El Comité Nacional Demócrata (DNC) está poniendo fin a su larga colaboración con el abogado y estratega electoral Marc Elias, quien pagó por el sonado expediente que acusaba falsamente a la campaña presidencial de Donald Trump de coludirse con Rusia.
El divorcio entre la organización nacional de los demócratas y su principal abogado por «una serie de desacuerdos estratégicos» fue informado por primera vez por Punchbowl News, citando fuentes anónimas familiarizadas con el asunto. Esto parece afectar únicamente al DNC, teniendo en cuenta que Elias sigue representando a una serie de ramas de campaña demócratas a nivel federal y estatal, como el DSCC, el DAGA y el DLCC.
«El DNC trabaja con una serie de bufetes de abogados en litigios sobre el derecho al voto, el acatamiento de las normas, la contratación y otros asuntos. El DNC agradece los años de trabajo de Elias Law Group al servicio de los valores que compartimos», dijo un portavoz del DNC en un comunicado.
Un portavoz del bufete de Elias, Elias Law Group, también elogió el trabajo previo del abogado neoyorquino para el DNC, señalando que seguirá prestando servicios a los clientes demócratas.
«Elias Law Group está orgulloso del trabajo que ha realizado para el DNC. Esperamos seguir representando al Partido Demócrata, así como ayudando a los ciudadanos a votar y a los progresistas a lograr cambios», afirmaba el comunicado.
Elias es más conocido como el hombre que está detrás del expediente Steele. En su calidad de asesor general tanto del DNC como de la campaña de Hilary Clinton durante las elecciones presidenciales de 2016, Elias contrató a la empresa de investigación de la oposición Fusion GPS para encargar un expediente sobre la supuesta connivencia del candidato republicano Donald Trump con agentes del gobierno ruso. Fusion GPS encomendó la tarea al espía británico retirado Christopher Steele, quien finalmente entregó el expediente al FBI en 2017.
El expediente y sus principales acusaciones ya fueron desacreditados o considerados no verificables, pero fueron la base de la investigación del FBI sobre Trump, así como la narrativa de los principales medios de comunicación sobre la intromisión de Moscú en las elecciones de 2016. El papel que desempeñaron los demócratas en el expediente no salió a la luz hasta mucho más tarde en 2017, a raíz de una investigación dirigida por los republicanos de la Cámara sobre el origen del documento.
En las últimas repercusiones del escándalo, la Comisión Federal de Elecciones ordenó en marzo de 2022 al DNC y a la campaña de Clinton que pagaran una multa de USD 113,000 por declaración financiera indebida. Según la agencia federal, el DNC y la campaña de Clinton pagaron juntos a Fusion GPS más de USD 1 millón para financiar el proyecto del expediente, pero etiquetaron los pagos como «gastos legales» en lugar de investigación de la oposición.
El DNC y la campaña de Clinton acordaron pagar USD 105,000 y USD 8,000 en multas, respectivamente, pero no admitieron haber actuado mal. No se emitió ninguna multa contra Marc Elias, Fusion GPS o Christopher Steele.
Elias también estuvo involucrado en algunas polémicas en ciclos electorales más recientes. En la jornada electoral del año pasado, se unió a la demanda de la campaña de John Fetterman en un intento de última hora de anular una ley electoral de Pensilvania que rechaza los votos por correo sin fecha o con fecha incorrecta.
En 2021, él trató de convencer a las mayorías demócratas en el Congreso de invalidar la victoria de la representante republicana Mariannette Miller-Meeks en Iowa, alegando haber encontrado boletas adicionales para su cliente, la demócrata Rita Hart. El Congreso finalmente certificó los resultados de las elecciones a favor de Miller-Meeks.
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