley Magnitsky.
“El pueblo cubano tiene el mismo derecho a la libertad de expresión y reunión pacífica que todas las personas. Estados Unidos apoya a los valientes cubanos que han salido a las calles para oponerse a 62 años de represión bajo un régimen comunista”, dijo Biden el 22 de julio.
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