El Departamento de Defensa (DOD) de Estados Unidos anunció que seguirá adelante con el desarrollo de una bomba nuclear mucho más potente que las lanzadas sobre Japón durante la Segunda Guerra Mundial.
El Pentágono buscará la aprobación del Congreso para fabricar una versión moderna de la bomba nuclear de gravedad B61, o la B61-13, según una declaración del DOD.
«El anuncio de hoy refleja un entorno de seguridad cambiante y las crecientes amenazas de potenciales adversarios», declaró el subsecretario de Defensa para Política Espacial, John Plumb. «Estados Unidos tiene la responsabilidad de seguir evaluando y desplegando las capacidades que necesitamos para disuadir de forma creíble y, en caso necesario, responder a ataques estratégicos, y dar seguridad a nuestros aliados».
El medio Defense Post informó que la bomba B61-13, que equivaldría a la energía de 350 kilotones de TNT, sería aproximadamente 24 veces más poderosa que la bomba atómica lanzada sobre Hiroshima. La bomba de la Segunda Guerra Mundial, llamada «Little Boy», tenía alrededor de 15 kilotones de TNT.
La bomba tendría un rendimiento máximo de unos 360 kilotones, sugirió Hans Kristensen, experto en armas nucleares de la Federación de Científicos Estadounidenses, informó Defense News. El experto dijo al medio de prensa que el Departamento de Defensa le informó la semana pasada sobre la propuesta y que la bomba utilizará las mismas ojivas de las bombas B61-7 que se produjeron en las décadas de 1980 y 1990.
La nueva bomba B61 podría ser lanzada por aviones modernos, según el Pentágono, dando al ejército estadounidense «opciones adicionales contra ciertos objetivos militares más duros y de gran superficie».
«El B61-13 representa un paso razonable para gestionar los desafíos de un entorno de seguridad altamente dinámico», dijo el subsecretario de Defensa Plumb. «Si bien nos proporciona flexibilidad adicional, la producción del B61-13 no aumentará el número total de armas en nuestro arsenal nuclear».
El presidente del Comité de Servicios Armados de la Cámara de Representantes, Mike Rogers (R-Ala.) y el senador Roger Wicker (R-Miss.), afirmaron que el arma nuclear propuesta proporcionaría más flexibilidad, y advirtieron que no es un proyecto a largo plazo.
“Como señaló recientemente la Comisión de Postura Estratégica, China y Rusia están en plena carrera armamentista, y Estados Unidos está avanzando hacia lo mismo. Se requiere una drástica transformación de nuestra postura disuasoria —no cambios incrementales o graduales— para abordar esta amenaza”, dijeron los legisladores la semana pasada.
Aumento de tensiones
El anuncio surgió en medio de crecientes tensiones en el Medio Oriente debido a la guerra entre Israel y Hamás, luego de una serie de ataques terroristas llevados a cabo por Hamás a principios de octubre. Las fuerzas israelíes también anunciaron una invasión terrestre de Gaza durante el fin de semana pasado y los funcionarios estadounidenses advirtieron sobre la posibilidad del estallido de una guerra más amplia.
Al mismo tiempo, en Ucrania, los combates continúan en el este del país, un año y medio después de que Rusia lo invadiera. Los funcionarios rusos han señalado en los últimos días que Moscú probablemente abandonará el Tratado de Prohibición Completa de los Ensayos Nucleares en un futuro próximo.
La propuesta llega también después de que el Departamento de Energía confirmara que llevó a cabo una prueba de una explosión en el famoso sitio de pruebas nucleares de Nevada en el mes de octubre, aunque los funcionarios dijeron que se trataba de una «explosión química subterránea». El motivo de la prueba, dijo la agencia, es probar cómo el ejército puede detectar explosiones nucleares de bajo rendimiento.
«El experimento ayudará a validar nuevos modelos predictivos de explosiones y algoritmos de detección», afirmó el Departamento de Energía. «Las mediciones se realizaron utilizando acelerómetros, sismómetros, sensores de infrasonidos, sensores electromagnéticos, muestreadores químicos y de radiotrazadores y sensores meteorológicos».
A su vez, el Pentágono afirmó que el desarrollo propuesto del B61-13 no tiene nada que ver con los recientes acontecimientos mundiales.
«El despliegue del B61-13 no es una respuesta a ningún evento actual específico», afirmó el DOD. «Este refleja una evaluación continua de un entorno de seguridad cambiante».
Estados Unidos tiene alrededor de 5200 armas nucleares en su arsenal, mientras que Rusia tiene aproximadamente 5900 armas nucleares, según la Federación de Científicos Estadounidenses. Sin embargo, ambos países tenían significativamente más armas nucleares durante el apogeo de la Guerra Fría hace décadas.
Mikhail Ulianov, enviado ruso ante las Naciones Unidas, dijo a principios de octubre que Rusia continuaría manteniendo su moratoria sobre los ensayos nucleares a menos que el parlamento revocara el Tratado de Prohibición Completa de los Ensayos Nucleares.
«Nunca hay que decir nunca. Las pruebas pueden reanudarse bajo ciertas circunstancias. Creo que tal acontecimiento sería negativo para el mundo moderno, para mantener la estabilidad”, dijo el Sr. Ulianov a los medios estatales rusos. «Ya tenemos suficientes turbulencias en las relaciones internacionales y no querríamos que se agregue otro factor poderoso».
Un nuevo informe del Pentágono advirtió que el Partido Comunista Chino (PCCh) ha acumulado más de 500 ojivas nucleares hasta mayo, aumentando su arsenal en unas 100 desde 2021.
El PCCh «se está preparando para una contingencia para unificar Taiwán con [China] por la fuerza si Beijing lo considera necesario», dice el informe del Pentágono, el que se produjo cuando el ejército chino había realizado incursiones más regulares cerca de Taiwán y había desplegado más buques de guerra en la región.
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