La gobernadora de Michigan, Estados Unidos, Gretchen Whitmer, confirmó que su marido pidió un trato especial a un trabajador, pero aseguró que la petición era una broma.
«Mi marido hizo un intento fallido de humor la semana pasada cuando estaba registrando la pequeña empresa que ayuda con nuestro barco y el muelle en el norte. Sabiendo que no habría diferencia, preguntó en broma si estar casado conmigo podría hacerle entrar en la lista de espera», dijo Whitmer a los periodistas el martes.
«Obviamente con la prohibición de los botes motorizados en nuestros primeros días de COVID-19, pensó que podría ser divertido. No lo fue. También para ser honesta, yo tampoco me reí cuando me lo transmitieron porque sabía cómo sería percibido», agregó.
El propietario de NorthShore Dock LLC, Tad Dowker, dijo que el esposo de Whitmer, Marc Mallory, pidió que su barco fuera puesto en el agua antes del Día de la Recordación.
Mallory y Whitmer son dueños de una casa a unos 25 minutos de Traverse City, que se encuentra en el norte de Michigan.
Dowker escribió en Facebook que las duras restricciones que Whitmer impuso para tratar de frenar la propagación del virus del PCCh (Partido Comunista Chino), le costaron a su compañía tres semanas. Cuando un hombre llamó queriendo su barco en el agua, Dowker dijo que era imposible.
«Bueno, el personal de nuestra oficina le había explicado esto al hombre y él respondió: ‘Soy el esposo del gobernador, ¿esto hará una diferencia?'», relató Dowker.
Según Whitmer, su marido lamenta lo que dijo.
En una declaración a los medios de comunicación antes de la admisión de la gobernadora, su oficina se negó a abordar «cada rumor que se difunde en línea», añadiendo que «ha habido mucha desinformación difundida en línea atacando a la gobernadora y a su familia y las amenazas de violencia contra ella personalmente son francamente peligrosas».
En la conferencia de prensa la gobernadora demócrata dijo a los periodistas que su marido sí viajó a su segunda casa, después de que ella permitió que algunas partes del norte de Michigan se reabrieran.
«Así que, como saben, hace unas semanas eliminamos las prohibiciones de viaje, de modo que si la gente tenía una segunda residencia, se le permitía ir a una segunda residencia», dijo Whitmer“.
Mi marido fue a nuestra casa (…) y rastrilló algunas hojas y volvió a casa. Así que él estuvo allí», continuó.
«No nos amontonamos todos en el coche para ir a disfrutar de nuestro segundo (hogar) aunque eso hubiera estado permitido si lo hubiéramos hecho. El hecho es que él estuvo allí brevemente, por una noche, una o dos noches y regresó a casa después de rastrillar nuestras hojas».
Katabella Roberts contribuyó a este informe.
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