El Gobierno está enviando más agentes para controlar el flujo de inmigrantes al área del Valle del Río Grande, en Texas, a donde en las últimas semanas han llegado cientos de familias y niños no acompañados que buscan ingresar a Estados Unidos, dijo a Efe este martes la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP).
“Debido a las fluctuaciones a lo largo de la frontera suroeste, la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de los EE.UU. está desplegando agentes adicionales en el área de operaciones del sector del Valle del Río Grande”, asegura CBP en declaraciones enviadas a Efe.
Más agentes para disuadir a inmigrantes
Con estas acciones, CBP “busca disuadir e interrumpir las actividades de tráfico de personas por parte de organizaciones criminales transnacionales y garantizar que nuestro personal esté debidamente equipado para mantener la seguridad fronteriza”, agrega la agencia de control fronterizo.
En las últimas semanas, el área del Valle del Río Grande ha visto una ola de inmigrantes que han cruzado la frontera de manera indocumentada.
El jueves pasado se reportó el hallazgo de más de 230 indocumentados, incluyendo a varios niños no acompañados, en varios operativos de CBP en casas de seguridad en este sector.
El grupo más grande, 130 inmigrantes, fue hallado cerca a la ciudad de Mission y estaba compuesto principalmente por familias y niños no acompañados oriundos de Centroamérica, resaltó la agencia.
En otro operativo efectuado el martes pasado, los oficiales de la CBP junto al Departamento de Policía de Pharr encontraron a 71 indocumentados dentro de una casa. En el grupo se descubrió que tres niños viajaban solos.
Otros operativos a inicio de mes también reportan el hallazgo de grandes grupos de inmigrantes en esta área de Texas.
La puerta de entrada de familias
El sector del Valle del Río Grande se convirtió en 2018 uno de los pasos preferidos por familias inmigrantes indocumentadas que intentaban ingresar al país.
La situación obligó a CBP a emprender campañas enfocadas en rescates y para crear conciencia de peligro como la “Operación Big Rig” y “No Se Arriesgue”.
«¡Son humanos, no carga!”, decía la agencia en 2018 ante el incremento.
El mensaje parece haber cobrado relevancia en los últimos meses. Hace dos semanas agentes de CBP recibieron información de que una mujer hondureña embarazada estaba en peligro en algún lugar cerca del Río Grande.
Los agentes, que respondieron al llamado de auxilio, encontraron que la mujer había dado a luz. La temperatura cerca del Río Grande esa noche se sintió a menos de 30 grados fahrenheit (-1 grado celsius), detalló CBP.
Más agentes
Tom Gresback, vocero de CBP del sector del Valle del Río Grande, dijo a Efe que “debido a la sensibilidad de la información no puede dar más detalles sobre el número total de agentes que serán desplegados, la ubicación y otros aspectos”.
Los datos sobre los inmigrantes puestos bajo custodia del mes de febrero aún no están disponibles. Sin embargo enero del 2021 ya presentó récords al detener a casi 78,000 inmigrantes a lo largo de la frontera con México en enero, el número más alto para ese mes en al menos una década y más del doble que el año anterior.
Reto para la Administración Biden
La confirmación del envío de más agentes a la frontera, y la que pudiera ser una nueva ola de inmigrantes representa un reto para la administración del presidente Joe Biden.
Sin embargo, el secretario del Departamento de Seguridad Interna, Alejandro Mayorkas, rechazó este lunes en una conferencia de prensa la afirmación de que la situación en la frontera se había convertido en una crisis.
“Hay un desafío en la frontera que estamos manejando”, sostuvo Mayorkas, que pidió a aquellos que estén planeando viajar a EE.UU. para pedir asilo en la frontera que no lo hagan «ahora», sino que esperen a que el Gobierno restablezca el sistema migratorio desmantelado por la anterior administración.
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