Estados Unidos ha prometido enviar alrededor de USD 64 millones más en ayuda a Afganistán, comprometiéndose a respetar las sanciones impuestas a los talibanes.
La Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID) y el Departamento de Estado de Estados Unidos están enviando la ayuda a través de organizaciones independientes como agencias de las Naciones Unidas (ONU) y grupos no gubernamentales para «brindar apoyo vital directamente a los afganos que enfrentan los efectos agravados de la inseguridad, el conflicto, desastres naturales recurrentes y la pandemia de COVID-19”, dijo USAID en un comunicado el lunes.
Los talibanes se apoderaron de Afganistán a mediados de mayo, derrotando a las fuerzas afganas respaldadas por Estados Unidos en una serie de combates.
Las tropas estadounidenses se apresuraron a volver al país para asegurar el aeropuerto de Kabul y permitir la evacuación de unas 120,000 personas, pero se retiraron el 30 de agosto.
Las sanciones contra los talibanes se respetarán al distribuir la ayuda, dijo el lunes el secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, a los legisladores en Washington.
“Hemos visto que han tenido una sequía terrible y crecientes problemas de nutrición. Es una de las razones por las que creemos que es tan importante asegurarnos de que, independientemente de cualquier otra cosa, nosotros y otros países encontremos formas de continuar la asistencia humanitaria al pueblo de Afganistán”, dijo.
“Podemos y haremos eso de acuerdo con las sanciones de nuestras leyes al dirigir la asistencia a través de las ONG y agencias de las Naciones Unidas, no a través del gobierno. Necesitamos hacer todo lo posible para asegurarnos de que el pueblo de Afganistán no sufra más”, agregó.
El Departamento de Estado se negó a nombrar a los grupos no gubernamentales. USAID no respondió a una solicitud de comentarios.
Un portavoz del Departamento de Estado le dijo a The Epoch Times por correo electrónico: «Nuestros socios tienen una amplia experiencia trabajando en entornos desafiantes y cuentan con sólidos procedimientos de gestión de riesgos para sus operaciones, con el objetivo de garantizar que la asistencia humanitaria llegue a los destinatarios previstos».
“No hemos tomado medidas para reducir la presión de las sanciones sobre los líderes talibanes sancionados o las importantes restricciones a su acceso al sistema financiero internacional”, agregó el vocero.
Estados Unidos es el mayor donante de ayuda humanitaria a Afganistán, según USAID. El apoyo financiero sólo este año asciende a casi USD 330 millones.
Los estados miembros de las Naciones Unidas anunciaron el lunes USD 1200 millones en ayuda a los ciudadanos afganos, dijeron funcionarios de las Naciones Unidas. Los fondos ayudarán a casi 11 millones de personas durante los próximos cuatro meses, dijo Morgan Griffiths, un funcionario de socorro de las Naciones Unidas, en la Asamblea General de la organización en Ginebra.
La financiación podría ir a los talibanes. Griffiths señaló que el grupo pidió apoyo internacional para reconstruir Afganistán y construir un programa antinarcóticos.
Algunos legisladores estadounidenses han expresado que les preocupa que la ayuda pueda beneficiar a los talibanes.
«Me gustaría ver, si vamos a ayudar a Afganistán con alimentos y ayuda, que les extraigamos ciertos compromisos antes de simplemente darles comida», dijo el representante Albio Sires (D-N.J.).
Blinken comenzó a responder, pero Sires lo interrumpió y pasó a otro tema.
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