El ejército israelí afirmó haber eliminado a la mitad de los líderes militares de Hamás y haber matado o capturado a unos 14,000 terroristas.
En una declaración pública hecha el 16 de julio, las Fuerzas de Defensa de Israel (IDF) dijeron que habían eliminado a 6 comandantes de brigada de Hamás, más de 20 comandantes de batallón y aproximadamente 150 comandantes de compañía en los 263 días de operación en la Franja de Gaza.
Añadió que había atacado unos 37,000 objetivos desde el aire dentro de la Franja de Gaza y más de 25,000 infraestructuras y bases de lanzamiento terroristas.
Las FDI han aumentado la presión en toda la Franja en la última semana. En vista de que hay informes de que el número de víctimas civiles es mayor que el habitual y de que el gobierno israelí se encuentra bajo presión interna para llegar a un acuerdo y traer de regreso a casa a los rehenes tomados en el ataque de octubre del año pasado, el ejército está comunicando sus logros.
Hamás, por su parte, declaró el 14 de julio que seguían en marcha las negociaciones con mediadores qataríes y egipcios, y los medios de comunicación israelíes informaron el 16 de julio que era probable que una delegación israelí viajara esta semana a Qatar o Egipto para participar en las conversaciones.
La declaración de las IDF podría dar margen a Netanyahu para formalizar un acuerdo. Su estimación de bajas de Hamás, sin embargo, no llega a la mitad de los 30,000 efectivos estimados de Hamás, y Hamás ha prometido repetir ataques como el del 7 de octubre.
Las FDI defendieron sus ataques. En uno de estos ataques recientes intentaron acabar con el escurridizo comandante militar de Hamás Mohammed Deif, dejando un saldo de 90 palestinos muertos, según las autoridades sanitarias de Gaza, y ocasionando heridas a más de 300 personas.
Los gazatíes dijeron que el ataque alcanzó una zona humanitaria destinada a albergar a civiles gazatíes, que han tenido que huir en repetidas ocasiones desde que comenzó la guerra en octubre.
Sin embargo, las FDI utilizaron fotos aéreas del antes y el después para mostrar que el objetivo estaba rodeado principalmente de árboles y que la zona dañada solo incluía un par de edificios pequeños.
Israel no ha confirmado que haya eliminado al Sr. Deif, que lleva años escondido. Sí ha confirmado que mató a uno de sus principales ayudantes, Rafa’a Salameh, comandante de la brigada de Jan Yunis. Hamás dijo que el Sr. Deif estaba vivo y bien, pero no ofreció ninguna prueba.
Uno de los gráficos que acompañaban a la declaración pública sugería que Deif seguía en libertad. Un organigrama de los dirigentes de Hamás etiqueta a algunos de sus integrantes, incluido Salameh, como “eliminados”, pero no a Deif.
Las Fuerzas de Defensa de Israel afirmaron que efectuaron ese ataque porque Hamás utiliza habitualmente escudos humanos para sus combatientes, dirigentes, armas y cuarteles generales.
“Las FDI centran sus esfuerzos en localizar a los terroristas que se incrustan y establecen bases en sitios sensibles en toda la Franja de Gaza, incluidos hospitales, escuelas y refugios humanitarios”, dijeron las FDI en Telegram. “Estas áreas son cínicamente explotadas por terroristas que intentan utilizarlas como escondites y bases para el terrorismo. Los ataques contra estas infraestructuras se llevan a cabo de acuerdo con el derecho internacional”.
El ataque sorpresa de Hamás el 7 de octubre acabó con la vida de 1200 personas, en su mayoría civiles, y los militantes tomaron como rehenes a unas 250 personas. Unas 120 siguen en cautiverio y se cree que al menos un tercio de ellas están muertas, según las autoridades israelíes.
La violencia también aumentó en Cisjordania durante la guerra. El martes, un palestino apuñaló a un policía israelí, hiriéndole levemente, antes de que otro agente abriera fuego, matando al agresor, identificado como un joven de 19 años de Gaza.
Con información de Associated Press y Reuters
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