Washington ha dicho que no devolverá a Beijing los restos del globo espía chino derribado, mientras que un alto funcionario chino ha pedido que se devuelvan los restos de la nave.
El portavoz del Consejo de Seguridad Nacional, John Kirby, dijo el lunes que no hay planes de devolver a Beijing los restos del globo derribado, que China afirma que era una «aeronave civil», pero que las autoridades estadounidenses insisten en que era una nave espía militar.
«No conozco ninguna intención de planes para devolverlo», dijo Kirby, añadiendo que los militares estadounidenses han recuperado algunos de los restos y continúan los esfuerzos de recuperación.
«Han recuperado algunos restos fuera de la superficie del mar y las condiciones meteorológicas no permitieron mucha vigilancia submarina del campo de restos», dijo.
Los buzos de la Marina estadounidense «en los próximos días podrán bajar y echar un mejor vistazo a lo que hay en el fondo del océano, pero esto acaba de empezar», añadió Kirby.
El mismo día que Kirby dijo que no había planes para devolver los restos a Beijing, el embajador de China en Francia, Lu Shaye, dijo en una entrevista con el canal de noticias francés LCI, que los restos del buque deberían ser devueltos a China.
«Si recoges algo en la calle, deberías devolvérselo al propietario, si sabes quién es el propietario», dijo Shaye, según una transcripción publicada el miércoles en la cuenta oficial de WeChat de la embajada china.
Shaye añadió que si Estados Unidos no quiere devolverlo, «es su decisión», pero que eso equivaldría a «deshonestidad».
Sus declaraciones representan la primera vez que China expresa oficialmente su deseo de recuperar el globo tras su derribo frente a las costas de Carolina del Sur.
Derribo del globo espía
El globo espía fue localizado por primera vez el 1 de febrero flotando sobre Montana, donde merodeaba sobre zonas sensibles donde se guardan cabezas nucleares en silos.
El descubrimiento del globo provocó una oleada de peticiones por parte de legisladores y otras personas para derribarlo, y finalmente el ejército estadounidense lo derribó el 4 de febrero frente a la costa de Carolina del Sur utilizando un único misil supersónico aire-aire AIM-9X de búsqueda de calor.
El Partido Comunista Chino (PCCh) criticó el ataque militar contra el objeto, alegando que se trataba de una «aeronave civil» utilizada para fines meteorológicos y otros fines científicos y que se había desviado en el espacio aéreo de EE. UU. «completamente accidental».
Preguntado sobre si China quería recuperar los restos de la nave, un portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores chino dijo durante una rueda de prensa el martes que «la aeronave no pertenece a EE. UU. Pertenece a China».
Funcionarios estadounidenses han rechazado completamente las afirmaciones de que el aparato fuera civil, describiendo el globo como una aeronave de espionaje militar con un dispositivo colgando de la parte inferior del tamaño de un pequeño jet.
El asesor de seguridad nacional Jake Sullivan dijo que Estados Unidos «explotará» cualquier parte de la nave o de su carga útil que se recupere para conocer mejor su sistema.
Sullivan dijo que los oficiales militares querían que fuera derribado sobre el agua para «crear una mayor posibilidad de que pudiéramos aprovechar efectivamente los restos que si fuera derribado sobre tierra».
Publican las primeras fotos de los restos del globo espía
El lunes por la noche, el Mando Norte de EE. UU. (NORCOM, por sus siglas en inglés) publicó las primeras fotos de los esfuerzos para recuperar el globo.
Las fotos capturadas por personal militar de EE. UU. muestran a las fuerzas tratando de recuperar los restos del globo en la noche del domingo. Un gran trozo del globo se ve siendo arrastrado a un pequeño barco por los marineros.
Según las descripciones de las fotos, los marineros asignados al Grupo 2 de Desactivación de Artefactos Explosivos fueron desplegados para recuperar el globo cerca de Myrtle Beach, Carolina del Sur. Durante el fin de semana, las autoridades locales pidieron a los residentes que evitaran tocar el globo en caso de que aparecieran trozos en la costa, después de que fuera derribado por un caza F-22 Raptor el sábado por la tarde.
El NORCOM también publicó imágenes del F-22 que se utilizó para derribar la nave militar china. El Pentágono confirmó previamente que el avión despegó de la base aérea de Langley, en Virginia, para llevar a cabo la misión.
El jefe del NORCOM y del Comando de Defensa Aeroespacial de América del Norte (NORAD) dijo el lunes que el globo tenía unos 200 pies de altura y pesaba miles de libras.
“La evaluación del globo fue de hasta 200 pies de altura para el globo completo”, dijo el general Glen VanHerck a los periodistas, según una transcripción publicada por el Pentágono. “La carga útil en sí, yo la clasificaría como del tamaño de un avión de pasajeros, tal vez un jet regional como [un] ERJ o algo por el estilo. Probablemente pesó en el acceso un par de miles de libras».
VanHerck explicó entonces por qué el ejército de EE. UU. no derribó el globo cuando fue descubierto por primera vez el mes pasado cerca de Billings, Montana. Poco después de que fuera localizado, hubo varias peticiones para derribarlo.
“Imagínese que caen del cielo grandes escombros de cientos, si no miles, de libras”, dijo VanHerck. “Eso es realmente de lo que estamos hablando”.
VanHerck dijo a los periodistas que podría haber explosivos en el avión, y dijo que eso influyó en su decisión de no derribarlo sobre territorio estadounidense.
La Guardia Costera estadounidense informó el lunes de que estaba imponiendo una zona de seguridad temporal en las aguas de Surfside Beach (Carolina del Sur), en la zona donde fue derribado el globo.
Los acontecimientos en torno al globo espía han aumentado la tensión entre Estados Unidos y China y han puesto de relieve la fragilidad de su rivalidad, que algunos temen pueda degenerar en una guerra abierta.
Paul Crespo, presidente del Center for American Defense Studies, afirmó que la trayectoria del globo derribado por el ejército estadounidense podría sugerir «absolutamente» que el régimen comunista chino estaba llevando a cabo un simulacro de ataque con armas montadas en globos.
Crespo advirtió que el régimen podría utilizar globos a gran altitud para llevar a cabo ataques de pulso electromagnético (EMP) contra bases e infraestructuras vitales de Estados Unidos.
«Aunque China ha probado misiles hipersónicos lanzados desde globos en el pasado, no es probable que utilice estos dirigibles», dijo Crespo a The Epoch Times en un correo electrónico.
«La mayor amenaza es enviar uno o más de estos globos de gran altitud sobre Estados Unidos con un pequeño dispositivo nuclear PEM».
Los PEM son ráfagas de energía electromagnética que interrumpen las comunicaciones y dañan los equipos electrónicos.
Con información de Andrew Thornebrooke, Jack Phillips, Reuters y The Associated Press.
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