El director ejecutivo de Anheuser-Busch emitió el viernes una declaración en medio de la polémica suscitada por el acuerdo de patrocinio de Bud Light con la activista transexual Dylan Mulvaney.
Se trata de la primera declaración pública emitida por el máximo ejecutivo desde que comenzó a gestarse la polémica en torno a la campaña, anunciada por Mulvaney a principios de este mes. La imagen de Mulvaney se colocó en latas de Bud Light como parte del acuerdo de patrocinio, lo que llevó a los analistas del sector a lanzar advertencias.
«Nunca hemos pretendido formar parte de un debate que divide a la gente. «Estamos en el negocio de unir a la gente con una cerveza, dijo Brendan Whitworth, director ejecutivo de Anheuser-Busch InBev, en un comunicado.
Whitworth no mencionó específicamente a Mulvaney, Bud Light o cuestiones transgénero. Tampoco se refirió a los reportes , citando fuentes anónimas, que afirmaban que los ejecutivos de la empresa no habían sido informados sobre el acuerdo de patrocinio de Mulvaney. Tampoco se refirió a los reportes sobre boicots o a la preocupación de los distribuidores por las bajas ventas.
«Me preocupo profundamente por este país, esta empresa, nuestras marcas y nuestros socios. Paso gran parte de mi tiempo viajando por América, escuchando y aprendiendo de nuestros clientes, distribuidores y otros», decía su comunicado. «De cara al futuro, seguiré trabajando incansablemente para llevar excelentes cervezas a los consumidores de toda nuestra nación».
Algunos distribuidores de Bud Light y Anheuser-Busch de todo el país han expresado su preocupación por el acuerdo, y un informe afirma que varios bares se han negado a servir Bud Light. Por su parte, el cantante de country y propietario de un bar en Nashville, John Rich, declaró a Fox News a principios de esta semana que su bar no venderá la cerveza.
Anteriormente, Anheuser-Busch emitió un comunicado a los medios de comunicación y defendió su decisión de contratar a Mulvaney, quien también ha informado de acuerdos con Nike y otras marcas.
«Anheuser-Busch trabaja con cientos de influencers en todas nuestras marcas como una de las muchas maneras de conectar auténticamente con el público en diversos grupos demográficos», dijo un portavoz a principios de este mes en respuesta a la reacción.
Los analistas del sector del Beer Business Daily escribieron que «la intensa oposición a que Mulvaney promocione la cerveza ha sido alarmante para los distribuidores de Anheuser-Busch, que hicieron menos pedidos después de que la asociación desatara la indignación de los conservadores que argumentaban que la empresa está impulsando la ‘propaganda de género'».
«Nos pusimos en contacto con un puñado de distribuidores de A-B [Anheuser-Busch] que estaban asustados, sobre todo en el Heartland y el Sur, e incluso entonces en sus zonas más rurales», dijo la publicación.
Daños a la marca
Algunos analistas e inversores afirman que es probable que los daños no hundan a Anheuser-Busch, pero sí a la marca Bud Light.
«Simplemente no entiendo por qué contrataron a la persona que estaba haciendo el marketing», dijo el CEO de Oxygen Financial, Ted Jenkin, a Fox News el jueves. «Quiero decir, si tu cliente objetivo es Kid Rock, y de repente decides ir a RuPaul, eso simplemente no tiene ningún sentido».
Dado que Bud Light se dirige generalmente a «obreros y adultos jóvenes de entre 25 y 29 años», la campaña debería ser problemática para la firma. «No creo que esta campaña vaya a destruir la marca de forma colosal.
«Pero sin duda, a corto plazo, pone en duda a sus fieles bebedores de Bud Light para que digan: ‘¿Quiero seguir bebiendo Bud Light basándome en quién están mostrando representando a Bud Light?'», se preguntó. «Cada vez que una empresa pone a un portavoz nacional que tiene reacciones negativas, sin duda puede afectar a su negocio».
Un investigador del National Center for Public Policy Research escribió esta semana que Anheuser-Busch es propiedad de InBev, un conglomerado multinacional valorado en decenas de miles de millones de dólares. Un producto, escribió, no causará un gran daño a la marca o a su valor.
«Pero parece un resultado plausible. El diagrama de Venn de la gente interesada en beber Bud Light y los deseosos de apoyar el tema en el filo de la guerra cultural woke es más o menos sólo dos círculos vagamente cerca uno del otro», escribió Shepard. «Aunque los inversores de InBev no sufrirán demasiado, los distribuidores de productos AB y otros que hacen negocios con la empresa seguramente sí».
Shepard afirmaba además en el artículo que «los efectos finales de lo woke son más claros en otras empresas estadounidenses que han abandonado el deber fiduciario por la política», refiriéndose a que las grandes corporaciones han adoptado temas de conversación y narrativas de izquierdas en torno a la raza y el sexo.
Únase a nuestro canal de Telegram para recibir las últimas noticias al instante haciendo click aquí
Cómo puede usted ayudarnos a seguir informando
¿Por qué necesitamos su ayuda para financiar nuestra cobertura informativa en Estados Unidos y en todo el mundo? Porque somos una organización de noticias independiente, libre de la influencia de cualquier gobierno, corporación o partido político. Desde el día que empezamos, hemos enfrentado presiones para silenciarnos, sobre todo del Partido Comunista Chino. Pero no nos doblegaremos. Dependemos de su generosa contribución para seguir ejerciendo un periodismo tradicional. Juntos, podemos seguir difundiendo la verdad.
