El 3 de abril, el presidente Donald Trump anunció que el gobierno pagará el tratamiento médico de COVID-19 para los estadounidenses sin seguro utilizando fondos del paquete de estímulo aprobado por el Congreso el mes pasado.
«Esto debería aliviar cualquier preocupación que los estadounidenses no asegurados puedan tener acerca de buscar el tratamiento de coronavirus», dijo Trump durante una conferencia de prensa el 3 de abril, y agregó que la medida está «muy a favor de nuestra gran gente».
Trump hizo el anuncio cuando Estados Unidos experimentaba el peor día de la pandemia. El estado de Nueva York reportó el mayor número de muertes diarias de COVID-19 para el 2 de abril, mientras que otras partes del país confirmaron un número alarmante de casos.
Trump firmó el proyecto de ley de estímulo más grande en la historia de los Estados Unidos el 27 de marzo, desbloqueando USD 2.2 billones en fondos para luchar contra el virus del Partido Comunista Chino (PCCh), comúnmente conocido como el coronavirus, y para apoyar a los trabajadores y empresas estadounidenses mientras millones de personas se quedan en sus hogares para ayudar a detener la propagación de la enfermedad.
Los funcionarios de la administración planearon financiar el tratamiento con dinero de los USD 100.000 millones asignados a los hospitales como parte del proyecto de ley de estímulo.
El vicepresidente Mike Pence reveló que la administración está trabajando en un plan para cubrir a los no asegurados el 2 de abril.
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«El presidente fue claro: no queremos que ningún estadounidense se preocupe por el costo de hacerse una prueba o el costo de recibir tratamiento», dijo Pence, jefe de la Fuerza de Tarea de Coronavirus de la Casa Blanca, el jueves por la noche.
Hay aproximadamente 30 millones de estadounidenses que no tienen seguro de salud, dijo Pence.
Varias compañías de seguros privadas, incluidas Blue Cross, Signa, Humana y Anthem, han renunciado a los copagos por el tratamiento de COVID-19.
«Para que hagan eso con los copagos, es una gran declaración», dijo Trump.
La cobertura de Medicaid y Medicare también se ha ampliado para incluir pruebas y tratamiento de virus del PCCh , así como servicios de telesalud. La administración Trump también ha reducido las regulaciones para dar a los hospitales más flexibilidad para abordar la pandemia.
Estados Unidos tenía más de 273,000 casos de COVID-19 a las 6:40 pm del 3 de abril, según datos de Johns Hopkins. La enfermedad se ha cobrado la vida de 7077 personas en todo el país.
El gobierno federal está compitiendo para comprar y adquirir suministros y equipos esenciales, como máscaras faciales, batas médicas y ventiladores, ya que los hospitales en puntos calientes de todo el país proyectan escasez.
Trump dijo que invocaría la Ley de Producción de Defensa para prohibir la exportación de estos artículos. La administración había prohibido anteriormente el acaparamiento de máscaras y otros artículos.
Zachary Stieber contribuyó a este informe.
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