Con varias semanas para el inicio de los Juegos Olímpicos en Tokio, el nadador olímpico estadounidense Michael Andrew dijo que no tomará la vacuna anti-COVID.
El joven de 22 años competirá en las pruebas de 100 metros pecho, 200 mariposa y 50 metros libre. Anteriormente había ganado los 100 metros mariposa durante los campeonatos del mundo y el mes pasado quedó en primer lugar en los 100 metros de las pruebas olímpicas de Estados Unidos.
Andrew le dijo a Reuters y a otros periodistas la semana pasada que no recibirá la vacuna porque no quiere experimentar ninguna posible reacción relacionada con la vacuna.
«Mi razón es, por un lado, que en el último momento no quería meterme nada en el cuerpo a lo que no supiera cómo podría reaccionar», dijo Andrew. «Como atleta de élite, todo lo que hacemos está muy calculado. En mi caso, en los ciclos de entrenamiento y especialmente en las pruebas, no quería arriesgarme a pasar ningún día fuera, porque hay periodos en los que, si te vacunas, tienes que afrontar algunos días de baja».
Los atletas que compiten en los Juegos Olímpicos no están obligados a vacunarse. Japón, sin embargo, declaró esta semana una emergencia relacionada con el COVID-19 debido al aumento de las infecciones, lo que hizo que los organizadores anularan la presencia de los espectadores en el evento que comienza el 23 de julio.
Más tarde, en una conferencia telefónica, Andrew, quien dijo que probablemente no recibirá la vacuna en un “futuro lejano, dijo que cumplirá con las pruebas para COVID-19 y otros protocolos mientras esté en Tokio. Eso incluye, dijo, «muchas pruebas, máscaras, distanciamiento social, obviamente mantenerse alejado de las multitudes, todo eso».
«USA Swimming y todos los que estamos aquí hemos seguido un protocolo muy estricto con muchas pruebas, máscaras, socialmente distanciados, obviamente manteniéndonos alejados de las multitudes, todo eso», añadió Andrew.
El director ejecutivo de USA Swimming, Tim Hinchey, dijo que cree que “alrededor del 90 por ciento” del equipo nacional de EE.UU. ha recibido la vacuna.
Hace unas tres semanas, el receptor de Buffalo Bills anunció de manera similar que no recibiría la vacuna anti-COVID. Dijo que preferiría retirarse antes que recibir la inyección.
“Estaré afuera haciendo lo que hago. Estaré en público. Si me tienes miedo, aléjate o vacúnate”, escribió en un tuit. «Puedo morir de COVID, pero prefiero morir realmente estando vivo».
Beasley añadió: «Múltame si quieres. Mi forma de vivir y mis valores son más importantes para mí que un dólar. Quiero a mis compañeros de equipo y disfruto jugando porque todos los momentos de disfrute se van rápidamente. Sólo quiero ganar la Super Bowl y disfrutar de estas relaciones que se crearán por el camino».
COVID-19 es la enfermedad causada por el virus del PCCh (Partido Comunista Chino).
The Epoch Times se ha puesto en contacto con el equipo de EE.UU. para obtener comentarios.
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