El Departamento de Seguridad Nacional (DHS, por sus siglas en inglés) presuntamente está utilizando un programa antiterrorista para apuntar a conservadores, cristianos y republicanos. Este programa fue detallado en un reciente informe de una organización sin ánimo de lucro.
Mediante solicitudes FOIA, el Media Research Center (MRC) pudo obtener en exclusiva documentos que demostraban que los fondos federales asignados al programa del DHS para prevenir la violencia y el terrorismo se utilizaban para apuntar a los conservadores, declaró Dan Schneider, vicepresidente del MRC.
El MRC es una organización sin ánimo de lucro cuya misión es documentar y contrarrestar las falsedades y la censura de los medios de comunicación.
El Programa de Subvenciones para la Prevención de la Violencia y el Terrorismo Dirigidos a Objetivos proporciona financiación a gobiernos estatales, locales, tribales y territoriales, organizaciones sin ánimo de lucro e instituciones de enseñanza superior para prevenir la violencia y el terrorismo dirigidos a objetivos concretos, según el DHS.
Se supone que el programa concede subvenciones para contrarrestar la violencia selectiva, como la violencia de las grandes pandillas y el terrorismo, dijo Schneider al programa «Crossroads» de EpochTV.
Sin embargo, la solicitud de subvención es extremadamente vaga, dijo Schneider. Por ejemplo, los proyectos que solicitan financiación en el marco del programa suelen centrarse en la «alfabetización mediática», añadió.
Por ejemplo, la Universidad del Sur de Illinois en Edwardsville recibió una subvención en 2022 para financiar el desarrollo de «la alfabetización mediática y las habilidades de pensamiento crítico online entre los estudiantes universitarios locales para que estén mejor equipados para combatir un volumen cada vez mayor de contenido extremista en el espacio online/digital», declaró un sitio web del DHS.
La descripción del proyecto incluye también sesiones de formación para organizaciones comunitarias locales, según el sitio web.
La Universidad de Rhode Island utilizaría la subvención del DHS recibida en 2022 para contrarrestar la desinformación, las teorías conspirativas, la propaganda y el extremismo doméstico en las comunidades locales, según el DHS.
Las solicitudes son muy difusas, por lo que es muy difícil averiguar cómo las evalúa el DHS en lo que se refiere a información, información errónea y desinformación, dijo Schneider. Por ello, su organización se puso en contacto con los beneficiarios para averiguar «qué hacen realmente los beneficiarios».
El Media Research Center obtuvo documentos relacionados con la participación en el programa de seis o siete de unos 80 beneficiarios, dijo Schneider. «Las acciones hablan más que las palabras… [e]stos documentos son estremecedores».
Lo que el DHS fundó a través de su programa de prevención de la violencia y el terrorismo fue «formación sobre cómo crear cuentas ficticias en las redes sociales, [cómo] crear falsas luchas internas entre conservadores y perturbar el trabajo de estas organizaciones conservadoras, no sólo conservadoras, sino cristianas y confesionales», dijo Schneider.
Proyecto de formación
En 2022, el programa del DHS concedió 43 subvenciones, por un total de 20 millones de dólares, a «gobiernos estatales, locales, tribales y territoriales, organizaciones sin ánimo de lucro e instituciones de enseñanza superior», según un comunicado del DHS.
Se supone que los fondos se utilizarán «para ayudar a prevenir incidentes de extremismo violento doméstico, así como para reforzar los esfuerzos para contrarrestar la radicalización online y la movilización hacia la violencia», y el DHS proporciona asistencia técnica, financiera y educativa a sus beneficiarios, según el comunicado.
El informe del MRC analizaba el proyecto PREVENTS-OH financiado dentro del programa del DHS, llevado a cabo por la Universidad de Dayton, una universidad católica privada de Ohio.
La Universidad recibió una subvención de 350 millones de dólares en septiembre de 2022 para poner en marcha un proyecto de formación y creación de redes centrado también en la «alfabetización mediática», según el sitio web del DHS.
El objetivo del proyecto PREVENTS-OH, financiado por el DHS, es «desarrollar una red de organizaciones regionales para ayudar a prevenir el extremismo violento doméstico en el suroeste de Ohio y más allá», según una declaración de la Universidad.
La universidad prometió aprovechar la experiencia de su profesorado «que investiga el extremismo y la radicalización» en la ejecución del proyecto, según el comunicado.
Investigación sobre el extremismo
En diciembre de 2021, la Universidad de Dayton organizó una conferencia sobre Práctica Social de los Derechos Humanos, en la que se celebró una mesa redonda sobre «Extremismo, retórica y precariedad democrática». Uno de los participantes, Michael Loadenthal, investigador postdoctoral de la Universidad de Cincinnati, presentó en su conferencia un gráfico que, según él, describe la «extrema derecha moderna» y el extremismo en Estados Unidos.
