La misma empresa que presuntamente llevó a cabo una controvertida investigación en un laboratorio de Wuhan (China) —la ciudad donde surgió el COVID-19 en 2019— ha recibido una nueva subvención para estudiar los virus de los murciélagos.
EcoHealth Alliance, que participó en la investigación de los coronavirus de los murciélagos en el Instituto de Virología de Wuhan, comenzó un estudio de varios años de «secuencias virales y aislamientos para su uso en el desarrollo de vacunas», según una subvención publicada en internet por el Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciosas (NIAID, por sus siglas en inglés), la agencia dirigida por el Dr. Anthony Fauci.
El estudio incluirá murciélagos y coronavirus y se prolongará hasta el 31 de agosto de 2027. Sin embargo, la investigación no tendrá lugar en China, sino que se centrará en Laos, Vietnam y Birmania (también conocida como Myanmar).
«Nuestro mapa de riesgo de puntos calientes sugiere que los países situados directamente al sur de China, en particular Myanmar, Laos y Vietnam, contienen regiones con interfaces entre el hombre y la vida silvestre, y que es probable que se produzca una propagación regular de los nuevos [coronavirus] a partir de los murciélagos y otros animales silvestres», se afirma.
La subvención fue concedida por los Institutos Nacionales de Salud (NIH, por sus siglas en inglés) el 21 de septiembre, y la financiación total del proyecto para el año 2022 es de 653,392 dólares.
EcoHealth añadió que sus «estudios de campo preliminares han identificado nuevos virus relacionados con zoonosis conocidas en murciélagos y otros animales silvestres de cada uno de estos países» con el objetivo general de «analizar los factores de riesgo conductuales y ambientales para la propagación de» nuevas variantes de coronavirus e identificar cualquier «evento de propagación de la vida silvestre a los humanos».
EcoHealth proporcionó unos 600,000 dólares en forma de sub-subvenciones de los NIH al laboratorio de virología de Wuhan entre 2014 y 2019 para la investigación de los coronavirus de los murciélagos. El año pasado, algunos miembros de la Comunidad de Inteligencia de Estados Unidos, compuesta por 17 agencias, dijeron que el virus podría haberse originado cerca del laboratorio de Wuhan, según un informe publicado en nombre del presidente Joe Biden.
El año pasado, Fauci insistió en que en el laboratorio de Wuhan no se estaba llevando a cabo ninguna investigación de ganancia de función con fondos de los contribuyentes. Pero un alto funcionario de los NIH dijo en una carta (pdf) el año pasado que EcoHealth admitió que la subvención a EcoHealth se utilizó para infectar ratones con coronavirus de murciélago modificados.
Crítica
«Cabe señalar que EcoHealth Alliance recibió una nueva subvención de los NIH hace diez días, proporcionando 3.3 millones de dólares adicionales a lo largo de cinco años para un proyecto que incluye la investigación de descubrimiento de virus de alto riesgo en murciélagos del sudeste asiático», escribió en Twitter el profesor de biología química de la Universidad de Rutgers Richard Ebright sobre la última subvención del NIAID el 30 de septiembre.
Días después de la entrega de la subvención, la senadora Joni Ernst (R-Iowa) presentó una ley que prohibiría la entrega de fondos federales a EcoHealth Alliance, específicamente por su investigación en el laboratorio de Wuhan.
«Dar dinero de los contribuyentes a EcoHealth para que estudie la prevención de pandemias es como pagar a un presunto pirómano para que realice inspecciones de seguridad contra incendios», dijo. «Los NIH acertaron cuando cancelaron la financiación de los experimentos que EcoHealth Alliance estaba llevando a cabo con el instituto estatal chino de Wuhan. Además de violar múltiples leyes federales, EcoHealth aún no ha entregado los documentos sobre estos peligrosos estudios que los NIH han solicitado en múltiples ocasiones y que podrían ofrecer pistas vitales sobre los orígenes de la pandemia de COVID-19».
En una entrevista concedida a Science.org el año pasado, el jefe de EcoHealth, Peter Daszak, afirmó que es víctima de un «ataque anticientífico» y aseguró que estuvo advirtiendo sobre una pandemia de coronavirus durante 15 años antes de que el COVID-19 se extendiera por todo el mundo.
«Si un pequeño grupo de científicos tenía toda la razón en sus predicciones, ¿por qué los ponemos ahora en la pira en medio del pueblo, bailando, y los quemamos vivos?», preguntó Daszak en la entrevista. «Eso es lo que realmente me revuelve el estómago».
El NIH y la Alianza Ecosaludable no respondieron antes de la publicación de este artículo a una solicitud de comentarios de The Epoch Times.
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