Las fuerzas del orden estadounidenses han detenido a 833 fugitivos en una operación policial a gran escala desplegada en diez ciudades del país con cifras destacadas de violencia, señaló este lunes el Departamento de Justicia.
El dispositivo tuvo lugar en Albuquerque, Buffalo, Cleveland, Columbus, Detroit, Jackson, Kansas, Milwaukee, Oakland y Puerto Rico.
La llamada operación «North Star II» (Estrella del Norte II) se desarrolló a lo largo de 30 días, mayoritariamente en enero, y se centró en individuos perseguidos por homicidio, agresión sexual o robo y que durante su ataque usaron un arma de fuego o mostraron factores de riesgo vinculados con la violencia.
El fiscal general de Estados Unidos, Merrick Garland, indicó en el comunicado que su resultado refleja la determinación del Departamento de Justicia y de otras agencias a la hora de encontrar y llevar ante los tribunales a los responsables de delitos violentos.
Entre los detenidos había 95 personas buscadas por homicidio y 68 por agresión sexual.
Además de los arrestos, las fuerzas del orden requisaron 181 armas de fuego, más de 229,000 dólares en efectivo y más de 160 kilogramos de droga.
Uno de los detenidos fue Edwin Padilla-Lopez, arrestado el pasado 3 de febrero en Carolina (Puerto Rico) por presunta conspiración para distribuir droga en los municipios de Caguas, Cidra y Aguas Buenas.
La primera parte de esta operación policial se efectuó en junio del año pasado y resultó en el arresto de más de 1500 personas que huían de la justicia por delitos violentos o sexuales, así como en la incautación de 166 armas de fuego, más de 53,600 dólares en efectivo y 33 kilogramos de narcóticos.
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