Estados Unidos incluyó este viernes a Cuba y Nicaragua en la lista de “Países de Especial Preocupación” por “graves violaciones de la libertad religiosa”, quedando propensos a sanciones por parte de Washington.
La designación de Cuba y Nicaragua se da en virtud de la Ley de Libertad Religiosa Internacional de 1998 “por haber cometido o tolerado violaciones especialmente graves de la libertad religiosa”, según dijo el secretario de Estado, Antony Blinken, en un comunicado publicado este viernes.
El funcionario estadounidense señaló que estos regímenes “acosan, amenazan, encarcelan e incluso matan” a los creyentes, socavando la religión o creencias de las personas para aprovechar los fines políticos.
“Estas acciones siembran división, socavan la seguridad económica y amenazan la estabilidad política y la paz. Estados Unidos no se quedará de brazos cruzados ante estos abusos”, agregó.
La designación de gravedad también incluye al régimen de China, Irán, Corea del Norte, Rusia, Arabia Saudita, entre otros.
En agosto, Prisoners Defenders dijo que la Constitución cubana de 2019 “ha significado un ligero paso atrás” para la libertad religiosa. Un estudio de julio realizado por la organización y la Comisión de Estados Unidos sobre Libertad Religiosa Internacional (USCIRF), señaló que un 93 por ciento de los religiosos en Cuba sufrió algún tipo de represión.
El 84 por ciento de los encuestados ha sufrido amenazas “por motivos de pensamiento, conciencia o religiosos”, mientras que un 93 por ciento conoce “personalmente” casos de autoridades religiosas que han sufrido “represión, registros, vigilancia o que han tenido que emigrar por la represión”.
En julio, el pastor evangélico cubano Alain Toledano Valiente, líder del Movimiento Sendas de Justicia y orillado al exilio junto con su familia, dijo al medio cubano independiente Radio Martí que denunció en reiteradas ocasiones hostigamiento contra su templo.
Y en declaraciones realizadas al llegar a Miami, Toledano dijo que las autoridades cubanas le advirtieron que abandonara el país dentro de 30 días o su familia enfrentaría las consecuencias.
En el caso de Nicaragua, el régimen liderado por Daniel Ortega y su esposa Rosario Murillo ha recibido cada vez más críticas internacionales debido a su persecución contra la iglesia católica.
La Alianza Internacional para la Libertad Religiosa o de Creencia (IRFBA) denunció en octubre, que la Iglesia Católica ha sido objeto de 190 ataques; entre ellos, el incendio en la catedral de Managua en agosto de 2020, o el acoso policial contra obispos y sacerdotes, incluyendo la situación de arresto domiciliario del obispo de Matagalpa, Rolando Álvarez.
Los países incluidos en el listado de Estados Unidos están sujetos a posibles sanciones como la cancelación de intercambios científicos y culturales, la suspensión de la asistencia para el desarrollo, el bloqueo de préstamos o restricciones de exportaciones.
En un segundo nivel de gravedad, el gobierno estadounidense incluyó en la “Lista Especial de Vigilancia” a Argelia, la República Centroafricana, las Comoras y Vietnam “por cometer o tolerar graves violaciones de la libertad religiosa”.
Además enlistó a los grupos terroristas Al Shabab, Boko Haram, Hayat Tahrir al Sham, los Houthis, ISIS-Gran Sáhara, ISIS-África Occidental, Jama’at Nusrat al Islam wal-Muslimin, los talibanes y la organización paramilitar rusa Grupo Wagner como “Entidades de Especial Preocupación”.
Con información de EFE.
Siga a Alicia Márquez en Twitter: @AliceMqzM
Únase a nuestro canal de Telegram para recibir las últimas noticias al instante haciendo click aquí
Cómo puede usted ayudarnos a seguir informando
¿Por qué necesitamos su ayuda para financiar nuestra cobertura informativa en Estados Unidos y en todo el mundo? Porque somos una organización de noticias independiente, libre de la influencia de cualquier gobierno, corporación o partido político. Desde el día que empezamos, hemos enfrentado presiones para silenciarnos, sobre todo del Partido Comunista Chino. Pero no nos doblegaremos. Dependemos de su generosa contribución para seguir ejerciendo un periodismo tradicional. Juntos, podemos seguir difundiendo la verdad.