La administración Trump en 2020 proporcionó protección del Servicio Secreto a Joe Biden durante su carrera a la presidencia, pero el presidente Biden aún no ha autorizado la misma seguridad para Robert F. Kennedy Jr, señaló Gavin de Becker en un vídeo que publicó en X el 21 de septiembre.
La empresa de Becker, Gavin de Becker y Asociados, está proporcionando servicios de seguridad privada a Kennedy mientras el candidato desafía al presidente Biden por la nominación presidencial demócrata de 2024.
De Becker ha sido nombrado tres veces por el presidente, ha formado parte durante dos mandatos de la Junta Asesora del Presidente en el Departamento de Justicia y se le considera un experto en seguridad para cargos electos y personalidades públicas.
Desde 1968, los candidatos a la presidencia de EE.UU. han recibido protección del Servicio Secreto después de que el senador Robert F. Kennedy, padre de Kennedy, fuera asesinado en un acto de campaña en California, explicó de Becker.
Kennedy dijo que, en julio, el Departamento de Seguridad Nacional denegó su solicitud de protección del Servicio Secreto como candidato presidencial.
«Es la primera vez que un presidente en ejercicio rechaza una solicitud formal de protección de un candidato rival», dijo de Becker.
El Servicio Secreto de EE.UU. tiene la misión de proporcionar protección a «los principales candidatos presidenciales y vicepresidenciales y, en los 120 días siguientes a las elecciones presidenciales generales, a los cónyuges de dichos candidatos», según la ley estadounidense «18 USC 3056A».
El secretario del DHS, actualmente Alejandro Mayorkas, tiene la tarea de identificar a los candidatos «importantes» en una carrera presidencial consultando con el presidente de la Cámara, el líder de la minoría de la Cámara, los líderes de la mayoría y la minoría del Senado, y un miembro adicional seleccionado por los otros miembros del comité.
Kennedy dijo que Mayorkas le envió un mensaje en julio que decía: «He determinado que la protección del Servicio Secreto para Robert F. Kennedy Jr. no está justificada en este momento».
El DHS no ha comentado su decisión.
A principios de agosto, Kennedy volvió a pedir a la administración Biden que le proporcionara protección tras el asesinato de uno de los candidatos a la presidencia de Ecuador, Fernando Villavicencio.
«Kennedy ha cumplido todos los criterios para recibir protección. La única razón concebible por la que se le está denegando es por una decisión consciente de la Casa Blanca de denegarle la seguridad y atenerse a las consecuencias», dijo tras el asesinato de Villavicencio Dennis Kucinich, ex congresista por Ohio y director de la campaña de Kennedy.
Kennedy dijo que su petición de julio «incluía un informe de 67 páginas en el que se detallaban riesgos de seguridad y protección únicos y bien establecidos, aparte de las habituales amenazas de muerte.»
De Becker señaló que «todas las administraciones, desde hace 55 años, han aprobado la protección anticipada del Servicio Secreto para los candidatos mucho antes de los 120 días previos a las elecciones».
«La administración Carter, como ejemplo, proporcionó protección anticipada a cinco candidatos rivales y eso fue más de 600 días antes de las elecciones. De hecho, tres administraciones diferentes proporcionaron protección temprana del Servicio Secreto al tío de Bobby, el senador Ted Kennedy. Una vez fue 440 días antes de las elecciones, y dos veces, cuando ni siquiera había confirmado que se presentaba, la administración Nixon proporcionó protección temprana a sus oponentes, al igual que Clinton y la administración Bush y la administración Obama», continuó De Becker.
La administración Trump aprobó la protección del Servicio Secreto 221 días antes en 2020 para el Sr. Biden.
A algunos candidatos presidenciales se les da protección al principio del proceso de primarias, especialmente si reciben un volumen de amenazas.
A Barack Obama se le aprobó la protección en mayo de 2007. Fue la primera vez en la historia que un candidato presidencial recibía protección del Servicio Secreto casi dos años antes de las elecciones presidenciales.
Hillary Clinton, oponente de Obama en las primarias demócratas, recibió protección del Servicio Secreto desde que era primera dama.
