El presidente Joe Biden reiteró al presidente de Corea del Sur, Yoon Suk Yeol, que el compromiso de Estados Unidos de disuadir a Corea del Norte está respaldado por toda la gama de capacidades estadounidenses, incluidas las nucleares, al firmar ambos países el 11 de julio unas directrices para “mantener una política y una postura eficaces de disuasión nuclear” en la península coreana.
Los dos líderes celebraron la firma de los protocolos en una declaración conjunta emitida por la Casa Blanca mientras se reunían al margen de la Cumbre anual de la OTAN en Washington.
“Los avances logrados desde la creación del Grupo Consultivo Nuclear (NCG) entre Estados Unidos y la República de Corea demuestran la alianza estratégica verdaderamente global e integral entre ambos países, la relación de defensa mutua cada vez más fuerte y nuestro interés compartido en la paz, la estabilidad y la desnuclearización completa de la península coreana”, declararon las 2 naciones.
Ambos presidentes subrayaron que cualquier ataque nuclear contra Corea del Sur por parte de Corea del Norte sería respondido con “una respuesta rápida, abrumadora y decisiva”.
El acuerdo fue firmado en el Pentágono el jueves por el Subsecretario de Defensa en funciones para Política Espacial de Estados Unidos, Vipin Narang, y el Viceministro de Política de Defensa Nacional de Corea del Sur, Cho Chang Lae, según un comunicado del Departamento de Defensa de Estados Unidos.
El Sr. Narang y el Sr. Lae son copresidentes del NCG, un órgano consultivo bilateral establecido por Washington y Seúl en abril de 2023 como parte de los esfuerzos en curso para fortalecer la alianza entre Estados Unidos y Corea del Sur.
Los dos países ultimaron las directrices durante la tercera reunión del NCG, celebrada en Seúl en junio. Corea del Sur no tiene armas nucleares y depende en gran medida del paraguas nuclear estadounidense.
Washington y Seúl han expresado en repetidas ocasiones su preocupación por el constante desarrollo de las capacidades nucleares y el programa de misiles de Corea del Norte, que suponen una grave amenaza para su seguridad.
Las directrices conjuntas de disuasión nuclear se firmaron pocas semanas después de que los líderes de Corea del Norte y Rusia redactaran un pacto global de “asociación estratégica” que prevé la “asistencia mutua en caso de agresión contra una de las partes”.
Ese acuerdo se firmó durante la visita del Presidente ruso Vladimir Putin a Pyongyang, la capital norcoreana, el 19 de junio.
El mandatario ruso estuvo acompañado por el líder norcoreano Kim Jong Un en la ceremonia de firma del acuerdo, que también prevé una mayor cooperación en los sectores económico, comercial, cultural y humanitario.
El tratado también establece “amplios puntos de referencia para profundizar las relaciones entre Rusia y Corea a largo plazo”, dijo Putin en una declaración a los periodistas tras la firma del acuerdo.
Por su parte, el líder norcoreano calificó el pacto como “pacífico y defensivo” y afirmó que su objetivo es mejorar las relaciones bilaterales.
La Casa Blanca alegó a principios de este año que Rusia está utilizando misiles balísticos norcoreanos en su guerra contra Ucrania.
Moscú y Pyongyang han negado sistemáticamente esas acusaciones.
Con información de Associated Press
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