Estados Unidos vetó el viernes una resolución del Consejo de Seguridad de la ONU que abogaba por un alto el fuego inmediato en la guerra entre Israel y Hamas y criticó como un «grave fracaso moral», el que el Consejo no condenara los atentados terroristas del 7 de octubre.
En declaraciones ante el Consejo de Seguridad, el embajador adjunto de Estados Unidos ante la ONU, Robert Wood, dijo que el proyecto de texto estaba «desconectado» de la realidad.
«Nosotros seguimos sin entender por qué los autores de la resolución se negaron a incluir un texto que condenara el horrible ataque terrorista de Hamás contra Israel el 7 de octubre«, declaró el Sr. Wood.
Estados Unidos, que tiene derecho de veto, es uno de los cinco miembros permanentes del Consejo de Seguridad, junto con Rusia, China, Francia y el Reino Unido. Los miembros no permanentes son Brasil, Albania, Ecuador, Gabón, Ghana, Suiza, Emiratos Árabes Unidos, Malta y Japón.
Emiratos Árabes Unidos, que preside el Consejo en diciembre, propuso la resolución, a favor de la cual votaron 13 países miembros, salvo el Reino Unido, que se abstuvo.
«El hecho de que este Consejo no haya condenado los atentados terroristas de Hamás del 7 de octubre -incluidos sus actos de violencia sexual y otras maldades impensables- es un grave fracaso moral, y subraya la desconexión fundamental entre los debates que hemos mantenido en esta Cámara y las realidades sobre el terreno», declaró Wood.
Estados Unidos ha apoyado activamente el derecho de Israel a defenderse del terrorismo mediante una intensa diplomacia, a la vez que ha ayudado a Gaza con esfuerzos humanitarios. A pesar de estos esfuerzos, la ruptura de una tregua temporal y la reanudación de los combates se produjeron debido a la negativa de Hamás a liberar a los rehenes.
Muchas de las jóvenes rehenes que Hamás se negó a liberar «están siendo sometidas a tratos crueles e inhumanos», afirmó el Sr. Wood, citando relatos de los sobrevivientes.
Aunque Estados Unidos apoya «una paz duradera» entre israelíes y palestinos, el embajador indicó que Hamás «sigue representando una amenaza para Israel y sigue al mando de Gaza».
«Esa no es una amenaza que ninguno de nuestros gobiernos permitiría que siguiera existiendo en nuestras propias fronteras. No después del peor ataque contra nuestro pueblo en varias décadas», afirmó el Sr. Wood. «Por esa razón, aunque Estados Unidos apoya firmemente una paz duradera en la que tanto israelíes como palestinos puedan vivir en paz y seguridad, no apoyamos los llamados a un alto el fuego inmediato».
«Esto solo sembraría las semillas de la próxima guerra, porque Hamás no desea una paz duradera, una solución basada en dos Estados», añadió el Sr. Wood.
El embajador estadounidense también afirmó que los miembros del Consejo de Seguridad de la ONU «tienen la obligación de explicar cómo sus propuestas romperán el ciclo de violencia incesante».
«Nuestro objetivo no debe ser simplemente detener la guerra por hoy, sino poner fin a la guerra para siempre, romper el ciclo de violencia incesante y construir algo más fuerte en Gaza y en todo Oriente Medio para que la historia no se repita», afirmó el Sr. Wood.
El artículo 99, un «nuevo mínimo moral» para la ONU
La resolución se presentó después de que el secretario general de la ONU, Antonio Guterres, invocara el miércoles el artículo 99 de la Carta de las Naciones Unidas para obligar al Consejo de Seguridad a abordar el conflicto entre Israel y Hamás, afirmando que «la comunidad internacional tiene la responsabilidad de utilizar toda su influencia para evitar una mayor escalada y poner fin a esta crisis».
“La situación se está deteriorando rápidamente hasta convertirse en una catástrofe con implicaciones potencialmente irreversibles para los palestinos en su conjunto y para la paz y la seguridad en la región. Este resultado debe evitarse a toda costa», escribió el secretario.
El embajador de Israel ante la ONU, Gilad Erdan, apuntó a la invocación del Artículo 99, que está reservado para crisis que amenazan la paz y la seguridad internacionales, y lo denunció como «una nueva caída moral».
El Sr. Erdan señaló que el Artículo 99, invocado por primera vez desde que el secretario general de la ONU asumió el cargo en 2017, no se ha utilizado para otras crisis internacionales, incluido el conflicto entre Rusia y Ucrania, el despliegue de armas químicas por parte del presidente sirio Bashar Assad en Siria y la guerra civil en Yemen.
«El llamado del Secretario General a un alto el fuego es en realidad un llamado a mantener el reino de terror de Hamás en Gaza. En lugar de que el Secretario General señale explícitamente la responsabilidad de Hamas por la situación y pida a los líderes terroristas que se entreguen y regresen los rehenes, poniendo así fin a la guerra, el Secretario General decide seguir haciéndole el juego a Hamás», escribió el embajador en un posteo en X.
La presión sobre Israel está aumentando por sus operaciones militares en la Franja de Gaza, devastada por la guerra. El ministerio de Salud de Gaza, controlado por Hamás, ha informado de que más de 16,000 personas han muerto. Hamás no distingue entre combatientes terroristas y civiles.
Los funcionarios israelíes han prometido continuar sus operaciones hasta que Hamás sea eliminado.
Si bien Estados Unidos apoya el derecho de Israel a defenderse del terrorismo, la administración Biden también ha pedido al país que se esfuerce por proteger a los civiles en Gaza.
El jueves, el secretario de Estado, Antony Blinken, quien pidió la protección de los civiles en Gaza durante una reciente visita a Israel, dijo que parece haber una «brecha» entre sus comentarios «y los resultados reales que estamos viendo sobre el terreno».
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