«El propio Servicio Secreto ha sido servicial y profesional y no tengo ninguna queja con ellos. Están dispuestos a proporcionar la protección, pero la administración Biden dice que no», añadió De Becker.
La semana pasada, un hombre armado que llevaba una pistola cargada se hizo pasar por agente de la ley federal en el teatro Wilshire Ebell de Los Ángeles antes de que Kennedy pronunciara un discurso sobre el Mes de la Herencia Hispana.
Adrian Paul Aispuro, de 44 años, fue detenido por el Departamento de Policía de Los Ángeles (LAPD) y fichado inicialmente por un delito grave de posesión de armas el 15 de septiembre, según el Centro de Información de Reclusos del Departamento del Sheriff del Condado de Los Ángeles.
La oficina del fiscal de la ciudad dijo que Aispuro fue acusado de llevar un arma de fuego cargada, llevar un arma de fuego oculta y hacerse pasar por un agente, todos ellos delitos menores.
Aispuro afirmó formar parte del equipo de seguridad de Kennedy e imploró a los miembros de la empresa de seguridad de De Becker que le llevaran inmediatamente ante el candidato.
Los agentes de seguridad observaron que Aispuro llevaba una pistola, le sacaron de la zona y le rodearon.
«Se llamó a la policía de Los Ángeles y le entregamos la custodia cuando llegó la policía, y el hombre fue detenido. En su mochila, que revisamos en busca de explosivos, había más pistolas, cuchillos y munición extra», explicó De Becker.
En un post en X, Kennedy agradeció a la policía y a su equipo de seguridad su rápida respuesta para manejar la situación y garantizar su seguridad.
«Aún albergo la esperanza de que el presidente Biden me permita la protección del Servicio Secreto. Soy el primer candidato presidencial de la historia al que la Casa Blanca ha denegado una solicitud de protección», añadió.
El padre de Kennedy, Robert F. Kennedy, fue tiroteado en el Hotel Ambassador de Los Ángeles tras un discurso de campaña el 5 de junio de 1968, y declarado muerto al día siguiente.
El incidente del 15 de septiembre en el teatro Wilshire Ebell se produjo a menos de tres kilómetros de donde tuvo lugar el asesinato.
En total, Kennedy ha presentado dos solicitudes de protección del Servicio Secreto, y ambas han sido rechazadas. La campaña planea solicitar una tercera vez este mes.
El 18 de septiembre, Kucinich envió una carta al presidente Biden instándole a autorizar la protección del Servicio Secreto para el candidato.
«El nivel de amenaza para nuestro candidato, Robert F. Kennedy, Jr. aumenta cada día. Él no es el único en peligro – cada persona que asiste a un acto de campaña está en riesgo», escribió Kucinich.
«El espectro de la violencia acecha nuestro proceso político. De hecho, los asesinatos políticos suponen una grave amenaza para la democracia. No es difícil imaginar el caos civil y la desintegración política que podrían sobrevenir con la vuelta del tipo de asesinatos de cargos públicos y candidatos presidenciales que empañaron la década de 1960», añadió.
Kucinich señaló: «Es asombroso que, en tales circunstancias, usted niegue la cobertura del Servicio Secreto a Robert F. Kennedy Jr., que ha obtenido más del 20 por ciento en las encuestas de los cinco primeros estados de las primarias, y cuyo índice neto de favorabilidad supera tanto el suyo como el de Donald Trump».
También recordó al presidente Biden los asesinatos de John F. Kennedy y Robert F. Kennedy.
Casi al final de la carta, Kucinich comentó que el presidente Biden se unió a él en la campaña electoral «en uno de los dos esfuerzos que hice para ganar la nominación demócrata» y que ambos se conocen desde hace 50 años.
«Sé que no quiere ver a Estados Unidos tambaleándose de nuevo por las consecuencias de otro asesinato político. Por lo tanto, le pido en el espíritu de patriotismo, de justicia y de buena conciencia que conceda a Robert F. Kennedy, Jr. la protección del Servicio Secreto que sus circunstancias tan obviamente justifican», escribió Kucinich.
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