El Consejo Municipal de Odessa (Texas) votó el 12 de septiembre a favor de prohibir la aplicación de cualquier mandato COVID-19 del gobierno estatal o federal, en un esfuerzo por evitar lo que, según los funcionarios, constituye una violación de las libertades de los ciudadanos.
Un total de seis concejales votaron a favor de la resolución -presentada por el concejal Chris Hanie-, mientras que uno se abstuvo.
«Les pido que … echen un vistazo a lo que estaba pasando antes de todo esto la última vez que cerraron todo», dijo Hanie durante la votación del martes.
El concejal continuó señalando cómo los mandatos aplicados anteriormente durante la pandemia habían impedido trabajar a los ciudadanos, señalando específicamente a los trabajadores del petróleo que no pudieron ganarse la vida en medio de los cierres.
«No queremos que esto se repita», afirmó. «Nos ganamos la vida aquí en el campo petrolífero».
El representante estatal republicano Brian Harrison, quien anteriormente se desempeñó como jefe de personal del Departamento de Salud y Servicios Humanos (HHS) bajo la administración Trump, también expresó su apoyo a la prohibición durante la reunión del martes.
«Los mandatos de la vacuna COVID destruyen la libertad médica, no están justificados por razones de salud pública, son incompatibles con el consentimiento informado, han destruido carreras y no tienen cabida en el gran y amante de la libertad estado de Texas», dijo el Sr. Harrison.
La ciudad toma «medidas históricas»
El republicano continuó declarando que él y otros funcionarios, durante su tiempo en el HHS, habían hecho un punto de no hacer obligatorias las vacunas COVID-19, señalando que él cree que las vacunas siempre deben seguir siendo voluntarias.
«Sin embargo, desde entonces, ustedes han sido testigos y yo he sido testigo de algo desgarrador y exasperante, que es que un programa que diseñamos para salvar vidas se convierta en un programa que destruye la libertad y destruye la libertad médica», dijo.
Harrison está trabajando actualmente para conseguir que se apruebe su «Ley de Libertad de la Vacuna COVID de Texas» (pdf) durante las sesiones especiales en Texas. Ese proyecto de ley prohibiría los mandatos COVID-19 para entidades estatales y privadas.
«Espero que cada ciudad y condado, no solo en Texas, sino en todas partes, cada estado que aún no ha protegido la libertad médica de sus ciudadanos, que sus ojos se vuelvan hacia Odessa, Texas, esta noche y vean la acción valiente, audaz, valiente y yo diría histórica que están tomando aquí esta noche, así que no podría estar más orgulloso de estar aquí», dijo Harrison.
La resolución del martes (pdf), aprobada por los concejales de la ciudad, afirma que los ciudadanos de Odessa, así como el estado de Texas en su conjunto, fueron «objeto de injusticias en forma de extralimitaciones impuestas por el gobierno durante la pandemia».
«Daño incuantificable» a los ciudadanos
«Se ha causado un daño incuantificable a los ciudadanos de la ciudad de Odessa, mental, emocional y financieramente, por la imposición de tales mandatos gubernamentales extralimitados», continúa la resolución. «Los mandatos, como los mandatos de la mascarilla, violan la libre conducta de la que un ciudadano debe esperar disfrutar. Los mandatos de vacunación obligatoria, impuestos por el gobierno o las empresas, violan el derecho de un ciudadano a controlar su propio cuerpo.»
«Los mandatos, como los de cierre obligatorio, impuestos por un gobierno que se extralimita, violan el derecho de un ciudadano a la libertad garantizada por las Constituciones de Estados Unidos y del Estado de Texas», añade la resolución.
Según la propuesta, la ciudad no aplicará ningún mandato relacionado con la COVID-19 que obligue a los ciudadanos a llevar mascarillas, aislarse en casa o a los comercios a modificar o cesar sus actividades.
También prohíbe que se obligue a las personas a vacunarse para conservar su trabajo o «disfrutar de las comodidades de la ciudad» si no desean vacunarse.
Los particulares tampoco podrán «tomar medidas adversas ni imponer sanciones de ningún tipo» a los residentes que se nieguen a vacunarse, según la propuesta.
La votación sobre la prohibición del mandato de COVID-19 en Odessa se produce en un momento en que los casos de COVID-19 están aumentando en Texas, con los datos más recientes del Departamento de Servicios de Salud del Estado de Texas que muestran más de 30.100 nuevos casos notificados entre el 27 de agosto y el 2 de septiembre.
Sin embargo, el Sr. Haines señaló el martes que los casos no están aumentando en Odessa.
El gobernador de Texas, Greg Abbott, ya ha promulgado varias leyes destinadas a prohibir diversos mandatos relacionados con el COVID-19.
En junio, el gobernador firmó el proyecto de ley 29 del Senado, que prohíbe a los gobiernos locales exigir mascarillas y vacunas relacionadas con el COVID o cerrar negocios privados y escuelas para evitar la propagación del virus.
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