El gobernador de Nueva York, el demócrata Andrew Cuomo, anunció el martes que dimitirá dentro de 14 días tras las acusaciones de acoso sexual que se detallaron en un informe de la fiscal general del estado la semana pasada.
La dimisión de Cuomo se produjo mientras la Asamblea de Nueva York iniciaba el lunes las deliberaciones sobre una investigación de impeachment de su conducta y mientras altos cargos demócratas, incluido el presidente Joe Biden, le pedían que dimitiera.
«La mejor manera en que puedo ayudar ahora es hacerme a un lado, y dejo que el gobierno vuelva a ser gobierno», dijo Cuomo en un discurso televisado.
Pero Cuomo dijo que no mostró intencionadamente una falta de respeto hacia ninguna empleada o mujer, y afirmó que las acusaciones contra él tenían «motivaciones políticas». Un juicio político, sin embargo, sumiría a Nueva York en un estado de confusión durante meses, dijo el gobernador de tres mandatos, y explicó que por eso renuncia.
La vicegobernadora Kathy Hochul, demócrata de 62 años y exmiembro del Congreso, se convertirá en la 57ª gobernadora del estado y en la primera mujer en dirigir el estado de Nueva York.
«Es una cuestión de vida o muerte. El funcionamiento del gobierno y el derroche de energía en distracciones es lo último que debe ser el gobierno», comentó también Cuomo. «No puedo ser la causa. La dureza de Nueva York significa amar a Nueva York. Y yo amo a Nueva York y los amo a ustedes. Todo lo que he hecho ha sido motivado por ese amor y nunca querría ser inútil de ninguna manera».
Y dirigiéndose a sus tres hijas, Cuomo les dijo: «Quiero que sepan, desde el fondo de mi corazón, que nunca he faltado al respeto a una mujer ni trataría intencionadamente a ninguna mujer de forma diferente a como me gustaría que las trataran a ustedes, y esa es la pura verdad de Dios».
La noticia se produjo una semana después de que la fiscal general de Nueva York, Letitia James, también demócrata, escribiera en un extenso informe que el mandatario incurrió en acoso sexual y que su cámara manejó mal las denuncias en su contra. No acusó al gobernador de ningún delito, aunque varias comisarías y fiscales han anunciado que están investigando.
«Específicamente, descubrimos que el gobernador acosó sexualmente a varias empleadas actuales y anteriores del Estado de Nueva York, entre otras cosas, realizando tocamientos no deseados y no consensuados, así como haciendo numerosas declaraciones ofensivas de carácter sugestivo y sexual que crearon un ambiente de trabajo hostil para las mujeres», decía su informe, añadiendo que en la oficina de Cuomo reinaba «el miedo y la intimidación».
La oficina de James recibió críticas por la forma en que manejó el caso, e incluso algunos republicanos dijeron que no emitió denuncias penales contra el gobernador.
«Letitia James dejó caer la pelota al no hacer remisiones penales inmediatas cuando su investigación describía numerosos actos criminales contra las mujeres», dijo el candidato a fiscal general de Nueva York, el republicano Michael Henry, en un comunicado.
A Cuomo, por otro lado, también se le acusa de haber manejado mal la respuesta del estado a la pandemia de la COVID-19, concretamente por haber ocultado miles de muertes entre los pacientes de las residencias de ancianos.
Esto contrasta fuertemente con la forma en que fue elogiado durante las primeras etapas de la pandemia en 2020, ya que algunos expertos elogiaron sus conferencias de prensa diarias como una contrapartida a las actualizaciones diarias de la pandemia del expresidente Donald Trump. Las conferencias de prensa de Cuomo le valieron un premio Emmy internacional, y llegó a escribir un libro sobre el liderazgo durante la crisis.
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