Las cifras de desempleo para mayo en Estados Unidos una vez más destrozaron múltiples registros a medida que cientos de miles de estadounidenses encontraron trabajo en el creciente mercado.
El desempleo cayó al 3,8 por ciento, el nivel más bajo desde 1969, mientras que la economía agregó 223.000 empleos, según el reporte de la Oficina de Estadísticas del Trabajo, difundido el 1 de junio, la cifra supera las expectativas en más del 17 por ciento, según un análisis de Goldman Sachs.
El desempleo en la comunidad negra cayó a un 5,9 por ciento, el más bajo desde un mínimo histórico de 6,6 por ciento dado en abril.
El desempleo femenino descendió hasta el 3,6 por ciento, el más bajo desde 1953.
El desempleo de la comunidad asiática descendió al 2,1 por ciento, considerando que la Oficina de Estadísticas del Trabajo solo estuvo siguiendo estas cifras desde 2003.
El desempleo hispano subió hasta el 4,9 por ciento, aunque sigue rondando los mínimos históricos..
Las cifras de desempleo pueden ser engañosas ya que no incluyen a quienes no han buscado un empleo en las últimas cuatro semanas
Pero incluso contando a los desempleados que han buscado un trabajo en los últimos 12 meses y también a aquellos a los que les gustaría tener un trabajo de tiempo completo pero tienen que conformarse con empleos a tiempo parcial, las cifras son del 7,6 por ciento, los mejores números desde 2001.
Considerando que los economistas han advertido durante décadas que la población estadounidense que envejece ha tenido cada vez menos personas para sostener la economía, ese no fue el caso en mayo. Más personas mayores de 55 años se unieron a la fuerza de trabajo el mes pasado, mientras que fueron principalmente personas menores de 45 años las que se retiraron.
Como resultado, «dos tercios de la caída en la tasa de desempleo en mayo se debieron a que los trabajadores encontraron trabajo, mientras que alrededor de un tercio de la caída fue de personas que abandonaron la fuerza de trabajo», señaló el Instituto de Política Económica de izquierda.
Hay casi 95 millones de personas no consideradas en la fuerza de trabajo: las personas mayores de 16 años que no trabajan y que actualmente no están buscando trabajo, principalmente porque estudian, son amas de casa, están enfermas o están jubiladas. Entre ellos, había alrededor de 5,5 millones que querían un trabajo en 2017.
Ese número ha disminuido en los últimos años, para insinuar que más personas que han renunciado a encontrar un trabajo ahora lo están intentando de nuevo y lo están logrando.
El presidente Donald Trump se postuló a la Casa Blanca con la promesa de revivir la economía y los resultados parecen impulsar su agenda preparada para el 6 de noviembre, fecha de las importantes elecciones que coinciden con la mitad de su período de gobierno.
La economía viene superando las expectativas durante más de un año.
En marzo, los empleadores ofrecieron la mayor cantidad de puestos de trabajo en un mes, 6,55 millones, lo que cubre casi a todos los desempleados.
Más de dos de cada tres estadounidenses también creen que es un buen momento para encontrar un trabajo de calidad, la respuesta más positiva desde que Gallup comenzó a hacer la pregunta en sus encuestas hace 17 años.
De hecho, la encuesta de Gallup nunca obtuvo un resultado positivo de más del 50 por ciento antes que Trump asumiera el cargo.
Desde que Trump asumió la presidencia, el ingreso familiar medio creció casi un 3,2 por ciento y alcanzó un récord de USD 61.483 en abril, según las estimaciones de Sentier Research, basadas en datos de la encuesta del Censo.
Según una reciente encuesta de YouGov, casi dos tercios de los estadounidenses ven la economía de manera positiva, y más de dos tercios creen que las políticas del presidente Donald Trump, que incluyen el recorte de impuestos y su inversión planificada en infraestructura, son al menos parcialmente responsables.
Cómo puede usted ayudarnos a seguir informando
¿Por qué necesitamos su ayuda para financiar nuestra cobertura informativa en Estados Unidos y en todo el mundo? Porque somos una organización de noticias independiente, libre de la influencia de cualquier gobierno, corporación o partido político. Desde el día que empezamos, hemos enfrentado presiones para silenciarnos, sobre todo del Partido Comunista Chino. Pero no nos doblegaremos. Dependemos de su generosa contribución para seguir ejerciendo un periodismo tradicional. Juntos, podemos seguir difundiendo la verdad.