El presidente Joe Biden afirmó el viernes que Estados Unidos debe apoyar los intentos mundiales de detener la propagación del COVID-19, a pesar de que ha infectado a decenas de millones de personas, «para poder vencer al COVID» en casa.
«En Estados Unidos de América, estamos haciendo todo lo que hay que hacer para cuidar al pueblo estadounidense dentro de nuestras fronteras», dijo Biden durante una conferencia de prensa el viernes. «Pero miren lo que ha pasado. … Estamos empezando a hacer algunos progresos reales, y descubres que hay otra cepa».
El gobierno federal tiene que trabajar para hacer frente al virus del PCCh (Partido Comunista Chino) en otros países porque Estados Unidos no puede «construir un muro alrededor de América».
«Para vencer al COVID, tenemos que acabar con él en todo el mundo», añadió Biden, y añadió que unos requisitos más estrictos para viajar a Estados Unidos deberían ser suficientes para hacer frente a la nueva variante emergente, ómicron.
Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés) publicaron esta semana una norma que estipula que los viajeros totalmente vacunados deben mostrar un resultado negativo en la prueba de COVID-19 un día antes de llegar a Estados Unidos. Mientras tanto, Estados Unidos también impuso restricciones de viaje a ocho países del sur de África debido a ómicron, que entraron en vigor el lunes.
Funcionarios de la Casa Blanca defendieron el viernes, entre ellos el coordinador de la respuesta al COVID-19, Jeff Zients, la medida de imponer restricciones de viaje a las naciones africanas a pesar de las críticas de la Organización Mundial de la Salud, las Naciones Unidas y los dirigentes de Sudáfrica.
«Estamos vigilando activamente la nueva variante, abordando las cuestiones que se han planteado sobre la transmisibilidad, la gravedad y la eficacia de la vacuna, y a medida que sepamos más sobre la variante en los próximos días en todos estos frentes, las decisiones sobre los cambios en la política de viajes se basarán en el asesoramiento, como siempre, de nuestros expertos sanitarios y médicos», dijo Zients a los periodistas el viernes.
Biden dijo que sigue «confiando en los científicos y preguntándoles si tenemos o no que ir más allá de lo que hicimos ayer… ahora mismo, dicen que no». El presidente se refirió al informe sobre el empleo de noviembre, que muestra que las nóminas no agrícolas aumentaron solo en 210,000 en el mes, mientras que la tasa de desempleo cayó al 4.2 por ciento.
Hace unos días, Biden dijo que su plan para hacer frente a la variante ómicron «no incluye cierres y confinamientos», aunque todavía no está claro si la nueva variante es especialmente más transmisible o mortal que la variante delta. Al mismo tiempo, el presidente dijo que las personas que sean aptas deberían recibir una vacuna de refuerzo.
Aún se desconoce mucho sobre la variante ómicron, como por ejemplo si es más contagiosa, si causa una enfermedad más grave y si puede contrarrestar las vacunas. Las autoridades informaron el viernes que se han registrado al menos seis casos en Estados Unidos, el último confirmado en Nebraska.
Un importante médico sudafricano que había tratado a pacientes de ómicron dijo que éstos presentaban síntomas inusuales pero «extremadamente leves». Hasta ahora no se ha confirmado ninguna muerte relacionada con ómicron.
Con información de The Associated Press.
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