El exdirector de campaña del presidente Donald Trump, Brad Parscale, fue hospitalizado el domingo después de que supuestamente amenazara con hacerse daño en su casa de Fort Lauderdale, Florida, según informaron varios medios.
El domingo por la tarde la policía respondió a una llamada al 911 de la esposa de Parscale, quien dijo que su marido estaba atrincherado en su casa, donde tenía acceso a múltiples armas de fuego y amenazaba con quitarse la vida, según informó Local 10.
El Departamento de Policía de Fort Lauderdale emitió un comunicado el domingo confirmando que un hombre identificado como Parscale fue detenido después de recibir información facilitada por su esposa.
«Cuando los policías llegaron a la escena, se pusieron en contacto con la denunciante (esposa del sujeto armado), que informó que su esposo estaba armado, que tenía acceso a múltiples armas de fuego dentro de la residencia y que amenazaba con hacerse daño», dijo la policía de Fort Lauderdale en un comunicado.
«Los agentes se pusieron en contacto con el hombre, desarrollaron una relación y negociaron de forma segura para que saliera del hogar», dijo el departamento en un comunicado, sin identificar directamente a Parscale como el antiguo director de la campaña de Trump. Sin embargo, una escritura de propiedad especifica que la copropietaria de la casa de Fort Lauderdale se llama Candice Parscale, el mismo nombre que tiene la esposa del hombre de 44 años.
Los vecinos también le dijeron a Local 10 que la propiedad pertenecía a la pareja.
La policía dijo que fue llevado al Centro Médico de Salud Broward donde fue puesto bajo la Ley Baker de Florida, que otorga a la policía la autoridad de detener a un individuo que represente una amenaza potencial para sí mismo o para otros durante 72 horas para una evaluación psiquiátrica.
En julio, solo cuatro meses antes de las elecciones presidenciales, Trump reemplazó a Parscale como director de campaña, y nombró a Bill Stepien como nuevo director. Parscale permaneció como asesor principal en la campaña. Fue criticado después de un mitin en junio en Tulsa, Oklahoma, que atrajo a menos personas de las esperadas.
No está claro si hubo disparos el domingo, pero la policía determinó que no había nadie más en la casa en ese momento.
The Epoch Times ha contactado con el Departamento de Policía de Fort Lauderdale para una solicitud de comentarios.
«Brad Parscale es un miembro de nuestra familia y todos le queremos», dijo el portavoz de la campaña de Trump, Tim Murtaugh, en un comunicado, sin confirmar el incidente, añadiendo que culpa a «los repugnantes ataques personales de los demócratas y de los RINO descontentos» que «han ido demasiado lejos».
«Deberían estar avergonzados por lo que le han hecho a este hombre y a su familia», dijo.
Con información de Reuters.
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