El secretario de Estado republicano de Georgia, Brad Raffensperger, dijo que no renunciará luego que los senadores David Perdue (R-Ga.) y Kelly Loeffler (R-Ga.) pidieran su renuncia entorno a las denuncias de irregularidades en la votación.
“Hoy temprano, los senadores Loeffler y Perdue pidieron mi renuncia”, dijo Raffensperger en una declaración. “Permítanme comenzar diciendo que eso no va a suceder. Los votantes de Georgia me contrataron y serán los votantes quienes me despidan», agregó.
En una declaración conjunta el lunes, los dos senadores de Georgia dijeron que Raffensperger debería dimitir de inmediato, alegando que no ha podido llevar a cabo elecciones honestas y transparentes.
“La gestión de las elecciones de Georgia se ha convertido en una vergüenza para nuestro estado. Los residentes de Georgia están indignados, y con razón”, escribieron Loeffler y Perdue.
“Hemos sido claros desde el principio: todos los votos legales emitidos deben contarse”, prosiguieron. “Cualquier voto ilegal no debe ser [contado]. Y debe haber transparencia y uniformidad en el proceso de conteo. No es difícil. Esto no es partidista. Esto es estadounidense. Creemos que cuando hay fallas, deben ser denunciadas —incluso cuando son del propio partido», agregaron.
Sus comentarios reiteraron los comentarios hechos por el presidente Donald Trump, quien afirmó que las boletas emitidas ilegalmente han jugado un papel importante en las elecciones de este año.
El gerente de implementación del sistema de votación de Georgia, Gabriel Sterling, dijo el lunes que las elecciones son «imperfectas» y que los funcionarios seguramente encontrarán que algunas personas votaron ilegalmente. Sin embargo, agregó que no considera que la escala de irregularidades en las votaciones sea lo suficientemente significativa como para cambiar el resultado.
«Vamos a encontrar que la gente votó ilegalmente», dijo Sterling, según The Associated Press. “Eso va a suceder. Habrá personas que votaron doble. Habrá personas que no deberían ser calificadas como un votante registrado para votar en el estado. Eso se descubrirá. ¿Esto son 10,353? Improbable».
Hasta el lunes 9 de Noviembre, el contendiente demócrata Joe Biden lideraba a Trump por 10,353 votos de casi 5 millones de votos emitidos, una ventaja de alrededor de 0.2 puntos porcentuales. La ley de Georgia permite a los candidatos solicitar un recuento si el margen es de 0.5 puntos porcentuales o menos.
“Han habido demasiadas fallas en las elecciones de Georgia este año y estas elecciones han expuesto nacionalmente los problemas», escribieron Loeffler y Perdue. “Si bien la culpa ciertamente también está en otra parte, la responsabilidad finalmente recae en el secretario de Estado. La mala gestión y la falta de transparencia del secretario de Estado es inaceptable. Las elecciones honestas son fundamentales para la base de nuestra democracia».
Raffensperger reiteró la afirmación de los senadores sobre los votos emitidos legalmente y prometió «seguir luchando todos los días para garantizar [unas] elecciones justas en Georgia, que cada voto legal cuente y que los votos ilegales no se cuenten».
“Sé que las emociones están subiendo. La política está involucrada en todo ahora mismo. Si yo fuera el senador Perdue, me irritaría estar en una segunda vuelta. Y tanto los senadores como yo estamos insatisfechos con el posible resultado para nuestro presidente”, agregó.
Raffensperger dijo a los periodistas la semana pasada que su oficina está comprometida a investigar «inquietudes legítimas» sobre irregularidades en la votación.
“Si algún miembro del pueblo plantea inquietudes legítimas, las investigaremos. Estamos comprometidos a hacer cualquier cosa para mantener la confianza en nuestro proceso electoral para todos los residentes de Georgia, independientemente de sus preferencias partidistas”, agregó.
Raffensperger concluyó su declaración del 9 de noviembre diciendo: «Mi trabajo es cumplir la ley de Georgia y asegurarme de que todos los votos legales, y no los votos ilegales, se cuenten de manera adecuada y precisa».
La investigación electoral realizada por The Associated Press encontró que han habido al menos 31 recuentos en todo el estado desde el 2000, y tres de ellos cambiaron el resultado de las elecciones.
Con información de Zachary Stieber.
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