El gráfico equipara a los principales grupos conservadores con los neonazis militantes. Entre los grupos conservadores que aparecen en el gráfico están la Fundación Heritage, Fox News, la Asociación Nacional del Rifle, Breitbart News, la Universidad Prager, Turning Point USA, la Red de Radiodifusión Cristiana, la Fundación de la Unión Conservadora Estadounidense, el Comité Nacional Republicano, el movimiento MAGA y el movimiento propolicía Blue Lives Matter.
Entre los ponentes de la mesa redonda estaba el agente del DHS Joseph «J.R.» Masztalics –coordinador regional de un centro creado en mayo de 2021 para «combatir el extremismo violento doméstico»– que compareció a título oficial en el acto.
Este gráfico figuraba entre los anexos incluidos en la solicitud de subvención original presentada por la Universidad de Dayton al DHS para conseguir con éxito la financiación del programa, según el informe del MRC.
Loadenthal también participó en el «Taller sobre Nacionalismo Blanco» de la misma conferencia. En su presentación explicó cómo crear cuentas ficticias en plataformas de redes sociales como Telegram, Gab y Rumble para desestabilizar movimientos políticos.
«Queremos que estos grupos estén desarticulados, que sean menos eficaces… Me gustaría que tuvieran menos capacidad de movilización», dijo Loadenthal, que en el taller se describió a sí mismo como miembro de Antifa.
Un método eficaz para desestabilizar a los grupos de derechas es «fabricar muchas luchas internas», dijo Loadenthal.
También dijo a los asistentes que podían presionar a servicios financieros en línea como GoFundMe, Patreon, PayPal, Venmo, comercios online y otros proveedores de servicios online para que expulsaran a personas de sus redes.
Loadenthal aconsejó recopilar información e inteligencia sobre cuentas de redes sociales de grupos o activistas de derechas, a los que también llamó «fascistas», para poder «utilizarla con el propósito estratégico de bloquear en plataformas». Bloquear en plataformas significa «negar a la gente fascista de extrema derecha cualquier tipo de acceso a la esfera pública, negarles la capacidad de hablar», explicó Loadenthal, con el objetivo «de cerrar sus sitios web, clausurar sus reuniones, impedirles físicamente reunirse en público».
«Muchas de las cosas que hacemos son ilegales», admitió Loadenthal. «Muchas de ellas implican infringir la ley», añadió.
Cómo evolucionó el programa antiterrorista
Un programa de subvenciones para «prevenir el extremismo violento en Estados Unidos» fue propuesto por primera vez por el expresidente Barack Obama en 2011, después de que «Al Qaeda y sus afiliados» intentaran «reclutar» y «radicalizar» a estadounidenses, según un anuncio de la Casa Blanca.
El programa proporcionaba subvenciones financiadas por los contribuyentes a grupos locales, como departamentos de policía, universidades, organizaciones sin ánimo de lucro y otros, para prevenir el «extremismo violento» doméstico, según la propuesta de Obama.
La primera tanda de subvenciones se puso en marcha en 2016 en el «Programa de Subvenciones para Contrarrestar el Extremismo Violento», durante el último año del segundo mandato de Obama, según el informe del Media Research Center.
En 2017, el DHS de Trump interrumpió el programa durante tres años antes de que fuera restablecido por el secretario en funciones del DHS, Kevin McAleenan, en 2019, según el informe.
McAleenan propuso una nueva estrategia (pdf) de «lucha contra el terrorismo y la violencia selectiva» para proteger al país de «organizaciones terroristas extranjeras», «actores nacionales inspirados por ideologías extremistas violentas» y de atentados «no motivados ideológicamente».
«Se suponía que con estos programas se prevenía el terrorismo en la frontera», dijo Schneider.
«Durante la Administración Trump, en promedio, el DHS detenía o aprehendía a menos de tres terroristas conocidos o sospechosos en la frontera», dijo Schneider. «Los terroristas sabían que la frontera no era porosa; la frontera no es una buena vía para intentar entrar en nuestro país».
«Sólo en el último medio año», continuó Schneider. «En la Administración Biden, han detenido a casi 100 terroristas».
«El número de terroristas que realmente intentan cruzar nuestra frontera se está disparando bajo esta administración, pero en lugar de utilizar el dinero de nuestros contribuyentes para intentar detenerlo, el DHS está utilizando ese dinero contra nosotros», dijo Schneider.
Aunque Joe Biden prometió durante su campaña presidencial poner fin al Programa de Prevención de la Violencia y el Terrorismo de la Administración Trump y sustituirlo por uno nuevo, la Administración Biden en realidad lo renovó, según el informe.
El DHS estableció un nuevo centro para sustituir a la oficina de la era Trump que administraba el programa y creó una nueva rama de inteligencia dentro del departamento dedicada al terrorismo doméstico, según una declaración del DHS.
A ambas nuevas unidades se les encomendó la tarea de «combatir exhaustivamente el extremismo violento interno, incluida la supremacía blanca violenta», según el comunicado.
The Epoch Times se puso en contacto con el DHS para obtener comentarios.
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